Aunque Microsoft se había hecho con estudios de renombre y con licencias tremendamente jugosas para acompañar a su primera Xbox, el estandarte de la consola llegó de la mano de un estudio relativamente poco conocido, que venía de firmar Oni, un juego que a pesar de contar con cosas muy positivas, pasó bastante desapercibido. Por supuesto, hablamos de Halo, saca icónica donde las haya, que recientemente pasó a mano de 343 Industries para firmar su cuarta entrega numérica.
Pero mientras el Jefe Maestro seguía su curso, Bungie no se quedó de brazos cruzados, sino que se puso a trabajar en Destiny, acompañados esta vez de Activision, para crear una nueva experiencia de disparos en primera persona de ciencia ficción, aunque con toques de rol y ambientado en un universo de mundo abierto que descubrir de manera cooperativa o, si lo preferimos, en solitario. En este aspecto, la base es sencilla. Solos o con amigos, recorreremos diferentes entornos en los que nos cruzaremos tanto con enemigos a batir como con otros jugadores, con quienes podremos elegir si colaborar en favor de todos o imponer nuestra fuerza.
¿Qué nos espera?
La historia nos cuenta la batalla que libra la humanidad, que defiende la última ciudad segura de la Tierra del ataque de los Traveler, un enemigo que apareció hace generaciones, y que haciendo uso de una avanzada tecnología y unos poderes casi mágicos intentan seguir colonizando el sistema solar. Claro que no nos quedaremos limitados por la lucha terrenal, ya que Destiny nos llegará por planetas, satélites, asteroides y otras zonas del Sistema Solar, explorables, como decimos, prácticamente a nuestro gusto, algo que será clave para la experiencia del juego.
El argumento se centrará con particular atención en la Luna, donde nos encontraremos a facciones alienígenas, y que, a través de la interacción con ellas, podremos descubrir nuevos detalles. Aparte de la historia central –que tiene un principio y un final– encontraremos multitud de contenido tanto para juego cooperativo, como competitivo o incluso en solitario, y además, Bungie afirma que tiene pensado seguir expandiendo las posibilidades tras el lanzamiento.
¿Qué zonas conoceremos?
Para concretar un poco más las localizaciones antes de seguir hablando del juego como tal, vamos a hacer un repaso por los escenarios conocidos. Eso sí, os advertimos que si queréis evitar detalles será más que recomendable obviar lo que queda de párrafo y el siguiente en su totalidad. Así, iremos a la "Antigua Rusia", donde exploraremos el Cosmódromo, de Kazajistán, una zona real que sirvió de lanzamiento para el programa espacial ruso. También iremos a Venus, donde lo que un día fue un asentamiento de investigación científica humana, ahora se ha convertido en una jungla azotada por violentas tormentas de sulfuro. En Venus encontraremos la ciudadela de los Vex –raza que, como el resto, comentaremos más adelante–, que guarda una extraña torre.
La exploración planetaria nos llevará también a Marte, donde una gran metrópolis ahora yace bajo toneladas de arena, dejando sólo visibles las puntas de sus rascacielos. Ahí habitan los Cabal, raza enfrentada con los Vex. Habrá también un área llamada "La Torr", descrita como "el Camelot de la Tierra", donde se llevará a cabo el comercio, y que servirá de zona de encuentro. Por último, podremos viajar a la Luna, donde quedan los restos de una colonia humana ahora infectada por los Hive. Señalar también que los mapas serán muy verticales, y que se modificarán con el tiempo. Aparte, contaremos con dos vehículos principales. Uno nos servirá para movernos dentro del mundo abierto en el que nos encontremos, mientras que otro nos permitirá teletransportarnos entre planetas. Ambos serán personales y personalizables.
¿Quién nos espera?
Las razas que acabamos de mencionar tienen rasgos muy distintivos. Por una parte están los "Fallen", piratas espaciales antiguamente nobles, de apariencia arácnida –con cuatro brazos– que se desplazan en robots similares a los mechas. Dentro de los Fallen hay varias clases. Están los Residuos –lo más bajo, con dos brazos amputados–, los Vándalos –que usan espadas y armas en batalla–, los Capitanes –estrategas bélicos, bien armados– y los Patas –drones que sirven principalmente de torretas–.
