Análisis FIFA 23, fútbol control hasta la llegada de EA Sports FC (PS5, PS4, Xbox One, Xbox Series X/S, PC)
FIFA es, además de la Federación Internacional de Fútbol Asociación, una de las sagas más veteranas del mundo de los videojuegos que ha estado ligada a consolas y ordenadores desde el año 1993 con la llegada de FIFA International Soccer, un juego creado por EA que llegó primero a Mega Drive y que fue adaptándose a otros sistemas de juego para dar inicio a una de las licencias más rentables de la historia.
Esto va a cambiar a partir del 2024 ya que EA no renovará el uso de la licencia de FIFA para iniciar una nueva saga, EA Sports FC, cerrando su etapa con esta licencia con FIFA 23, un juego que sigue siendo el mejor título de fútbol en la actualidad pero que en esta ocasión no cuenta con demasiados alicientes o cambios verdaderamente notables con respecto a la edición anterior.
Nota: Este análisis se centra en la jugabilidad y modos incluidos en las versiones de la actual generación: PC, PS5 y Xbox Series X/S.
Las jugadas a balón parado tiene los cambios más perceptibles
Si hablamos de cambios y mejoras realmente perceptibles a nivel de jugabilidad el principal lo encontramos en las jugadas a balón parado, con una modificación en los tiros de falta, saques de esquina y penaltis que apuestan por un nuevo sistema que da más posibilidades en los lanzamientos en los dos primeros casos y que hace más simple y sencillo ejecutar la pena máxima, algo que seguramente agradezcan muchos jugadores.
A la hora de sacar una falta o un tiro libre, ahora podemos escoger el tipo de golpeo moviendo el joystick derecho dentro de un indicador en el que podemos ver el punto en el que vamos a golpear la pelota, algo que ya estaba presente en los FIFA de hace unos cuantos años, permitiéndonos realizar golpes rasos, sin rotación de balón o añadir distintos tipos de efectos que nos dan más versatilidad a la hora de ejecutar faltas o saques de esquina en una mecánica que, al menos a nosotros, sí nos ha convencido.
Por otro lado en los penaltis o la pena máxima ahora vemos cómo un círculo rodea el balón y va haciéndose cada vez más pequeño.
Para alcanzar la máxima precisión lo que tenemos que hacer es pulsar el botón de disparo justo cuando el círculo es más pequeño, escogiendo como siempre la dirección y la intensidad del tiro y haciendo más sencillo anotar un gol en esta suerte, algo que nos ha parecido bastante lógico.
Ajustes aquí y allá para mejorar la fluidez del juego
No solo hay cambios en las jugadas a balón parado en FIFA 23 y aunque el resto de las modificaciones son menos tangibles y perceptibles para el jugador menos habitual, sí que hay retoques aquí y allá para mejorar la calidad del juego con respecto a FIFA 22 y también errores del pasado que se siguen produciendo a día de hoy y que esperemos que se solucionen con la llegada de EA Sports FC.
De entrada, EA Sports estrena Hypermotion2, una evolución de su sistema de captura de movimientos que ha logrado capturar más del doble de datos de futbolistas reales para ofrecernos animaciones de los jugadores muy fluidas, algo que se nota en todo tipo de acciones de juego, desde los controles hasta los tiros, pasando por los centros, pases, entradas o cargas con nuestros jugadores, proponiéndonos una jugabilidad muy suave tanto con el mando como para la vista y permitiéndonos hacer nuevos tipos de pase o tiros desde posiciones diferentes para que todo sea más natural y cercano al fútbol real.
Sin embargo y a pesar de que EA insiste en la mejora de las colisiones año tras año, no vemos un cambio radical en este sentido y, de hecho, cuando dos jugadores pugnan por una pelota el delantero siempre suele tener las de ganar para cazar el rebote con respecto al defensa, mientras que los choques aéreos o las reacciones de los jugadores al recibir una entrada siguen estando bastante por debajo de lo que nos ofrece a nivel técnico, jugable y visual el resto del juego.
La física de la pelota también tiene algunos ajustes bastante favorables y EA sigue haciendo buenos progresos en este sentido, con botes más suaves y comportamientos más realistas, aunque hay dos excepciones como los remates de cabeza y los rebotes contra los palos que en demasiadas ocasiones hacen que la pelota salga despedida con una fuerza excesiva. Por otro lado, al disparar el balón, tanto la forma del golpeo como la trayectoria del mismo según el tipo de chut nos ha gustado mucho, notándose de forma evidente con qué parte o cómo golpeamos el esférico, aunque quizás los jugadores abusan demasiado del golpeo con el exterior. Además, el retorno del zapatazo nos permite ejecutar tiros muy potentes difíciles de parar, aunque parecen estar "imantados" y golpean en demasiadas ocasiones en los palos de la portería.
