Seguramente habréis escuchado hablar de Poppy Playtime, un juego de terror y puzles que, casi de un día para otro, se ha puesto en boca de todo el mundo. Desarrollado por un pequeño equipo independiente, llamado MOB Games, y lanzado apenas hace unos días, ha alcanzado la popularidad gracias a su particular concepto, particular estética y buena ejecución, incluso si este primer contacto no es más que una demo. Porque, quién lo habría pensado, a veces el éxito no pasa por copiar la moda de turno.
Poppy y la fábrica de juguetes
Poppy Playtime es, como decimos, un título que combina puzles y terror. Ahora mismo, lo único disponible es el primer episodio, que tiene un módico precio (4 euros) y que nos ofrece unos 40 minutos de juego, pero que sirve para dejarnos ver lo que nos espera en los próximos capítulos, que se lanzarán siguiendo el mismo formato y el mismo precio.
En este episodio simplemente nos vamos a familiarizar con la historia y las mecánicas, muy sencillas pero que pueden dar mucho juego. En lo narrativo, comenzamos con un vídeo que imita a los VHS para ponernos en situación y transportarnos varias décadas al pasado, en el que podemos ver a una muñeca que, de acuerdo con el anuncio, es la primera muñeca inteligente que se comporta como una niña de verdad.
Simplemente, tras esta breve introducción, aparecemos en la fábrica de Playtime, creadores de esta muñeca. Lo único que tenemos es una nota que afirma que los empleados no se han ido, como se quiere hacer creer, sino que han desaparecido. Nuestro objetivo, aparentemente, es descubrir qué ha pasado, y para ello tenemos que hacer uso de un juguete: dos manos desplegables a los Inspector Gadget que, además, conducen la electricidad. Con ellas podemos acceder a objetos lejanos, interactuar con objetos pesados o llevar la electricidad de un punto a otro, y son el principal componente que vamos a usar para los puzles.
Lo que hemos visto por el momento es muy sencillo pero con mucho potencial. Las manos tienen un alcance limitado y tenemos que asegurarnos de que el recorrido que hacemos con ellas es factible, lo que nos obliga a estudiar e interactuar con el escenario para conseguirlo. A riesgo de ser redudantes, los puzles en este primer capítulo no podrían ser más fáciles, tanto que nos han decepcionado un poco, pero vamos a tener fe y esperar que, simplemente, sean la introducción de otros más elaborados en el futuro.
Corre, por lo que más quieras
Luego, por supuesto, tenemos las partes de miedo. Estas se dividen en dos, las partes clásicas malrolleras en las que estás esperando a que te salte algo, y las de persecución, en las que algo nos persigue y tenemos que correr como si nos fuese la vida en ello. De estas sólo hay una en este primer capítulo, aunque es bastante intensa y nos parece que está bien diseñada. Habrá que ver cómo se combinan todos sus elementos en el futuro.
A todo este ambiente de terror también colabora el notable diseño artístico, que sabe aprovechar muy bien esas sensaciones que, inevitablemente, despiertan los juguetes en una sala oscura. Nos ha decepcionado un poco el sonido, importantísimo en un título como este, y que no termina de despegar. Hay mucho ruido ambiental, pero nada que nos haga sentir incómodos o en tensión, y parece que se han preocupado más de su papel en los sustos que de que aporte más a la atmósfera.
Por último, queremos comentar un detalle que no importará a algunos jugadores pero sí a otros, y que consideramos importante a la hora de decidir la compra: no hay compatibilidad con mando.
El inicio de una terrorífica amistad
En un género tan saturado como el terror, siempre nos alegra encontrar proyectos que intentan hacer algo diferente al resto y que consiguen sorprendernos. Honestamente, este primer capítulo de Poppy Playtime nos ha parecido más una demo de pago que otra cosa, pero es innegable que es un concepto muy bien ejecutado con un potencial enorme, y estamos deseando ver cómo sigue evolucionando en el futuro. Aun siendo brevísimo -40 minutos nos ha durado-, por 5 euros cumple su cometido, y demuestra, una vez más, cómo hay todavía mucho terreno para explorar y ofrecer experiencias que, incluso si no son pioneras, nos dejen sensaciones nuevas. Estamos seguros de que con el repentino éxito de Poppy Playtime los desarrolladores van a tener más recursos de los que esperaban para los siguientes capítulos, y sólo nos queda esperar que no estén faltos de ideas para hacer de esta una aventura tan terrorífica como memorable.
Hemos escrito estas impresiones tras adquirir el juego en Steam