El primer título de la subserie Final Fantasy Crystal Chronicles, para la consola GameCube, no fue uno de los títulos de mayor éxito de la compañía Square Enix. La carencia de un argumento sólido en pos de la jugabilidad del título fue una apuesta que no salió todo lo bien que se esperaba, ya que el hecho de que el juego fuera, fundamentalmente, pensado para jugarlo entre cuatro personas a la vez, hizo que no tuviera demasiada aceptación entre el público. En esta ocasión, la secuela de Final Fantasy Crystal Chronicles para la Nintendo DS apuesta por una jugabilidad mucho más sencilla y accesible, manteniendo todos los elementos destacables de su predecesor: un encantador diseño de los personajes, un sistema de habilidades muy peculiar y un fantástico modo cooperativo, además de ofrecernos, esta vez sí, un argumento de cierta profundidad.
La historia de Final Fantasy Crystal Chronicles: Ring of Fates nos sitúa en un mundo bañado por la luz rojiza de una luna de color escarlata, la cual destruye a todos los seres que no se hallen bajo el influjo de unos misteriosos cristales azules. El juego nos introducirá en la piel de dos hermanos, Yuri y Cherinka, con una misión por cumplir: atenuar la maligna luz de la luna escarlata y, finalmente, destruir ésta.
El juego vendrá adornado con unas maravillosas escenas de animación (véase, por ejemplo, cómo la introducción del juego hace gala de un despliegue gráfico y sonoro en toda regla) y con gran cantidad de escenas de diálogo, lo que dará una mayor consistencia a la historia del mismo.
Nuestros jóvenes héroes estarán acompañados por diferentes personajes que se unirán a nuestra aventura a medida que el juego avance. Cada uno de los personajes de nuestro grupo contará con unas características en cuanto a su personalidad y a sus habilidades para el combate. El principio del juego, en el que sólo controlaremos a Yuri, nos servirá como tutorial e iniciación al manejo del mismo, pero tan pronto como avancemos en la historia, nuevos personajes se unirán a nosotros.
El juego está diseñado como un típico juego de rol en tres dimensiones, con una cámara en perspectiva isométrica, la acción del cual transcurre dentro de diferentes mazmorras, con varios laberintos y puzzles que debemos de solucionar e infinidad de enemigos que pueblan todos los rincones del mapeado. La puesta en escena del juego, el transcurso de la historia y el potente motor gráfico del que hace gala, nos recuerda especialmente al Final Fantasy Fables: Chocobo Tales, aunque la acción la veremos desde un punto un poco más alejado que en este último, para así favorecer una visión más general de la acción durante los combates. Vemos que el juego dispone de un diseño de personajes muy elaborado, con texturas muy cuidadas y escenarios muy bien estructurados, aunque el aspecto general del juego entra dentro de los cánones clásicos que tanto éxito han dado a otros títulos de la compañía Square Enix, como, por ejemplo, el reciente Final Fantasy III para la propia Nintendo DS.
Veremos gráficos de gran colorido, pues tanto los personajes del juego como el escenario y los elementos que lo integran cuentan con colores brillantes y muy llamativos. El diseño de los modelos quizás sea un poco pequeño, en general, sin apenas diferencia entre los personajes niños o adultos, pero diferenciaremos a cada personaje por su atuendo y vestimenta, así como por los accesorios y armaduras con los que cuenta. En general, el aspecto gráfico del juego ha sido muy cuidado, y se ha tenido mucho cuidado en no dejar vacíos los escenarios y las mazmorras por los que pasaremos una y otra vez, algo muy común en otros títulos del mismo género.
Los controles son similares a los de la entrega anterior para GameCube, aunque en esta ocasión se le han añadido al juego diferentes acciones en cada personaje: podremos saltar sobre nuestros enemigos y pisotearlos, o agarrar de un salto a los enemigos voladores; podremos también realizar un ataque en picado, de efectos devastadores, o coger a enemigos de pequeño tamaño y lanzarlos lejos de nosotros. Ring of Fates es uno de los títulos de rol con más acciones ofensivas de los que se hayan visto para la portátil de Nintendo, además de poseer un gran número de objetos que podremos recoger y almacenar en nuestro inventario, el cual gestionaremos a través de la pantalla táctil de nuestra consola.
