Hace un par de meses Mike Fischer, presidente de la división estadounidense de Square Enix, dijo que no entendía por qué Activision canceló True Crime: Hong Kong, que tenían que estar locos, porque el juego es fantástico. También dijo que se encontraron con un diamante en bruto a la hora de reconvertirlo en Sleeping Dogs, y la verdad no sabemos cuánto han pulido ese diamante, pero ya con una beta en nuestras manos, a poco más de un mes para su lanzamiento, nos ha gustado bastante lo que hemos jugado.
Sleeping Dogs está siendo desarrollado por los canadienses United Front Games junto con Square Enix London Studios, un sandbox o juego de mundo abierto que transcurre en las calles de Hong Kong, y que nos pone en la piel de un policía infiltrado en las mafias locales, más conocidas como tríadas.
Persecuciones y huidas en coche, con tiroteos incluidos, peleas multitudinarias de artes marciales, secuencias de acción con armas de fuego, persecuciones a pie, y todo con la fantástica ambientación de la vibrante ciudad de Hong Kong, que demuestra ser un gran marco para un videojuego.
La mezcla de todos estos elementos hace que estemos antes un sandbox variado, con muchas cosas por hacer, y siempre muy entretenido e intenso, evitando momentos de tedio, traslados inoportunos y pesados, o misiones repetitivas. El argumento de momento no nos ha demostrado gran cosas, nos cuenta la historia de Wei Shen, un policía estadounidense que por su pasado hongkonés se infiltra en una banda para acabar con una gran tríada local, jugando un doble papel de mafioso sanguinario y de policía al servicio de la ley. Esto da bastante juego, ya que en una mismo misión estaremos realizado acciones criminales, pero a la vez intentando no dañar a civiles o el mobiliario público, y al final de cada misión se nos puntúa nuestra actuación como policía y como mafioso.
Esto nos recuerda bastante al genial film hongkonés Infernal Affairs, que después tuvo un oscarizado remake dirigido por Martin Scorsese titulado The Departed –Infiltrados-, tan consciente es Square de esto que Edison Chen, el protagonista de aquella película, pone voz a un personaje en Sleeping Dogs. Estamos ante un título muy cinematográfico, que a aquellos que habéis disfrutado alguna vez de las películas de artes marciales orientales os va a gustar mucho, aunque también tiene algunas escenas más propias de una espectacular película de acción de Hollywood. En el arranque, además de jugar una trepidante persecución a pie, lo primero que nos enseñan es su sistema de combate, mucho más elaborado que en la mayoría de sandbox, si exceptuamos a Batman: Arkham City claro.
Tenemos un botón de puñetazo, que dependiendo de cuántas veces lo pulsemos realizamos diferentes combos, y si tras un número de golpes lo dejamos pulsado, podremos realizar por ejemplo un rodillazo o una patada voladora. Con otro botón agarramos a los enemigos, con lo que les podemos zurrar, hacer una llave y estrellarlos contra el suelo, o bien estamparlos con algún elemento del escenario, de lo mejor del juego, y de hecho ahora lo explicaremos más en profundidad porque nos encanta.
Además de la acción de golpear y agarrar, la otra que se demuestra imprescindible es el contraataque, igualito que en Batman: Arkham City, hasta se usa el mismo botón del mando, un sistema de combate que está empezando a inspirar a unos cuantos título. Cuando los enemigos nos van a atacar, justo un momento antes su cuerpo se pone de color rojo, y tenemos que pulsar este botón para parar el golpe y hacer un feroz y doloroso contraataque. Al principio, en los primeros compases, el sistema de combate parece demasiado simple, pero poco a poco iremos consiguiendo nuevos golpes, llaves y técnicas, y va ganando en profundidad y complejidad. Hay una evolución del personaje, que nos permite mejorar las características de Wei Shen, pero en lo que se refiere a nuevos movimientos de artes marciales nos lo tendrá que enseñar un maestro en un dojo.
