El mercado de juegos físicos se va reduciendo a marchas forzadas. Esto es algo que se podía intuir durante los últimos años y ahora tenemos datos concretos, al menos en Estados Unidos, de cómo han cambiado las costumbres de los compradores en la actual generación.
Mat Piscatella de Circana ha publicado una gráfica bastante clara de la evolución del mercado físico desde 2000. En 2008 se alcanzó un pico y desde entonces -precisamente con el crecimiento de la distribución digital en consolas- las ventas de juegos físicos cayeron hasta estabilizarse en 2016.
El mercado sufrió en 2020 la pandemia del COVID, que aceleró más el interés por las descargas: desde 2021, la compra de juegos físicos ha bajado más de la mitad, y supone un 85 % menos que en 2008. Eso sí, el gasto en juegos digitales, suscripciones y contenido descargable ha ido en aumento desde 2019.
Las causas de este cambio en el mercado
Hay varias razones por las que muchos jugadores prefieren la distribución digital al mercado físico. La más obvia es que hay modelos de consolas exclusivamente digitales (Xbox Series S, PS5 Digital Edition) donde no hay otra opción, pero también las ofertas actualizadas cada semana en la distribución digital o la facilidad para adquirir un juego.
Medios como Gamevro también creen que el stock limitado de ciertos juegos en Nintendo Switch, que es una consola donde generalmente todavía se venden más juegos en formato físico, contribuye a que cada vez más los usuarios opten por la descarga.
"Veremos si Nintendo Switch 2 puede ayudar a ralentizar o revertir esta tendencia en 2025", comenta Piscatella sobre el lanzamiento de la nueva consola de Nintendo.