También contaremos con varias opciones de ataque basadas en la magia. Además, haremos uso de ésta no sólo en combate, sino también para resolver algunos de los muchos puzzles que encontraremos durante el juego. Así, eberemos de realizar determinados hechizos para abrir según qué puertas o bien para acceder a determinadas zonas ocultas dentro del mapa. Por otra parte, cada uno de los personajes protagonistas del juego cuenta con un ataque mágico especial, cada no de ellos con una función diferente dentro de la acción del juego.
Controlaremos durante la mayor parte del juego a Yuri, mediante la cruceta y los botones de nuestra consola. La máquina controlará al resto de los personajes, aunque en ocasiones podremos tomar el control de alguno de ellos para realizar determinadas acciones o ataques. La inteligencia táctica de nuestros compañeros controlados por la consola es aceptable, aunque en ocasiones no está a la altura de las circunstancias. Éste es quizás uno de los aspectos más a tener en cuenta en pos de una revisión del juego, de cara a su lanzamiento en el mercado occidental. Por otro lado, se hecha de menos un control de los personajes mediante la pantalla táctil, cosa que sí vimos en Final Fantasy III.
La acción del juego, por tanto, la veremos, fundamentalmente, en la pantalla superior de nuestra Nintendo DS. La pantalla inferior de la consola la utilizaremos, por otro lado, para acceder a la interfaz de hechizos y el inventario de nuestros personajes. Ambos están desarrollados de una manera sencilla y clara, con un acceso fácil a los diferentes objetos y hechizos y una respuesta de la pantalla táctil muy precisa. También utilizaremos la pantalla táctil para realizar los ataques especiales, marcando con el stylus el objetivo de los mismos, así como al usar determinados hechizos, en los que deberemos de marcar en pantalla al beneficiario de los mismos.
La música del juego también promete estar a la altura de las demás creaciones de Square Enix. Música épica y melodías pegadizas de gran calidad, y que acompañan perfectamente a la acción, son algunas de las constantes que encontramos en todos los títulos de la franquicia Final Fantasy. En lo que respecta a los efectos de sonido, escucharemos diferentes ruidos, sonidos y exclamaciones de los personajes, tanto de los protagonistas como de los enemigos, así como sonidos de ambiente muy logrados. También disfrutaremos de las voces de los personajes protagonistas en las diferentes secuencias de animación del juego. De momento, las voces están, cómo no, en japonés, pero esperamos que de cara a su lanzamiento en nuestro país se tenga en cuenta la importancia de una buena traducción y doblaje de los textos y las voces del juego.
Contaremos también con un modo multijugador cooperativo, en el que deberemos superar determinados niveles aislados entre uno o varios jugadores, mediante la conexión local de nuestra consola: dos si sólo se dispone de una tarjeta de juego, y hasta cuatro si cada jugador dispone de su propia tarjeta. Por otro lado, contaremos con algunas opciones online, como la transferencia de objetos y hechizos, aunque no se ha contado con la posibilidad de un juego multijugador vía wi-fi, lo cual es, francamente, una lástima.
En resumen, la primera impresión que nos ofrece Final Fantasy Crystal Chronicles: Ring of Fates en las primeras horas de juego es, ciertamente, muy buena. Se trata de un juego de rol y acción en tiempo real con unos gráficos espléndidos, una muy buena banda sonora, y una jugabilidad que hará las delicias de cualquier jugador. Un título que puede llegar a convertirse en un gran juego de rol para nuestra portátil, sobretodo si se hace un trabajo de traducción y doblaje en condiciones de cara a su futuro lanzamiento en nuestro país. Esperaremos, hasta entonces, con expectación su salida en el mercado occidental durante los próximos meses.