La verdad es que se está haciendo esperar. Primero, porque era una continuación que todo el mundo sabía que iba a llegar, y Square Enix se mostró reticente a confirmar lo que había sido un secreto a voces; y segundo, porque su demora con respecto al lanzamiento japonés y estadounidense (diciembre de 2005 y marzo de 2006) va a ser notable. En cualquier caso, llegará finalmente a finales de octubre a las tiendas europeas, finalizando una travesía que ha resultado lenta pero que, esperamos, valga la pena.
Kingdom Hearts II será una continuación directa del juego de PS2 y la entrega para GBA llamada Chain of Memories, respondiendo durante su desarrollo a muchas de las preguntas que habían quedado sin resolver en el transcurso de las tramas anteriores.
Parece que será, por tanto, bastante recomendable haber jugado a esas entregas, aunque para los olvidadizos y para quienes no hayan jugado a los dos juegos anteriores, contaremos con Pepito Grillo, toda una fuente de conocimiento que será una buena ayuda para esos momentos en los que la trama haga referencias a elementos que desconocemos y, por supuesto, en muchas otras situaciones, funcionando a modo de asistente durante el desarrollo del juego.
Esta nueva aventura se situará poco después de los eventos que tuvieron lugar en Chain of Memories, presentando a un nuevo personaje, Roxas, un visitante de Twilight Town ahora que está de vacaciones. Amigable y aventurero, se verá sumergido en una serie de recuerdos que no le pertenecen y que le llevarán a descubrir el vínculo que le une a Sora.
Kingdom Hearts II no pretenderá ofrecer una experiencia completamente nueva a los jugadores, sino dar más de lo mismo, y a ser posible mejor, repitiendo una fórmula que se mostró como más que válida en 2004. Las principales mejoras vendrán por el lado del control de la cámara, un elemento que a buen seguro traerá recuerdos no demasiado gratos a la hora de recordar las partidas con el título original. Por suerte, el sistema de control de la cámara ha sido desplazado al stick analógico derecho, ofreciendo un control mucho más preciso y acertado de la cámara, lo que reducirá, a buen seguro, los problemas que en este sentido experimentamos con el primer juego a su mínima expresión.
En la misma línea, se han ampliado las opciones disponibles en los combates, con nuevos comandos "de reacción", es decir, sensibles al contexto (como bien nos enseñó Conker en su aventura de Nintendo 64), un sistema de control que permite introducir situaciones variadas sin hacer los controles más complicados, al indicar la acción asignada al botón preciso en un momento dado.
Es un sistema de fiabilidad contrastada en múltiples géneros, entre ellos las aventuras como la que nos ocupa en estos momentos. En resumidas cuentas, de un modo tan sencillo como éste se añade mayor profundidad a los combates sin elevar la complejidad del sistema de control ni, por supuesto, la interfaz. Al sistema de luchas se han añadido otras mejoras que amplían el rango de movimientos, Límites de Sora, combos con personajes Disney, etc.
Además, muchos de estos personajes Disney tomarán mayor protagonismo en la trama, apareciendo, asimismo, nuevas incorporaciones a los personajes clásicos que ya habían aparecido en el primer Kingdom Hearts. Y estamos hablando tanto de los buenos, como de los malos.
El juego, por lo demás, se mantendrá, en líneas generales, en una tónica muy continuista, por lo que se espera que el nivel de dificultad, suponemos, seguirá siendo bastante bajo a lo largo de toda la aventura, o cuando menos ésa es la sensación que nos ha transmitido hasta el momento. Esto, unido a un componente estratégico casi inexistente en las luchas, hará que hasta los combates contra los enemigos finales puedan resultar demasiado asequibles, aunque esto es también positivo en la medida en que seguirá permitiendo que sea un título accesible para todos los públicos. Sea como fuere, tendremos que esperar a disfrutarlo plenamente cuando salga a la venta en nuestro mercado para poder juzgarlo plenamente en este sentido.
Parece, por tanto, que todas las novedades se centran en el contenido, con nuevos personajes, escenarios (algunos de ellos extraídos de nuevas películas, como Piratas del Caribe, y clásicos rescatados como Tron, y demás.
A nivel técnico el juego presentará un aspecto más depurado, pero sin grandes saltos gráficos. Hay mayor nivel de detalle, y mejoras aquí y allá, pero no parece que vaya a haber grandes sorpresas en el aspecto del título. Al fin y al cabo, no ha pasado demasiado tiempo entre ambas entregas, y las dos pertenecen a una fase en la que la consola de Sony ha mostrado ya su madurez. Los más sorprendentes serán los entornos completamente nuevos, pero más por la sensación de completa frescura que por otra cosa. Lo mismo es aplicable a los personajes, con una mejora sutil en los que repiten aparición (la mayoría), y un buen aspecto en los nuevos.
Así pues, aunque se presenta algo falto de novedades reales, Kingdom Hearts II se perfila como una acertada secuela del juego original que puede resultar más que satisfactorio para los seguidores de la saga. Habrá, con todo, que esperar a finales de octubre, momento en el que saldrá a la venta en Europa, para ver si el desarrollo del juego presenta novedades interesantes para los aficionados.