Quería hacer un análisis en condiciones de Crazy Pixel Streaker, pero ciertamente ha sido imposible, y de hecho creo que es mucho más conveniente hacer un artículo de opinión sobre los diferentes puntos acerca de los que podemos expresar nuestros pensamientos, en lugar de sólo un análisis donde al final tenemos una conclusión y una nota.
Crazy Pixel Streaker es un juego hecho en Barcelona por un equipo desarrollador llamado Lubiterum Studio, originario de varios lugares de España, y cuya experiencia como conjunto se compone de varios juegos que se encuentran entre la parodia, el recuerdo de otros tiempos, y finalmente la entrada en los juegos de móvil.
Este equipo decidió apostar por llevar su juego a una iniciativa que hay en la capital catalana llamada Game BCN, la cual consiste primero en la elección de varios proyectos de videojuegos para ser incubados, y posteriormente ser acelerados para poder ser lanzados comercialmente. Y fueron superando prueba tras prueba.
Fue considerado uno de los juegos más atractivos en la presentación pública, con una imagen delante del respetable muy fresca y rompedora, y una pequeña campaña de comunicación en territorio catalán apoyada en varios "influencers" locales y la escena independiente barcelonesa, a los que se añadía un mentor de campanillas como Daniel Sánchez Crespo, creador de Invizimals y uno de los desarrolladores más conocidos de España. Posteriormente fue aceptado por parte del ICEC (Institut Català de Empreses Culturals) y La Caixa como uno de los proyectos más interesantes para invertir en ellos, y para rematar la faena un nuevo editor, que es The Sidekicks, con ideas originales y proyectos bastante interesantes, se hizo cargo para lanzarlo al mercado.
Sobre el papel, nada debería ir mal. Para quien no conozca a Crazy Pixel Streaker, del que ya hemos hablado alguna vez, es un juego que mezcla con bastante habilidad el rogue lite estilo Nuclear Throne (por simplificarlo muy mucho) con un multijugador muy cafre. Una premisa tan loca como el manejo de uno o varios espontáneos en un partido de fútbolm en el que la gracia empieza con unos pocos miembros de seguridad intentan evitar que sigamos en el campo, pero que al final nos encontramos con una verdadera batalla campal, e incluso algún homenaje videojueguil intentando derrotarnos.
Crazy Pixel Streaker se ha fogueado notablemente en todo tipo de campos. Me he encontrado este juego en varios lugares de la geografía española, europea y estadounidense. Y siempre he visto la misma reacción: sorpresa e incredulidad al principio, una ligera atracción al poco tiempo (vamos a darle una oportunidad, que diferente si parece), y adicción al rato. De hecho, siempre que me lo he encontrado en un evento, se ha acabado convirtiendo en el rey de la zona, algo que tiene sentido al tener un multijugador a cuatro jugadores que favorece las partidas rápidas, y situaciones sorprendentes que hacen que públicos más amigos de la expresión excesiva, como el estadounidense, se entreguen en vítores y gritos, los cuales atraen a otros jugadores.
Por desgracia, Crazy Pixel Streaker no ha conseguido, de ninguna manera, atraer a la prensa especializada. Al principio podemos entenderlo, ya que era un juego independiente realizado por una pequeña empresa española, y si no se realiza una buena campaña de comunicación es fácil quedarse en el terreno local, lo cual no le interesa a ningún juego con ciertas aspiraciones económicas o de número de jugadores.
Tras haber quedado como juego destacable de la primera edición de Game BCN ciertamente debería haber experimentado un salto de calidad, ya que ahí ha habido cierta competición contra otros rivales muy dignos (como Aragami, un juego de Playstation 4 y PC apoyado por Sony Europa), pero por desgracia tampoco se hizo un exceso de comunicación en ese aspecto. Más incomprensible es lo que pasó con The Sidekicks, ya que tras anunciar que se encargaban de su distribución tuvieron un par de jornadas de comunicación con la prensa especializada, pero para sorpresa de unos y otros casi ningún medio europeo (nosotros si estuvimos allí) respondió positivamente a la invitación, salvo los medios franceses más afines a los juegos independientes.
De hecho, The Sidekicks, que tienen otros juegos interesantes en su rampa de lanzamiento, han apostado fuerte por el juego, llevándolo a eventos a lo largo y ancho del globo, y como hemos dicho antes, con resultados positivos. Pero una vez el juego se puso en Early Access, ya vieron los chicos de Lubiterum que la batalla iba a estar reñida... en el mejor de los casos. No tuvieron ninguna repercusión mediática, y tampoco demasiadas ventas.
Y para rematar la faena, el lanzamiento de la versión final se produjo el 7 de junio, muy cerca de fechas del E3 (14-16 de Junio). Tal vez no sea algo de conocimiento común, pero la semana de antes del E3 lo que se hace por parte de una enorme cantidad de la prensa es preparar el E3, viajar a Los Ángeles, y pasar el temido jet lag. Lo que se hace en el E3 es cubrir de la mejor manera posible la enorme cantidad de noticias y anuncios que tienen lugar esos días, y lo que se hace después del E3 es escribir de ese montón de juegos que has probado y aún no has podido hablar. Lanzar un juego durante esas tres semanas hace que sea muy complicado que cuando se empiece a escribir de él siga siendo noticiable, de manera que es mejor esquivar esos momentos.
Además, el juego es muy difícil de analizar en soledad, porque el modo de un jugador es realmente difícil en solitario. Otros juegos que permiten jugar en solitario y en multijugador lo que hacen es adaptar la cantidad de peligros en pantalla a la cantidad de jugadores que participa, pero parece que no es el caso o no se nota demasiado. Así, sobrevivir al primer gran enemigo (una parodia de Guile) es una misión harto complicada. Como ejercicio, echad un ojo a los vídeos en Youtube y veréis que no hay mucha gente que haya superado dicha misión.
Los chicos de Lubiterum ya están en una nueva misión, y The Sidekicks tiene unos cuantos juegos que lanzar este año y el que viene, así que no estaría de más aprender la lección de lo ocurrido con Crazy Pixel Streaker, lo que ya les ha pasado a otros juegos similares como Mega Coin Squad, pero en cambio no parece haberle ocurrido a otros como Videoball, el cual también ha sido "rey de sus eventos" por su componente multijugador, con la diferencia de haber conseguido no sólo alcanzar análisis con grandes notas en medios importantes, sino que se le ha hecho eco hasta de sus curiosos anuncios (lo de Crazy Pixel Streaker son un rato graciosos... para quien le guste ese tipo de humor). Como diría mi madre, "es mejor caer en gracia que ser gracioso", pero además es importante aprender de los errores, no sólo de los propios, sino también de los ajenos.
¡Hasta la semana que viene!