Cuando se anunció una nueva entrega de Ridge Racer –y van seis- para las tres consolas de última generación, nadie iba a pensar que Namco se alejaría de la jugabilidad arcade para acercase a la simulación, a una conducción más realista. Siguiendo la tendencia de la mayoría de juegos de conducción del mercado, Namco optó por ofrecer coches reales, de las más prestigiosas marcas automovilísticas, además de modificar el nombre de esta nueva entrega por R: Racing Evolution (que en Europa pierde la coletilla Evolution para no confundirlo con Racing Evoluzione -Apex fuera del viejo continente-, un juego de conducción que apareció en la máquina de Microsoft). Pero hay más cambios, muchos más…
Quizá el más destacable sea la inclusión de un modo historia, en el que encarnaremos a Rena Hayami. Esta joven - y hermosa- chica da el mayor salto de su vida, abandonando la conducción de ambulancias, tras ser fichada por un cazatalentos, por la competición contra los mejores pilotos del mundo. Entre esos pilotos encontramos otra exuberante dama, Gina Cavalli, que se convertirá en nuestro rival a batir a lo largo de las 14 fases que deberemos superar. Entre cada una de estas fases se nos irán mostrando unas escenas de vídeo prerenderizadas de gran calidad, y que nos introducirán en la historia de Rena. Pero el modo al que, sin lugar a dudas, dedicaremos más tiempo será la competición por eventos. Éstos se agrupan en distintas categorías y suman un total de 166 pruebas distintas que deberemos ir superando como podamos. Como es de suponer, no faltarán los clásicos modos arcade (para realizar una carrera cómo y dónde nosotros deseemos), contrarreloj (para intentar mejorar nuestros tiempos) y multijugador (para batirnos en duelo con nuestros amigos).
Gracias a nuestra pericia al volante iremos ganando unos puntos que podremos canjear por nuevos coches o por mejoras en los que ya poseemos. Y es que no será nada fácil conseguir desbloquear los 45 vehículos (46 en la versión Xbox, con la inclusión de un Hummer exclusivo para dicha consola) disponibles en el juego: Chevrolet Corvette, McLaren F1, Mitsubishi Lancer, Mazda RX-7 y un largo etcéterca que embarca modelos de Honda, Toyota, Ford, Audi o Alfa Romeo. Desde clásicos del automovilismo, pasando por deportivos o utilitarios podremos escoger entre un amplio abanico de posibilidades que sin duda, agradecerá el jugador. Como es de esperar, el comportamiento en pista de cada uno de estos vehículos variará sustancialmente atendiendo a sus especificaciones. Pero no solo deberemos escoger un vehículo y ponernos a conducir, sino que deberemos ajustar los parámetros del coche, como por ejemplo, el sistema de frenado y su distribución, para así obtener el máximo rendimiento posible de nuestro automóvil.
Y como es de suponer, necesitaremos de circuitos donde poner a prueba nuestra pericia al volante. R: Racing nos ofrece un total de 11 circuitos que podemos dividir por categorías: los circuitos de velocidad, en los que deberemos dar un determinado número de vueltas en el menor tiempo posible, entre los cuales encontraremos el típico circuito oval, así como clásicos del automovilismo como el circuito de Mónaco; los circuitos de rally podrán ser sobre tierra, o sobre asfalto. En ambos casos deberemos realizar el recorrido de unos cinco kilómetros de distancia lo más rápidamente posible y podremos recorrerlos en ambos sentidos. Por último encontramos dos circuitos especiales: en uno, deberemos enfrentarnos a un rival siguiendo cada uno un camino distinto; mientras que en el otro, deberemos llegar al final de la recta de media milla (800 metros) antes que nuestros rivales.
Y hablando de rivales, Namco los promete más listos que nunca. Y es que la inteligencia artificial es uno de los puntos que más se han cuidado en el desarrollo del juego, para mostrarnos comportamientos casi humanos: nuestros rivales se apartarán cuando les adelantemos o decidirán sacarnos de pista cuando nos situemos a su lado. Pero ahí no acaba la cosa, puesto que cada uno de los conductores controlados por el juego tiene una barra que mide su nerviosismo. Todos sabemos que cuando estamos nerviosos nos es más difícil concentrarnos, y eso deberemos aprovecharlo. Presionando a nuestros contrarios su barra aumentará hasta llenarse y cuando llegue ese momento, las probabilidades de que nuestro rival cometa un error de conducción son elevadas. La idea es buena, esperamos que al materializarse, también lo sea.
En cuanto al apartado técnico, Namco promete estar a la vanguardia: todos los coches están recreados fielmente, con una gran cantidad de polígonos y texturas de alta resolución para que se asemejen al máximo a sus homólogos metálicos. Además, contarán con reflejos en la carrocería y un buen tratamiento de luces y sombras sobre el vehículo. Los escenarios tampoco nos dejarán un mal sabor de boca, y veremos representados todo tipo de ambientes: circuitos profesionales con sus gradas para el público, como el de Mónaco que transcurre a través de una ciudad plagada de edificios, señales de tráfico y demás detalles propios de una metrópolis; o unos hermosos parajes naturales plagados de vegetación. Esperemos que cumpla y podamos disfrutar de este prometido espectáculo visual en nuestros televisores.
En el apartado sonoro, Namco se mantiene fiel a las anteriores entregas y nos deleitará con música techno muy cañera, propia de un buen arcade. El sonido de los coches promete ser diferente para cada vehículo, por lo que podremos identificar el rugir de nuestros bólidos. Otra característica en este apartado es la inclusión de comentarios ya sean desde boxes, indicándonos en todo momento la táctica a seguir durante la carrera, o sean comentarios de otros conductores hacia nosotros –por norma general, despectivos-.
Muchos coches, variedad, gran duración y un buen apartado técnico es lo que nos promete este R: Racing que se unirá a la larga lista de juegos de conducción de esta generación. Ya solo falta un mes para que el juego llegue al viejo continente y podamos valorar el juego de Namco y qué tal le ha sentado a la saga Ridge Racer el paso a la simulación… Ridge Racer evoluciona.