La primera entrega de DiRT Rally consiguió que muchos seguidores de los ralis encontraran un referente con el que disfrutar de una simulación fiel y exigente. Ahora, y después de que con DiRT 4 apostaran por otro tipo de pruebas y experiencias de conducción, se ha anunciado el esperado DiRT Rally 2.0. En esta ocasión el videojuego desarrollado por Codemasters ha centrado su interés en los clásicos ralis, pero también y de forma casi equitativa en los populares rallycross, dos disciplinas que hemos podido probar por primera vez y que nos han dejado muy buenas sensaciones.
Una experiencia inmersiva
Una de las grandes cualidades que tuvo la primera entrega fue su gran fidelidad a la hora de transmitir las sensaciones de los coches en las distintas superficies. En esta ocasión han mejorado la distribución de los pesos y refinado el feedback del volante, gozando ahora de un acabado más realista. En este sentido, no hay grandes cambios jugables respecto a su predecesor, disfrutando nuevamente con tramos complejos, ritmos altos de los rivales, sanciones exigentes y ausencia de rebobinado, lo que implica una vuelta a sus orígenes muy acertada.
Obviamente esto no quiere decir que los jugadores menos experimentados no puedan disfrutar de un videojuego accesible y divertido, ya que DiRT Rally 2.0 cuenta con multitud de ayudas que facilitan enormemente la conducción. Aquí debemos destacar el buen control con el mando, disfrutando de un tacto sutil que transmite de manera creíble las sensaciones del coche. Sin embargo, estamos ante un título que saca todo su potencial al jugar con volante, gozando de un manejo mucho más realista y un Force Feedback fuerte y preciso, garantizando con ello una experiencia competitiva de primer nivel.
Otro punto que se ha optimizado respecto a la anterior entrega son las físicas de los impactos. Ya hemos remarcado que el nuevo cálculo de los pesos otorga mayor importancia a los deslizamientos y nos permite sentir con más detalle el comportamiento del coche, algo que también se ha trasladado a los accidentes, ya que el sistema de daños mecánicos es avanzado y reproduce fielmente las averías tanto a nivel de rendimiento como visual.
En esta primera toma de contacto hemos podido competir en un tramo del Rally de Nueva Zelanda y en una pista de rallycross en Canadá. El extenso trazado del rali era mayoritariamente de tierra seca con polvo, lo que nos permitió llevar al límite nuestro pilotaje usando con precisión los deslizamientos, midiendo muy bien las entradas en las curvas y preocupándonos de no impactar contra los obstáculos de las cunetas.
La pista de rallycross era una mezcla entre asfalto y tierra, encontrando aquí un vehículo con menor tracción que nos obligaba a ajustar mejor las frenadas y los puntos de giro, aprovechando las inercias para coger las trazadas más óptimas. Estas competiciones siguen siendo muy divertidas y, aunque la IA rival tiene un comportamiento competitivo, en muchos momentos su agresividad era desmedida, lo que provocaba situaciones fuera de contexto.
Un punto determinante cuando corremos ralis son las órdenes de nuestro copiloto y, aunque la versión final contará con indicaciones en español, en esta ocasión los comentarios todavía estaban en inglés, encontrando un ritmo y una precisión en las notas sobresaliente. Esta gran exactitud nos permitió recorrer a gran velocidad y sin errores un tramo de Nueva Zelanda realmente largo y complicado. Sin duda, DiRT Rally 2.0 ha sabido mantener y pulir la esencia jugable del primer título y, aunque todavía es pronto para conocer la verdadera profundidad de su simulación, las primeras impresiones no han podido ser mejores.
Coches y circuitos
Durante la presentación solo pudimos probar un Volkswagen Golf GTI en el modo rally y un Polo R en rallycross. Ambos vehículos tenían un acabado visual muy detallado y un sonido espectacular, gozando además de un rendimiento muy bien recreado. Por ahora no se han anunciado todos los vehículos que estarán disponibles, aunque hemos conocido algunos coches para los ralis: Ford Mk.2 Escort, Lancia Stratos, Audi Sport Quattro E2, Subaru Impreza (1995), Mitsubishi Lancer Evolution X, Citroën C3, Polo GTI R5, Porsche 911 RGT Rally y Chevrolet Camaro GTR.4; y también los primeros confirmados para rallycross: Audi S1 EKS RX Quattro y Ford Fiesta.
En cuanto a las pistas disponibles, en la modalidad de ralis, además de la mencionada Nueva Zelanda, se incorporan países como Australia, España, Estados Unidos, Polonia y Argentina, un último añadido muy especial que ofrecerá algunos de los tramos más complicados. En la otra disciplina el título cuenta con la licencia oficial del Campeonato del Mundo de Rallycross de la FIA y habrá un total de 8 circuitos reales situados en: Barcelona, Hell (Noruega), Holjes (Suecia), Loheac Bretagne (Francia) Mettet (Bélgica), Montalegre (Portugal), Silverstone (Reino Unido) y el ya mencionado de Trois- Rivieres en Canadá.
Codemasters también ha anunciado que van a continuar incorporando contenido después de su lanzamiento. Para ello han diseñado un programa de dos años, añadiendo en la primera temporada tres escenarios entre ralis y rallycross y cinco nuevos coches, algo que se repetirá para la segunda. En este sentido, han querido dejar muy claro que van a escuchar a la comunidad a la hora de crear nuevas pistas y circuitos, por lo que dependerá en última instancia de los jugadores incorporar uno u otro contenido.
A nivel gráfico el título no presenta una evolución destacable respecto a su predecesor, por lo que no encontramos un acabado técnico muy llamativo. La versión de PC lucía con más definición, menores efectos de popping y modelados más detallados, sin embargo, en PS4 Pro no ofrecía tanta calidad visual, aunque entendemos que el videojuego todavía se encuentra en versión pre-alpha y el estudio tiene muchos meses para mejorar y optimizar su acabado. Lo mejor es que ambas plataformas conseguían mantener estable una excelente tasa de 60 fotogramas por segundo, lo que garantiza una experiencia de conducción de primer nivel. Finalmente, debemos destacar la genial recreación visual de las pistas y vehículos disponibles, así como una implementación muy detallada de la luz y una buena recreación de los daños.
Unos meses de espera
Las primeras sensaciones al volante con DiRT Rally 2.0 no han podido ser mejores, encontrando nuevamente una simulación realista y exigente. En este sentido, hay que dejar clara la importancia compartida entre los ralis tradicionales y el rallycross, una última disciplina que no tiene tantos seguidores en nuestro país. Sin duda, y a falta de probar más en profundidad la simulación y conocer de primera mano los nuevos circuitos, tramos y coches, estamos ante un prometedor videojuego de conducción. Para poder disfrutar de DiRT Rally 2.0 tendremos que esperar hasta el 22 de febrero de 2019, fecha elegida para su lanzamiento en PlayStation 4, Xbox One y PC.
Hemos realizado estas impresiones en PS4 Pro tras asistir a un evento de presentación en Londres invitados por Codematers.