Hemos querido dejar para el final y poder explicar más en profundidad el fantástico botón de agarre. Aunque a veces nos pueden rechazar esta acción, sobre todo los enemigos más duros, la mayoría de las veces cogeremos a la persona de la pechera y estará a nuestra merced y libre disposición, pudiéndolo mover por el escenario, ya sea andando o corriendo (esto último es muy gracioso, imaginaros llevar a un tipo a arrastras corriendo por en medio de un tumultuoso mercadillo tirando todo por los suelos). Si nos fijamos en el entorno, habrá algunos elementos del escenario que se iluminarán en rojo, lo que significa que podemos interactuar con ellos.
Bastará con pulsar otra vez el botón de agarrar para realizar una ejecución del enemigo –o ciudadano- y disfrutar con la espectacular y brutal animación. Las hemos visto ya de todos los tamaños y colores, algunas exageradamente salvajes, y molan tanto que no te cansas de verlas. Meter a un enemigo en un contenedor de basura, estamparle la cabeza contra una pecera, liarte a golpes con el auricular de una cabina de teléfono para después incrustarle la cabeza en ella, bajar una persiana metálica aplastándolo, insertar su cuerpo en un gancho para carne, meterle la cabeza en un ventilador de un conducto de respiración, empalar a un rival con las cabezas de varios peces espada… en fin, cualquier burrada que os podáis imaginar. De tan exagerado y loco que es no creemos que nadie se vaya a sentir ofendido y vaya a causar polémica, pero tampoco nos extrañaría.
Las persecuciones a pie son muy entretenidas, consisten en ir detrás de un objetivo, o huir de la policía, recorriendo callejones, tejados e incluso el interior de muchos edificios, y además de llevar al personaje por el camino correcto tenemos que esquivar a multitud de personas que se interponen, además de saltar obstáculos en el momento oportuno, saltar vacíos o escalar muros, gracias a un protagonista ágil y felino. Unas secuencias bien resueltas y divertidas.
Cómo no, cualquier sandbox que se precie tiene que contar con sus secuencias de conducción, y aquí podemos conducir todo tipo de vehículos, desde camionetas a deportivos, o veloces y escurridizas motocicletas. Según salimos de nuestro piso franco tenemos un garaje donde podemos guardar los distintos vehículos que adquirimos, y la jugabilidad de la conducción es bastante correcta, no es muy realista y es más bien tirando a arcade, ya que los coches giran rápidamente, el freno de mano es siempre muy útil, y eso sí hay diferencias apreciables entre conducir unos coches u otros.
Un elemento diferenciar de estas secciones respecto a otros títulos de corte similar es que tenemos un botón para embestir, esto provoca que el coche de un pequeño acelerón, que alcanza unos dos o tres metros, lo justo para golpear al vehículo de delante e intentar sacarlo de la carretera, aunque también podemos realizar embestidas laterales. Más adelante, ya con las armas de fuego, habrá secciones a bordo de un coche en el que un compañero conduce y nosotros solo disparamos a los enemigos. Motos y motoristas rodando por el suelo, coches explotando y saltando por los aires, son secuencias muy divertidas y espectaculares, que te meten de lleno en una película de acción trepidante. Si conduces en moto a la vez que conduces también puedes disparar, y para que esto no sea demasiado complicado cuando apuntas el tiempo se ralentiza y te permiten apuntar mejor. Esquivar el tráfico, estar atento a los coches y vehículos que te persiguen disparando, hemos jugado una misión con esta circunstancia y nos lo hemos pasado bomba.
Explicados los combates, las persecuciones a pie y la conducción de vehículos, quedaría un cuarto pilar: los tiroteos. Aunque al principio lo resolvemos todo a palos, según avanzamos en la historia las cosas se van complicando y poniéndose cada vez más turbias, y entran en escena las armas de fuego. Tenemos un sistema semiautomático de disparo, solo podemos llevar un arma a la vez, y hay un sencillo sistema de cobertura que nos jugará alguna mala pasada. Se nota que no estamos ante un título de acción en tercera persona, que a los tiroteos no les han dado mucho peso en la jugabilidad, y simplemente funcionan, sin mucho brillo, aunque los divertidos headshoots estén a la orden del día.
No solo hay armas de fuego, también tenemos armas blancas, como cuchillos, barras de metal, o incluso podremos usar para golpear un enorme pescado, pero se nota que el juego no da demasiada importancia a las armas, ni podemos guardarlas ni almacenarlas, acaba siendo una cuestión más contextual, de llegar a un escenario y hacerse con el arma que tengamos a mano, no es necesario armarse antes de comenzar una misión, ya se ocupa el juego da proporcionarnos lo que vayamos a necesitar.
