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Género/s: Bailar / Musical
Fecha de lanzamiento:
PS4, XBOne, X360, Switch, WII, WiiU:
FICHA TÉCNICA
Desarrollo: Ubisoft
Producción: Ubisoft
Distribución: Ubisoft
Precio: 59,99 €
Jugadores: 1-4
Formato: Blu-ray
Textos: Español
Voces: Inglés
Online: Sí
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Análisis de Just Dance 2019 (PS4, Xbox One, Xbox 360, Switch, Wii, Wii U)

Accesible y atractivo a la vista, pero también con menos modos de juego.
·
Actualizado: 21:31 17/8/2020
Análisis de versiones PS4, Xbox One, Xbox 360, Switch, Wii y Wii U.

Tan fiel a su cita como el turrón o FIFA, llega la versión anual de Just Dance 2019. Durante nueve años seguidos Ubisoft nos propone bailar en Navidades -y durante el resto del año- guiados por fondos estridentes y bailarines de neón, y durante nueve años también el juego ha salido para Wii; de forma que está disponible en las tres últimas consolas no portátiles de Nintendo: Wii, Wii U y Switch, además de en Xbox One, PlayStation 4 y Xbox 360 (es el único juego que sale para Kinect este año). Ya no hay versión para la consola anterior de Sony, PS3.

De hecho, parece que el éxito de la serie va asociado a la que fue consola más popular de Nintendo y acompaña a esta en su larguísimo declive. No hay que olvidar que mucha gente se acercó a los videojuegos con Wii y no avanzó más allá. El año pasado, por primera vez desde que nació Just Dance, el título se quedó fuera de la lista de los más vendidos pese a que tenía algunas incorporaciones buenas como los modos Kids para niños o Dance Lab, con minijuegos musicales.

En Just Dance 2019 da la sensación de que Ubisoft, consciente de que su serie es demasiado dependiente del jugador casual que sigue manteniendo Wii como fuente de entretenimiento digital, intenta fijarse, centrándose más en un baile más pulido, en jugadores muy específicos que son algo más jóvenes que en los juegos anteriores y en los niños.

Lo que más destaca es la remodelación de los menús, mucho más sencillos, limpios y ordenados. Ya el año pasado se notó el interés por evitar el galimatías en que se habían convertido, pero en la edición de este año el cambio ha sido radical.

Desde el principio se dividen las dos opciones, para niños y Just Dance, poniendo mucho más fácil a los padres estar tranquilos de que sus hijos pequeños no bailarán canciones de contenido y coreografía más adulta, y al resto de los jugadores obviar esa opción durante el resto de su sesión de juego.

Como siempre, hay canciones con un bailarín, dúos, tríos y cuartetos.

En el modo Kids sólo podemos poner una de las canciones, o todas en bucle, y en Just Dance hay una barra a la izquierda en la que están todas las opciones básicas y el resto de la pantalla lo ocupa información adicional de cada una de estas opciones. Aunque el juego nos obliga a empezar bailando sin todas las opciones abiertas, en quince minutos están todas las opciones del menú desbloqueadas.

Aunque no se entiende el porqué de ese bloqueo inicial que despista un poco, el excelente diseño permite ver las canciones y entender todas las opciones del juego mejor que nunca, desde acceder a las playlist o crear una nueva a elegir un tema o cambiar la dancer card.

Ubisoft ha decidido dar más relevancia y visibilidad a su modo online, World Dance Floor, que también es más ágil que en los juegos anteriores y está en el menú principal. En esta ocasión consiste en distintos desafíos (interpretar tres temas, combatir por equipos…) que suelen durar menos que la batalla colectiva contra un jefe que había antes.

La nueva y más limpia interfaz tiene también un espíritu menos festivo. Esta edición del juego parece menos pensada para hacer el loco en reuniones sociales -algo que fue clave para su éxito en 2009-, y más para competir y disfrutar aprendiendo a bailar con las distintas canciones. Siguen habiendo algún tema gracioso como "Milosc W Zakopanem" de Slawomir, pero son menos que en años anteriores. Las coreografías son más variadas, los escenarios de baile están mucho más cuidados, Ubisoft ha contado con artistas callejeros para algunos fondos con graffiti y el personaje en slow motion de "Mi mi mi" de Serebro versionado por Hit The Electro Beat.

