Análisis de The Spectrum Retreat (PS4, Switch, Xbox One, PC)
Portal popularizó allá por 2007 los puzles en primera persona, un concepto que hasta entonces no había tenido demasiada relevancia. Poco a poco, este género fue ganando fuerza, y ahora tenemos un amplio catálogo dentro de éste entre el que elegir. El último en sumarse a la lista es The Spectrum Retreat, un título que, sin innovar demasiado, se las ha apañado para atraparnos. Y nunca mejor dicho.
Vacaciones de pesadilla
The Spectrum Retreat es un juego de puzles en primera persona en el que tenemos que jugar con el color. Pero vamos poco a poco, ya que su mejor baza es la narrativa y el universo que han creado. Para nosotros, ir descubriendo la historia ha sido casi tan interesante como resolver los puzles, gracias a ese entorno tan extraño y misterioso que nos acompaña durante toda la aventura.
Así, la experiencia se divide en dos partes. Por un lado, tenemos la exploración del hotel. Despertamos en el hotel Penrose, un complejo en el que parece ser que somos el único huésped. Un robot mayordomo sin rostro nos dará los buenos días, y nos invitará a bajar a tomar nuestro desayuno. La atmósfera es desconcertante desde el primer momento, y la cosa no va a hacer más que empeorar.
Nuestra única compañía es un extraño teléfono circular a través del que nos contacta alguien que asegura que puede ayudarnos. Para poder escapar tenemos que llegar hasta la azotea del hotel, pero cada planta está bloqueada por una serie de puzles que tenemos que resolver. Para poder acceder a esos puzles hay que encontrar unas pistas que nos darán un código PIN, y que tendremos que buscar por el hotel.
No es un desafío extremo y nos darán pistas para conseguirlo, pero está muy bien integrado en la jugabilidad y nos gusta mucho su aporte narrativo. Además, se irán abriendo nuevas zonas del hotel poco a poco, donde podremos encontrar coleccionables que aportan su grano de arena a la historia. Una vez tengamos el código PIN, comienzan los puzles.
En The Spectrum Retreat, como decíamos, vamos a jugar con el color. Nuestro extraño teléfono circular puede absorber el color de unos cubos presentes en el escenario, transportarlo y transferirlo a otros cubos. Esto permitirá habilitar y deshabilitar puertas y pasarelas que nos separan del final de cada nivel. Como os podéis imaginar, la cosa se irá complicando, con escenarios cada vez más exigentes y más colores que utilizar.
Según vamos progresando, vamos a ver cómo se introducen nuevas mecánicas. Por ejemplo, necesitaremos ciertos colores para teletransportarnos a través del escenario usando las plataformas del respectivo color. No os vamos a contar todas las mecánicas, porque gran parte de la gracia es descubrirlas, pero lo importante es que se van introduciendo nuevas mecánicas para que haya variedad jugable.
En lo que respecta a la duración, es difícil estimarla con un juego de puzles. Creemos que de media se puede ir las 8 horas, pero depende enormemente de lo rápido que encontréis la solución a sus pruebas. En cualquier caso, su duración nos parece acertada; igual que su curva de dificultad, muy bien medida para que nos vayamos acostumbrando a sus mecánicas.
Art decó al servicio del puzle
La ambientación juega un papel fundamental en The Spectrum Retreat, y su apuesta por transportarnos a un hotel de estilo art decó poblado por robots ya nos hace sentir que algo no está bien. La recreación de esta parte de la experiencia nos ha gustado mucho, y nos parece que funciona bastante bien. Además, hay muchos pequeños detalles que le dan ese extra de mal rollo: cosas como las imágenes en las paredes o cómo desafían sutilmente las leyes de la física para confundirnos.
La parte de los puzles sí que es un tanto más genérica, pero al menos cumple su cometido. Es funcional y nos permite ver perfectamente y en todo momentos los elementos necesarios que necesitamos para resolver los puzles, por lo que no hay mucho que podamos criticar. En lo técnico, apuntar que en PS4 Pro, plataforma en la que lo hemos analizado, funciona a 30 imágenes por segundo y con una imagen muy limpia, aunque no sabemos cuál será su resolución.
Apuntar también que nos llega con subtítulos y textos en castellano, algo muy importante para seguir la historia y poder disfrutar una parte tan importante de la aventura. Las voces están en inglés, con buenas actuaciones que nos guían por el hotel.
Buenos puzles, mejor ambientación
The Spectrum Retreat es un buen juego de puzles. Sin ser revolucionario ofrece una buena colección de desafíos a superar, con una curva de dificultad muy bien medida y con mecánicas interesantes. Ahora, su ambientación nos parece muy, muy buena, y nos ha atrapado con una historia que mezcla el surrealismo con problemas cotidianos, muy bien contada e integrada en la jugabilidad.
Creemos que, si os gusta este género, quedaréis satisfechos con lo que este título tiene que ofrecer. En lo que respecta a los puzles como tal, no es el más original, pero el conjunto sí es sorprendente, y presta más atención de lo habitual a la narrativa, algo que se agradece. Si se os apetece pensar mientras descubrís una interesante historia, The Spectrum Retreat es una muy buena opción.
Hemos realizado este análisis en PS4 Pro con un código proporcionado por Plan of Attack.