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Plataformas
Género/s: Deportes / Fútbol
Fecha de lanzamiento:
PS3, X360, PC:
WII, PSP, PS2:
iPhone:
Android:
FICHA TÉCNICA
Desarrollo: Konami
Producción: Konami
Distribución: Konami
ANÁLISIS

Impresiones Pro Evolution Soccer 2011

Muy cambiado y con algunos aspectos muy novedosos, esta vez la renovación es verdadera y parece que funciona.
Versiones PS3, PSP, Xbox 360, PS2, PC, Wii, Android, iPhone. También disponible en Xbox 360, Ordenador, Wii, PSP, PlayStation 2, iPhone y Android.

Muchos de los que hace años decían que Pro Evolution Soccer era el juego de fútbol perfecto, y que FIFA era una aberración y una monopolizadora de licencias, son ahora fans de la saga FIFA y están hartos de las promesas incumplidas de Konami con los últimos Pro Evolution Soccer, que además siguen sin tener muchas licencias oficiales. En los últimos años, los progresos de FIFA, a partir de la versión 2007, han sido tan grandes como lentos los pasos de Pro Evolution en la nueva generación, especialmente con sus primeras entregas, 2007 y 2008, inferiores incluso a las de PS2.

En 2009 y 2010 avanzaron algo más, crearon un juego de fútbol mejor, pero FIFA ya se encontraba muy lejos. Como os contábamos hace unas semanas, tras probar el juego por primera vez en Tokio, Konami quiere volver este año por la puerta grande. En el E3, en una sesión a puerta cerrada, pudimos ratificar las palabras de nuestro compañero Jorge tras ver el juego.

Está por ver si los cambios funcionan o no, pues con uno o dos partidos no bastan, pero son sin duda radicales y al menos a nosotros nos transmiten muy buenas vibraciones. Y solo estamos a junio, todavía faltan cuatro meses de trabajo en el que el veterano equipo liderado por Shingo Takatsuka tendrá que reverdecer viejos laureles.

La demos mostrada en el E3 incluía solamente a algunas selecciones nacionales, y lamentablemente no a España, así que tuvimos que conformarnos con un Argentina - Portugal, que se convirtió en un partido en el que Argentina tiene el balón e intenta hacer jugar bonito, y lo consigue, pero no mete un gol; mientras que Portugal o, mejor dicho, Cristiano Ronaldo, pega uno de esos zambombazos desde 35 metros y el uno cero final cae sobre una losa sobre esos triángulos combinatorios estériles que trazaban Messi, Tévez y compañía, estrellándose siempre contra el autobús.

Antes siquiera de elegir equipos, comprobamos cómo se ha rediseñado completamente el interfaz, adoptando un grafismo algo más agresivo y unos menús por los que se navega horizontalmente, a modo de iconos cuadrado que se van desplazando por la parte de abajo, y por supuesto con Leo Messi siempre presente en pantalla. La estrella del Barça y, por consenso, mejor jugador del mundo, seguirá con Pro Evolution por muchos años, aparentemente. Tras pasar por la selección de equipo, estadio y otros parámetros, nos encontrábamos con una de las novedades del juego: la nueva interfaz para hacer las tácticas.

No pudimos bucear en todas sus opciones, pero sí comprobar cómo ha cambiado el sistema para hacer tácticas, dejando de lado la clásica elección de formación, para luego detallar manualmente cada posición y los roles de cada jugador, e implementando un nuevo sistema "arrastrar o soltar" (drag and drop) que intenta simular la clásica pizarra del entrenador. Cada jugador mueve el puntero sobre un terreno de juego donde está dispuesto el esquema del equipo. Al poner el cursor sobre un jugador, puede seleccionarlo y mover su posición en el terreno del juego, o llevarlo hacia el banquillo y substituirlo por otro de los jugadores; se resaltan aquellos que pueden jugar bien en la posición en la que está el jugador que queremos cambiar.

Lo que nos llamó la atención sobre todo es cómo el juego parece entender lo que pretendemos al posicionar los jugadores en un lugar u otro, cambiando la formación (de 4-4-2 a 4-3-1-2, por ejemplo) en la parte inferior de la pantalla. Nosotros nos encontramos con una Argentina jugando con 4-4-2, con Higuaín y Messi como puntas, pero decidimos sentar a un mediocentro y substituirlo por Tévez, ponerlo de punta, retrasar a Messi a mediapunta, y dejar a Mascherano con la responsabilidad de ser el mediocentro total. El sistema entendió bien lo que queríamos al realizar ese esquema, y asignó los roles automáticamente a los jugadores.