Si nos vamos a los porteros creemos que el año pasado los guardametas hacían un mejor trabajo. Este año siguen haciendo buenas paradas, sí, aunque nos hemos encontrado algunas intervenciones un tanto extrañas y muchas paradas que se exageran con movimientos bastante raros deslizándose por el césped o saltando de forma demasiado acrobática cuando no es necesario, pecando en ocasiones de "palomiteros", además de arriesgarse demasiado con la pelota en los pies en muchas ocasiones.
Esto nos lleva a la IA, que mejora en cuanto a que reacciona de forma más inteligentea lo que proponemos en el campo, aprendiendo de nuestra forma de jugar en cada partido e intentando contrarrestar nuestro juego con decisiones interesantes aunque, por otro lado, a veces también deja demasiados espacios atrás o hay jugadores que abandonan con demasiada frecuencia su posición.
Por último, otro de los grandes cambios a nivel de jugabilidad que prometían este año es Acelerate, un nuevo sistema que evalúa la velocidad de los jugadores con distintos arquetipos para ofrecernos una experiencia más realista… y que no se nota demasiado durante los partidos. Al final, el jugador con más ritmo va a imponerse al de ritmo más bajo en la mayoría de las ocasiones sin importar el posicionamiento e incluso la corpulencia de ambos futbolistas.
Y ahora que hablamos del ritmo, de entrada estamos bastante satisfechos con el que nos hemos encontrado en esta primera versión final del juego, no es tan pausado como, por ejemplo, eFootball, pero tampoco es un correcalles total, aunque esto probablemente cambie con próximas actualizaciones en las que EA volverá a acelerar el juego un año más, cometiendo para nosotros un error entrega tras entrega.
Poca evolución en sus modos de juego a la espera de los Mundiales
Hasta hace poco estábamos acostumbrados a que EA Sports nos trajera nuevos modos de juego a FIFA con los que agitar un poco la coctelera y darnos más motivos para jugar, con un modo "historia" en el que controlamos la carrera de Hunter o Volta Football que suponía una suerte de regreso del FIFA Street que muchos echábamos de menos.
Este año de entrada no tenemos ninguna gran novedad en este sentido y quizás la mayor excusa para tener una experiencia diferente para un jugador es el poder disfrutar del modo carrera con Ted Lasso y el AFC Richmond pudiendo llevar al equipo de la serie de TV de Apple a la élite del fútbol, en un añadido que se agradece pero que deja más a nuestra imaginación y ganas de tomar el control de este club ficticio que a algo real a nivel de novedades.
Esto no quiere decir que no tengamos retoques y ajustes en los modos de juego, sobre todo en Clubes Pro, esa modalidad que permite juntarnos con otros 10 amigos para formar un equipo de fútbol al completo y disfrutar de un fútbol virtual muy parecido al real, y que este año cuenta con un buen puñado de novedades, retoques e incluso integración con el modo Volta Football, añadiendo juegos de habilidad y un buen puñado de retoques para hacer que esta experiencia sea más atractiva para disfrutar de FIFA.
El anteriormente mencionado modo Mi Carrera también cuenta con algunos ajustes para darle algo más de profundidad tanto a la vertiente mánager como a la de crear nuestro futbolista, aunque llevamos años sin cambios realmente importantes en la fórmula y se siguen repitiendo errores del pasado como que, por ejemplo, controlemos a un delantero y se nos ponga a jugar como mediocentro con objetivos defensivos o que nuestro entrenador nos mande un correo electrónico diciéndonos que si seguimos así nos cederá… cuando estamos pichichis de la liga en cuestión.
Además, esta entrega también pone especial énfasis en el fútbol femenino, permitiéndonos disfrutar de una copa internacional en la que podemos controlar a las selecciones más importantes del mundo e incluso jugar la Barclays WSL y la D1 Arlema, las ligas de fútbol femenino más importantes de Europa que tienen lugar en Inglaterra y Francia.
Por último, en el futuro FIFA 23 nos permitirá disfrutar tanto del Mundial FIFA Qatar 2022 que tendrá lugar a finales de año como del Mundial Femenino Australia y Nueva Zelanda 2023, añadiendo ambas competiciones con un DLC gratuito poslanzamiento que llegará a tiempo para contagiarnos del ambiente previo de las dos competiciones más importantes del fútbol de selecciones.
FUT hace que sea algo más fácil formar un buen equipo para jugar
FUT es el modo estrella de cada año en FIFA y este año no iba a ser menos, contando con todos los modos y mecánicas clásicas a las que se añaden ahora los Desafíos, un nuevo modo de juego con el que podremos repasar de forma sencilla las trayectorias de Mbappé o Klopp mientras completamos distintos retos y ganamos unos nuevos créditos que nos permiten obtener sobres u otras recompensas, facilitándonos algo más formar una buena plantilla.