Tenemos las misiones principales de la historia, otras secundarias llamadas favores, misiones policiales muy interesantes en las que tendremos que recoger pistas, hacer fotos e investigar un crimen, piratear cámaras de seguridad para controlar el crimen de la ciudad, seguir una señal de teléfono móvil para dar con alguien a quien perseguimos, y un largo etcétera, resulta bastante curioso ese doble papel de policía y mafioso, beneficiándonos de las ventajas de dos roles tan antagónicos.
La ciudad de está viva, llena de cosas por hacer, y los comercios tienen muchos protagonismo, tiendas o puestos ambulantes en los que podemos comprar ropa, comida que nos recupera la salud o la energía, hay peleas de gallos en las que podemos apostar dinero, locales de "masaje" cuyas comillas lo dicen todo, ir a cantar un rato a un karaoke, carreras de coches, y hasta clubes de artes marciales, en los que tenemos que superar varias rondas venciendo a una cantidad cada vez mayor de enemigos. Hay cantidad de coleccionables escondidos por la ciudad, uno de ellos muy importante como los santuarios, ya que cada vez que encontramos un número determinado se amplía nuestra vida.
Además hay una especie de desafíos y logros como liarte a dar patadas voladoras por la calle a la gente sin que exceda un límite de tiempo determinado, conducir el mayor tiempo posible a una velocidad sin dañar nada, o una racha de tiros en la cabeza, sea quien sea, y muchos más. Todos estos retos son activables en cualquier momento de la partida, y además se podrán compartir a través de marcadores en línea, picándonos con nuestros amigos y el resto del mundo.
En definitiva está lleno de contenidos, misiones, tareas, desafíos y competiciones, nunca habrá tiempo para el aburrimiento. Si una palabra parece que va a definir este juego es entretenido, y los elementos que contienen están todos bien realizados, y bien mezclados durante las misiones. Por ejemplo un de las últimas misiones que jugamos empezaba con una persecución a bordo de una lancha, luego a pie, mientras de vez en cuando teníamos que acabar con unos matones a golpes, y finalmente acabó en una espectacular persecución por las carreteras de Hong Kong a tiros. Veremos si esta variedad y buena mezcla de géneros se mantiene durante toda la aventura y a ver qué tal resiste el paso de las horas.
Técnicamente estamos ante un título discreto, con algunos detalles mejorables, como las caras de los personajes y sus expresiones faciales, de cartón piedra, y algunos problemas de rendimiento en las fases de conducción que esperamos sean de esta beta y en la versión final estén solucionados. De momento preferimos quedarnos con sus virtudes, que es una fantástica ambientación, la recreación de la ciudad de Hong Kong es muy buena, tanto visual como sonora.
La banda sonora nos gusta mucho, con temas acordes a la ambientación y que tocan distintos géneros, desde el rock, el hip-hop hasta la música melódica, pero siempre desde un prisma oriental. Y con los actores de doblaje Square Enix está realizando un gran trabajo, ya que podremos escuchar actores famosos como Tom Wilkinson - Misión imposible: Protocolo Fantasma, RocknRolla, Batman Begins-, Edison Chen -El caballero oscuro, Infernal Affairs-, Lucy Liu –Kill Bill, Los ángeles de Charlie- o la tan de moda Emma Stone -The Amazing Spider-Man, Zombieland-. A nuestro país llegará con voces en inglés y subtítulos en castellano.
Sumérgete en las peligrosas calles de Hong Kong
Mientras Rockstar se hace de rogar con una fecha de lanzamiento aproximada para el esperado Grand Theft Auto V, los fans de los sandbox podrán calmar sus ansias con Sleeping Dogs, un buen representante del género, lejos de lo fantástico de propuestas como Prototype 2 o lo alocado y humorístico de Saints Row: The Third, proponiendo algo más realista, pero no por ello menos divertido. Saldrá a la venta a finales de agosto para PlayStation 3, Xbox 360 y PC, y si se pulen algunos defectos técnicos y la variedad y riquezas de contenidos que hemos disfrutado se mantiene durante todo el juego, podemos estar ante una grata sorpresa.