Esto es lo de menos, claro, si el juego luego no mejora. Pero sí que lo ha hecho, aunque solo tuvimos un partido para comprobarlo. Sigue siendo fútbol, y sigue siendo un simulador, pero es muy diferente de Pro Evolution Soccer 2010, hasta el punto de que no resulta una evolución natural de éste, sino que se nota que han cambiado completamente algunas cosas, que no han progresado respecto al juego anterior, sino que son simplemente de otra manera (y mejor).

En primer lugar, la cámara del juego es dinámica, toda una novedad en los juegos de fútbol, y funciona realmente bien. Cambia de ángulo dependiendo de la parte del campo en la que estemos para ofrecernos una mejor perspectiva de nuestros jugadores, y eso no se nota a primera vista pero luego ayuda mucho a la hora de jugar. Ya no es tan necesario mirar el mapa para saber dónde están algunos de nuestros jugadores de ataque, porque el juego se las arregla para enfocar la cámara de forma que aparezcan, pero sin que se note una transición brusca ni un cambio de perspectiva. Simplemente lo hace muy bien.

El juego ha bajado considerablemente su velocidad, y el ritmo es más lento y adecuado al fútbol real. Al mismo tiempo, la diferencia entre trotar y correr es más acusada, así como el nivel de control que tenemos sobre la pelota. Esprintando, a no ser que nuestro jugador sea muy bueno, es muy difícil driblar, por lo que es recomendable usar la carrera media, pulsando R2. Los conjuntos se mueven de forma muy inteligente, los jugadores se apoyan y cubren los huecos que dejan, manteniendo la formación en defensa e incorporándose al ataque. El sistema funciona bien, sin los fallos en defensa (esos corredores que de repente aparecían) de los últimos juegos, todavía presentes en la edición 2010.

En defensa, algunas facetas del juego todavía estaban verdes, como los choques entre jugadores. En ocasiones el jugador que por habilidad, posición, fuerza y velocidad tenía que llevarse la pelota no lo hacía, pero se nota que hay más sensibilidad, como más contacto físico al pelear por la pelota. También hay una opción de tapar huecos más inteligente, es decir, no entrando al rival, sino manteniéndolo a raya, tapando sus opciones de pase. Esto está presente desde siempre pero simplemente funciona mejor en esta versión del juego.

La gran novedad en la jugabilidad es, sin embargo, la barra de potencia para todo. Esta barra aparece, de hecho, al lado del jugador, y es una especie de cuarto de luna que sale a su derecha cada vez que pulsamos un botón de pase o tiro; hay barra de energía hasta para los remates de cabeza o las luchas por el balón en un salto, lo que nos da una idea de hasta qué punto se ha volcado Konami en esto, y las ganas que tienen de transmitirle al jugador que lo mucho que presione el botón en cuestión es clave para el resultado. Tras unos momentos de imprecisión en el pase, porque dependiendo de la potencia llegaba a uno u otro jugador, nos familiarizamos rápidamente con el sistema y comenzamos a trazar jugadas de ataque. Los centros al área desde las bandas también cuentan con barra de potencia, aunque se nota que todavía hay un relativo y generoso nivel de ayuda automática.

A nivel gráfico, el juego ha progresado respecto a la edición del año pasado, que contaba con las mejores caras del género. Las de este año son aún mejores, mientras que el número de animaciones se ha incrementado pero todavía no sabríamos decir cuánto, ni si realmente se ve una mejora cualitativa o solo cuantitativa. Con Messi y Tévez realizamos algunos grandes regates, que ahora podrán enlazarse los unos con los otros, y algunos eran especialmente vistosos

No pudimos ver mucho más, ya que para corroborar si éste es el primer gran Pro Evolution Soccer de nueva generación tendríamos que jugar unos cuantos partidos, y eso no pasará, como mínimo, hasta el mes de agosto, cuando el juego sea mostrado en la Gamescom de Colonia. Pero apunta buenas maneras, como dejó ver la versión 2010, muy criticada pero donde ya se vio que Konami empezaba a ponerse las pilas. El "enfrentamiento final" entre las dos sagas de fútbol tendrá lugar, como siempre, en el mes de octubre, y aunque Pro Evolution se ha reintentado relativamente, la competencia va a ser muy dura. Electronic Arts va a defender su posición volviendo a hacer un excelente juego de fútbol, y como siempre los más beneficiados por esta sana pero intensa competencia serán los fans del deporte rey.

Director y fundador