Dentro del fenómeno de los juegos inspirados en trabajos pocos pueden presumir tanto como los simuladores de limpieza. Una actividad muy satisfactoria para mucha gente, como demostró el brutal éxito de PowerWash Simulator, que finalmente contará con una secuela (desconocemos si seguirá la compleja trama llena de giros de guion de la primera entrega, completamente necesarios para su planteamiento jugable). El caso es que si combinas algo que suele gustar como el skate con la limpieza, te sale algo como Mop Skater, el peculiar juego que queremos mostrarte.
Aclaramos que no es un mod de Tony Hawk's Pro Skater o algo por el estilo. Estamos hablando de un juego completo, que aunque toma las ideas básicas de aquel luego demuestra tener su propio gimmick centrado en la mopa que protagoniza la experiencia.
Mop Skater: la vistosidad de los trucos con un monopatín combinada con la satisfacción de la limpieza
La idea básica de este juego es que en lugar de un monopatín, como seguramente podréis imaginar, manejamos una mopa que, sujetando firmemente por el palo, podremos usar para hacer trucos sobre bordillos, barandillas o superficies de todo tipo que se reparten por el escenario. A medida que vamos pasando por ellas podemos hacer giros, saltos o cambios de sentido con los que conseguir puntos... pero eso no es todo.
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Aunque todos hemos hecho en algún momento air guitar con la escoba o le hemos cantado al palo de la fregona, al final el objetivo es limpiar y este es realmente nuestra misión en Mop Skater. Divertíos, saltad por barras y girad el mocho todo lo que os apetezca... pero no olvidéis que dejar las superficies relucientes es un trabajo y lo que debéis conseguir. Pero nada os impide divertiros por el camino, por supuesto.
Si el juego os interesa, lo tenéis disponible en PC por algo menos de 10 euros a través de Steam. No es que haya tantas opciones para los fans del skateboarding (hasta que Tony Hawk vuelva con remakes este mismo verano), así que cuando además lo hace con una combinación original de ideas... pues no está mal darle un tiento.