Los "Cabal" son un imperio industrial y militar, divididos en Legionarios –luchadores medios–, Centuriones –guerreros más ágiles–, Gladiadores –grandes y fuertes– y los Psions, que pueden pilotar naves con su mente. Por otra parte, los "Vex", son una raza mecánica aunque con signos orgánicos que llega a través de una brecha interdimensional, y que se dividen en Trasgos, Minotauros, Hidras y Arpías, cada uno con sus habilidades propias. Por último están los "Hive", una antigua raza cuyos Soldados serán los responsables del ataque, junto a los Caballeros –armados con grandes cuchillos–, los Magos –lanzando potente magia oscura– y el gigantesco Ogro, cuya destrucción podéis imaginar.
¿Quiénes somos?
La pregunta, realmente, sería: ¿Quiénes seremos? Y es que Bungie quiere darnos gran libertad para crear nuestros personajes y reajustarlo a nuestras necesidades según progresamos. No sólo podremos editar nuestro personaje, sino que podremos crear varios y asignarlos a diferentes ranuras para experimentar diferentes roles en la partida. Para crear nuestro Guardián podemos elegir entre diferentes razas, aunque esta decisión sólo afecta a lo estético. Ya sean humanos, "Awoken" o "Exos", habrá multitud de opciones de personalización, aunque el impacto real lo veremos al elegir la clase.
Elegir la clase determina cuál será nuestro papel, que será muy importante para progresar con éxito en el juego. Una clase u otra no nos limitará, pero sí que determinará las opciones para solventar una situación determinada. Aparte, tenemos el "Focus", una habilidad que podremos elegir entre varias de las que delimite nuestra clase. El Focus es tan importante que Bungie lo describe como una "subclase", que evoluciona según sube nuestro nivel, con diferentes desbloqueables propios, y que "determina cómo juegas más que tu propia clase" .
La progresión se lleva en diferentes sistemas arbolados, los cuales determinan desde las granadas, al doble salto, pasando por los ataques cuerpo a cuerpo o el ataque especial. El Focus se cambia, si queremos, en cualquier momento, e idealmente, se combinará con el de nuestros compañeros para complementarse y funcionar como un equipo.
Pasando a los mandos
La jugabilidad, como no podría ser de otra manera, estará muy cuidada, y heredará mucho de Halo. Tanto es así, que, en las propias palabras del estudio, "los fans de Halo se sentirán como en casa" jugando a Destiny. Según explica el estudio, la idea es similar al concepto básico de Halo –en la que combatimos grupos de enemigos diferentes en diferentes zonas, según progresamos–, aunque con mayor libertad. En el arsenal, tendremos arma principal y secundaria, así como un arma pesada y granadas, además de las mencionadas habilidades "Focus" y un ataque especial –que puede ser de ataque, de defensa, de apoyo, de cura...–, también variable en función de nuestro estilo.
Bungie destaca también que es muy fácil entrar y salir del modo cooperativo. Aparentemente, hay un sistema de búsqueda de jugadores en segundo plano, que nos da la posibilidad de cambiar rápidamente entre el juego en equipo o el juego en solitario, y que nos permite también encontrarnos con otros usuarios mientras exploramos, sin tiempos de carga. Además, este sistema limita por zonas el número de jugadores, para evitar que nos veamos rodeados de usuarios en una misión concebida para tres, por poner un ejemplo.
La ambición que puede definir un estudio
Ponerse como meta alcanzar el éxito de Halo es sin duda una señal de ambición, pero con cada nuevo detalle que conocemos, parece más seguro que Bungie y Activision están poniendo toda la carne en el asador para intentar alcanzarlo. Destiny puede redefinir una mecánica que ha funcionado bastante bien en títulos como Borderlands, y puede llevarla al siguiente nivel. Los que disfrutaron con el Jefe Maestro o con el juego de Gearbox que acabamos de mencionar deberían estar siguiéndole la pista muy de cerca a este proyecto, y los que no, deberían hacerlo a poco que les atraiga la idea. Hasta septiembre quedan todavía unos largos meses, pero será entonces cuando por fin sepamos si Bungie ha cumplido con lo prometido.