Tan complicado es alcanzar el éxito como mantenerse en lo más alto durante muchos años, y no son pocas las sagas de videojuegos que en su afán de adaptarse a los nuevos tiempos han dado algún que otro traspiés, o directamente han perdido el rumbo. Los carismáticos gusanos de Worms han sufrido en sus propias carnes esto que comentamos, y si bien las entregas con un planteamiento 2D han mantenido siempre un nivel de calidad bastante alto, es con los experimentos 3D donde nunca han terminado de encontrarse a gusto.
Por suerte para celebrar sus 21 años de historia, los británicos Team 17 vuelven a la carga con Worms WMD, para Xbox One, PS4 y PC, una nueva entrega de planteamiento clásico en 2D, pero con novedades bastante divertidas e interesantes. Aunque el juego cuenta con un nuevo motor gráfico, que ofrece un gran nivel de detalle y resolución, tanto en los escenarios como en los personajes, han apostado por ofrecer el sistema de físicas clásico, el de las mejores entregas de la saga. Si disfrutaste en su día de títulos como Worms Armageddon o Worms World Party te sentirás como en casa, y han dado en el clavo con las animaciones, las físicas y los controles, y en definitiva las sensaciones que transmite, las de los mejores Worms.
Ya sabéis, un juego de estrategia por turnos y con unas buenas dosis de acción, en el que tenemos que acabar con las lombrices enemigas utilizando todo tipo de armas, algunas muy divertidas, y también distintos gadgets o herramientas, que nos sirven para movernos por el escenario o para perforarlo y destruirlo.
Las bases de la saga se han mantenido intactas con esta entrega, y además de los clásicos modos multijugador, tanto locales como online (hasta para 6 jugadores), tendremos 20 misiones de entrenamiento (que se pueden superar en bronce, plata y oro), y 30 misiones de la campaña para un jugador, bastante rejugables, ya que cuentan con objetivos secundarios.
Poco a poco, en las misiones de entrenamiento y en la campaña, se van presentando sus novedades, y aunque en algunos casos pueden parecer muy importantes, se han introducido con cuidado, para no alterar demasiado la fórmula clásica, pero que a la vez se sienta como un juego nuevo. Por ejemplo, ahora en los escenarios podemos encontrar edificios en los que nos podemos esconder, para protegernos de ataques aéreos o a distancia, o para encontrar objetos, y esto le da a la acción una nueva capa de estrategia y profundidad. Por supuesto como el resto de elementos de los escenarios, también podemos abrir brecha en los edificios a cañonazos, y dejar al descubierto a los enemigos.
Otras de las novedades más curiosas son los vehículos, tanto tanques como helicópteros, con un gran poder de destrucción y también como elemento en el que cobijarnos, especialmente en el caso de los tanques. Para facilitar la movilidad por el escenario, cuando vamos montados en el tanque podemos dar saltos, lo que le convierte en una máquina de guerra muy útil durante las batallas. Además de las más de 80 armas que tendremos en el juego, cuerpo a cuerpo, de fuego, explosivos y un largo etcétera, ahora en los escenarios podemos encontrar armas montadas, como ametralladoras, morteros o rifles de precisión, todas muy útiles y potentes, por lo que seguro los jugadores correrán para intentar alcanzarlas.
Y la última novedad anunciada y quizás la más curiosa, un sistema de creación de armas, ya que con determinados ingredientes podremos crear nuestro propio armamento o herramientas durante las batallas. Al comenzar una partida contaremos con una serie de ingredientes que nos permitirán fabricar varias armas, pero además también podremos recoger estos objetos de los escenarios, o desmontar armas, para obtener sus ingredientes. En el menú de armas hay una nueva pestaña de creación, y es ahí donde podremos crear nuestro equipo, entre turnos, pero sin perder una acción. Vamos, que en un mismo turno podemos ponernos a fabricar un arma pero a la vez realizar unos disparos.
Después de jugar a una beta, con unas pocas misiones y el modo multijugador local, las sensaciones con Worms WMD no pueden ser mejores. Quizás lo hemos cogido con ganas porque llevábamos unos cuantos años sin jugar a una entrega de la saga, y nos han venido de golpe todos aquellos recuerdos de lo bien que nos lo pasamos con las primeras entregas, hace ya más de 15 años. Pese al tiempo transcurrido, la fórmula ha envejecido bien y sigue vigente, y el gran lavado de cara que le han dado a los gráficos, más las pequeñas novedades jugables, y el haber sabido mantener las sensaciones de las físicas y los controles, nos hacen sospechar que vamos a estar ante uno de los mejores Worms de los últimos años.
Como un curioso extra para quienes quieran reservarlo (se pondrá a la venta el 23 de agosto), Team17 ha creado una serie de contenidos como armas, vehículos, apariencias para los gusanos e incluso mapas, inspirados en todo tipo de juegos: Rocket League, Goat Simulator, Saints Row IV, Broforce o Yooka-Laylee, entre otros. Habiendo además un pack exclusivo de Xbox One, con personajes de Rare de juegos como Perfect Dark, Killer Instinct y Battletoads, y otro de Steam, con elementos de personalización de Team Fortress 2.
Preparados para volver a combatir en las batallas más gamberras
Worms WMD se pondrá a la venta el 23 de agosto en PS4, Xbox One y PC, y si ya habéis disfrutado de alguna entrega de esta divertida saga, no lo perdáis de vista, porque estos simpáticos gusanos regresan con muchas ganas de hacer las cosas bien. Si nunca habéis jugado a un Worms, también puede ser un gran momento para darle una oportunidad, porque sigue siendo un tipo de juego único con su mezcla de estrategia y acción, peso a los años transcurridos.
Hemos escrito estas impresiones gracias a una beta de la versión de PC que nos ha proporcionado Team17. El ordenador en el que lo hemos jugado es un CoolPC de Coolmod.com, cedido por NVIDIA, que tiene las siguientes características:
- GeForce GTX 980 Ti 6GB
- i7-6700K 4GHz
- 16GB de RAM