Lejos de dormirse en los laureles de saberse el simulador de baloncesto más completo, NBA 2K sigue reinventándose cada año para acercar más al jugador la sensación de estar en una cancha de baloncesto real y de que se implique en la cultura del baloncesto. Cada nuevo NBA 2K tiene novedades destacables, no es una simple actualización de plantillas y pequeñas modificaciones.
Este año NBA 2K16 busca profundizar un poco más al contar con Spike Lee para la dirección y el guión del modo historia, y ha introducido mejoras visuales y cambios en el control para combinar las habilidades de los jugadores reales con la destreza con el mando de forma que el jugador sienta que interviene en las jugadas y que no se trata sólo de manejar a un buen jugador y encestar, pero que también se note a qué jugador está controlando.
No hemos podido probar el modo historia, así que no hemos podido comprobar hasta qué punto se percibe como distinto cada equipo cuando te enfrentas en la liga con ellos y si reaccionan de verdad ante los resultados que hay en cada enfrentamiento, pero sí hemos jugado un par de partidos con los Golden State Warriors para ver cómo funcionan en la cancha las novedades jugables.
La sensación que nos ha quedado es que visualmente es mejor en algunos aspectos, los partidos son cada vez más cercanos a la realidad en pantalla, y la jugabilidad es una mezcla de las innovaciones del año pasado y de recuperación de años anteriores, en una combinación muy acertada; no demasiado intuitiva pero sí fácil de entender y que te lleva a estar metido en el juego.
El movimiento de los jugadores es más natural al realizar giros o avanzar
Pese a que el juego es todo un espectáculo para la vista en PS4, hay dos cosas que no nos acaban de convencer. Una es el sudor, muy bien plasmado en pantalla, pero que aparece casi desde el principio de cada partido, lo que le resta realismo. La otra es la imagen de algunos jugadores en la pantalla de carga. Esperemos que al menos a Pau Gasol le cambien la foto en la versión final del juego, porque en la que vimos en la presentación de plantillas para un encuentro contra los Chicago Bulls era terrible.
Visual Concepts no ha informado de cuántas animaciones ha incluido este año, probablemente no sean las 6.000 de NBA 2K15 cuando el estudio trataba de dar un empujón a este apartado, pero sí hay sin duda, porque todo se ve más fluido. Una vez en la cancha el movimiento de los jugadores se ve más natural, sobre todo en los pies, debido a una tecnología de pisada que detecta cuando el pie del jugador entra en contacto con el parqué. No sólo da mayor realismo sino que sirve -para los ojos avezados- para ver mejor la jugada cuando el jugador avanza o cuando cambia de dirección. La fidelidad con el movimiento de un jugador real es tal que puedes prever hacia dónde va a ir o está yendo tu oponente.
Otro de los mejores avances para este año es la sensación de tener un peso físico que transmite cada jugador. Si vas corriendo en un ataque y chocas contra un defensor más grande que tú, es muy probable que pierdas el balón debido al impacto. Es casi como si sintieras el golpe físicamente en el mando.
El año pasado Visual Concepts realizó algunos cambios en un control que ya se percibía como excelente, y este año ha consolidado algunas de las modificaciones de NBA 2K15 y ha rectificado otras. Entre lo que deja e incluso ha reforzado está el indicador a los pies del jugador en el que hay una ventana con las opciones de tiro y un indicador que se mueve cuando empiezas a lanzar. Debes pulsar en el momento adecuado para encestar. Si el indicador está en verde (en función del jugador y de la posición que tenga en ese momento), el tiro entra seguro, y si está en amarillo tienes menos probabilidades, pero puede entrar.
Un indicador de posición para cuando defiendes
Este indicador se ha mostrado muy eficaz para que no siempre encesten los jugadores buenos, porque también dependen de cómo actúe quien sostiene el mando. Al mismo tiempo, facilita a los menos expertos en NBA 2K poder jugar porque, si no has jugado mucho, sólo debes fijarte en ese indicador para meter la pelota.
Quizás pensando en este segundo tipo de jugadores se ha introducido esta referencia visual en la defensa; cuando estás presionando la barra verde indica que estás en la mejor posición para impedir la jugada de ataque. No es probablemente tan necesario como en el tiro, pero puede servir para guiarte e impedir las faltas intencionadas en cuanto metes la mano.
A la hora de controlar el balón ahora priman los botones, para que la acción sea más rápida. Con X pasas y amagas, con el círculo pasas con un bote o pasas sin mirar con doble toque y con triángulo haces un globo o, con doble pulsación, un alley oop. Es un poco complicado hacerse con todos ellos, pero nuevamente el juego consigue así adaptarse a los jugadores más novatos que no tienen pensar en nada más y aquellos más expertos que sí quieren aprender más profundidad en las distintas posibilidades.
Antes de probar estos cambios teníamos reticencias de que enturbiasen una experiencia que era magnífica el año pasado, pero lo que hemos probado indica que no es así, que lo que ha hecho el estudio es reforzar los puntos buenos y mejorar aquellos donde los jugadores más expertos sentían como un impedimento para meterse en el juego, al tiempo que se mejora la experiencia para los menos expertos. Un año más, parece que Visual Concepts va a lograr superarse a sí mismo. NBA 2K16 se pondrá a la venta el 29 de septiembre en PS4, Xbox One, PC , PS3 y Xbox 360.