El juego ha ganado en calidad visual y variedad de movimientos, pero ha perdido en modos de juego; podemos competir en World Dance, elegir temas sueltos o listados de temas, y ya. Es cierto que hay playlists muy variadas, incluyendo una que el juego elabora en función de los temas que más hayamos elegido, y podemos crear unas propias, y los logros diarios nos animan a utilizar distintas opciones para conseguir las monedas mojoque sirven para desbloquear temas, ilustraciones y avatares, pero opciones como Dance Lab iban muy bien para las reuniones sociales ya que consistían en movimientos y ni siquiera había que tener nociones de baile. Este año el juego es mucho más directo y sencillo en la apariencia y el contenido.

En Bum Bum Tam Tam, de varios intérpretes, los escenarios tienen dibujos del artista callejero Chanoir.

El repertorio también tiene variaciones respecto a años anteriores; están representados bastantes estilos musicales, desde el "Havana" de Camila Cabello, con una coreografía alternativa de tango, al remix de "Finesse" de Bruno Mars ft Cardi B. o el K-pop de "DDU-DU DDU-DU" de BlackPink, y la mayoría de los temas son recientes. Solo cuatro temas son anteriores al año 2000, lo que refuerza la idea de que Just Dance se dirige a un público más joven y menos a eventos sociales con gente de distinta edad… a menos que recurramos a la suscripción a Just Dance Unlimited, el magnífico catálogo de más de 400 canciones de años anteriores.

El modo Kids llegó como una de las mejores ideas de la edición del año pasado y cubre una franja de edad a la que hasta ahora no llegaba el juego de forma tan directa; en él los más pequeños pueden jugar tranquilamente sin que los padres deban supervisar el contenido y bailes de cada canción. En Just Dance 2019 se consolida como una gran opción para que los más pequeños de la casa puedan bailar solos o en compañía sin tanto sentido de estar compitiendo (no tiene puntuación y el sistema de estrellas es menos evidente), con coreografías muy bien adaptadas y divertidas, quitando la simple "Un poco loco" de la película de Disney-Pixar Coco.

Uno de los temas es el ganador de Eurovisión de este año ('Toy', de Netta), lo que ha animado a Ubisoft a incluir una bailarina más recia de lo habitual y que aparece también en algún otro tema.

La versión de Switch, la que hemos probado, no da la opción de utilizar el móvil y requiere un Joy-con para cada jugador, hasta seis jugadores, con opción de activar la vibración. No es un método de control demasiado exigente y demuestra que la unión con Kinect hacía mucho bien al juego (siempre que las condiciones de iluminación permitiesen que nos captase bien el dispositivo de Xbox).

Conclusiones

Just Dance 2019 es mucho más concreto y claro que otros juegos de la serie, y también se limita al buscar a un público determinado, aunque parece una jugada inteligente toda vez que el público que lo alzó a los primeros puestos de las listas hace casi diez años parece que está dejando de lado por fin a Wii. El resultado es un juego aparente pero que, en realidad, es poco más que una actualización con más de 40 nuevas canciones a la fórmula ya existente. Eso sí, puede ser una buena oportunidad para incorporarse a quien no haya probado la serie todavía en esta generación de consolas.

Este análisis se ha escrito tras probar el juego en la versión de Switch con un código facilitado por Ubisoft.

Redactora

NOTA

7

Puntos positivos

Unos menús más cómodos e intuitivos.
Mejores escenografías para las canciones.
Coreografías más variadas.

Puntos negativos

Se han eliminado algunos modos.
Un repertorio de temas demasiado contemporáneo.

En resumen

En Just Dance 2019 las coreografías y escenografías son más variadas, pero en los temas musicales el abanico de estilos se queda algo corto.