Esta nueva vertiente es interesante y es de agradecer porque le da un toque de aire fresco a FUT, aunque se ha hecho de una forma demasiado sencilla y hubiéramos agradecido algo más profundo e incluso como modo de juego independiente, similar por ejemplo al trato que le ha dado NBA 2k23 a Michael Jordan con el modo Desafío Jordan y que creemos que tiene una fácil réplica en FIFA.
Por lo demás, más allá de un nuevo sistema de química que tampoco es que cambie demasiado las cosas, podemos encontrarnos con lo de siempre, Division Rivals, amistosos, partidos de la semana contra el TOTW, personalización profunda del estadio y una economía que creemos que ajusta mejor las recompensas permitiéndonos obtener de forma más sencilla sobres dorados para adquirir nuevos jugadores, aunque los que se gasten más dinero seguirán teniendo una ventaja notable (incluso en estas fases tempranas de juego ya nos hemos encontrado a jugadores con leyendas como Kaká o Ronaldinho en sus alineaciones) y solo el tiempo dirá si estos retoques se notan en algo o seguimos estando ante un modo con una clara tendencia al pagar para ganar.
El césped más real que nunca
A nivel técnico FIFA 23 sigue cuidando hasta el más mínimo detalle y este año en lo que más parecen haber trabajado es en el estadio y en el césped, ofreciéndonos una gran iluminación a cualquier hora del día, o un aspecto bastante más realista de la hierba y de su desgaste a medida que va avanzando el partido, dejando las marcas de los tacos tras las entradas, por poner un ejemplo.
Si nos fijamos en las texturas no creemos que haya demasiada diferencia con respecto al año pasado y los mejores retoques se han producido, como decimos, en el estadio y todo lo que rodea el partido, mientras que a nivel de caras y cuerpos de jugadores nos seguimos encontrando con luces y sombras ya que los jugadores que han sido "escaneados" por EA Sports cuentan con un realismo excelente mientras que otros incluso de equipos de primer nivel pero sin minutos (como Mariano en el Real Madrid) no cuentan con una cara ni medianamente parecida a la real, mientras que a los entrenadores se les sigue poniendo el mismo cuerpo con distintos rostros, algo que choca con figuras más fornidas como la de Ancelotti.
Con lo que respecta al sonido, como siempre en este sentido el trabajo de EA Sports es sobresaliente, con una banda sonora genial, un número increíble de cánticos para los equipos presentes en el juego y, a nivel de comentarios en España, nos seguimos encontrando con intervenciones más o menos animadas que siguen fallando en algunas ocasiones y que creemos que se han quedado un tanto anticuadas.
Pasando al rendimiento, no hemos tenido problema alguno jugando en PlayStation 5 a 4K y 60 fps sin ningún tipo de problema mientras que a nivel de conectividad estamos también bastante satisfechos con la experiencia de juego, con muy poca latencia en la respuesta y sin lagazos o problemas, aunque es probable que el juego sí experimente dificultades durante los primeros días por la saturación inicial de sus servidores.
Conclusiones
FIFA 23, si lo miramos como una entrega independiente y ajena a una saga, es un buen juego de fútbol con una jugabilidad que, pese a sus fallos, es muy divertida permitiéndonos disfrutar del balón, hacer regates e hilvanar jugadas de ensueño mientras disfrutamos de un montón de modos de juego diferentes, marcamos goles y nos asombramos con la recreación de los estadios o el ambiente de los partidos.
Sin embargo, si lo miramos como una entrega anual que debe evolucionar año tras año, EA Sports parece tener claro que por el momento siguen ganando el encuentro a su máximo rival y también lo importante que va a ser para ellos abandonar el año que viene el nombre de FIFA para abrazar EA Sports FC. Con esto en mente (o al menos así lo vemos nosotros) este año se han dedicado a tocar el balón con seguridad, a hacer fútbol control y darnos una entrega que no arriesga porque saben que van ganando el partido y que, probablemente, peca de falta de ambición tanto en cambios jugables como en novedades en sus modos de juego.
Lo cierto es que nos podíamos esperar algo así por la situación de la saga en la actualidad y es hasta lógico pensar que EA se está guardando los grandes cambios y novedades para EA Sports FC. Así que, ¿merece la pena FIFA 23 este año? Si sois jugadores enfocados en el online que os gusta disfrutar de FUT o Clubes Pro lo cierto es que sí, ya que hay cambios suficientes en estas dos vertientes (sobre todo en la segunda) como para volver a sumergirnos en el mejor juego de fútbol en la actualidad en su conjunto. Sin embargo, si sois jugadores de la vieja escuela que preferís disfrutar de una Carrera tradicional con un jugador o un mánager y ya tenéis FIFA 22, no hay demasiados alicientes en lo jugable más allá de la actualización de plantillas o de poder tomar el control del carismático Ted Lasso y el Richmond.
Hemos realizado este análisis en su versión de PS5 con un código proporcionado por Electronic Arts.