A veces resulta complicado encontrar muestras de música que se salgan de la norma, bandas sonoras que vayan más allá de los estilos comunes que se suelen utilizar, pero desde luego cuando se da el caso uno sabe que se encuentra ante algo único que jamás encontrará comparación. Eso es justamente lo que ocurre con la música que traemos esta semana en VGM, que todavía no ha encontrado imitador.
Nos referimos a las bandas sonoras de Terry Scott Taylor creadas para el Imaginarium formado por The Neverhood, Skullmonkeys y BoomBots, que se encuentran entre las más locas, imaginativas y brillantes que han dado los videojuegos. Hoy hablaremos de la carrera de este compositor fuera de los videojuegos y por supuesto de cómo acabó poniendo música a los tres títulos de The Neverhood Inc.
Del rock al videojuego
Terry Scott Taylor es un compositor y productor norteamericano que ha tenido su mayor actividad fuera de la industria del videojuego, sobre todo en bandas de rock. Sus inicios se remontan hasta 1972, cuando fundó Jubal's Last Band junto a los músicos Steve Baxter y Jerry Chamberlain. Aquella banda sufrió varios cambios hasta que en 1975 pasarían a llamarse Daniel Amos, el grupo de new wave y rock cristiano por el que es más conocido.
Terry Scott Taylor lanza entonces Knowledge & Innocence en 1986, el que sería su primer album en solitario, dedicado a su abuelo. Seguiría con su carrera en solitario publicando algunos álbumes más como A Briefing for the Ascent. En 1988 se une al grupo de rock alternativo The Swirling Eddies, con los que también sacará varios discos. La tercera banda será Lost Dogs en 1992, quizás la que más se parezca al estilo que utilizará después en los videojuegos, dado que los álbumes que graba con ellos se enmarcan dentro del country rock.
Imaginarium
En 1996, Taylor recibe su primer encargo para videojuegos de la mano de Doug TenNapel, que había fundado The Neverhood Inc tras abandonar Shiny Entertainment —la desarrolladora de Earthworm Jim— y venía planeando hacer un juego con plastilina desde 1988. The Neverhood es una aventura point and click con elementos de claymotion, por lo que le pidió a Scott Taylor que hiciera una BSO clay-like. El resultado es una mezcla fascinante de Dixieland, acoustic blues y folk con unas letras onomatopéyicas de lo más desternillantes, suponiendo el trabajo musical más brillante de su carrera.
Scott Taylor y su improvisada Neverhood All Clay Band nos llevan por canciones impresionantes como «Klaymen Shuffle», protagonizada por corno y clarinete bajo, el simpático «Olley Oxen Free», «Rock n’ Roll Dixie», los lamentos de «Skat Radio», «Operator Plays a Little Pingpong», la fantástica «José Feliciano» —en homenaje al cantautor puertorriqueño—, la reidora «Homina Homina», el duo magnífico de banjo y lengüetas en «Triangle Square», «Southern Front Porch Whistler» y por supuesto la inolvidable melodía de «Klaymen’s Theme» y el folk ruso del gran «The Neverhood Theme». Fue la propia Dreamworks Interactive quien publicó el imprescindible CD de Neverhood Songs, algo que era bastante inusual fuera de Japón en 1996. Sin duda alguna, una de las grandes BSO de videojuegos.
En 1998, aquel primer juego de The Neverhood Inc tendría una secuela titulada Skullmonkeys, esta vez solo para PlayStation. En este caso volvieron a contar con Terry Scott Taylor, que dejaría nuevas canciones. El opening «Skullmonkeys Theme» es una versión acelerada y más percutiva del «Klaymen Shuffle», mientras que el fantástico swing de «Beeo Bop Bo Shards» hace de tema para el menú. Otros temas destacados son «She Reminded Me with Science», «Time to Goof Off», «Castle de los Muertos» o «The Worm Graveyard». En 1999 habría una entrega más dentro de este universo, el juego de lucha BoomBots, también para PlayStation. Tenía menor cantidad de música de Taylor, pero es otra muestra de calidad, en especial el tema principal «Funkybots» y «The Last Thing We Never Said».
En el año 2000, Dreamworks se encargaría de editar el álbum Imaginarium, que cubre la música de las tres entregas en 2 CD, uno para The Neverhood y el segundo compartido entre los otros dos. El disco volvería a ser reeditado en 2004 con el título Imaginarium: songs from the Neverhood, suponiendo el lanzamiento más accesible de encontrar a estas alturas. En 2012, Taylor tuvo la oportunidad de colaborar en Return to the Neverhood, un cómic inspirado por el juego que también contó con un álbum musical del mismo nombre.
La última de las manifestaciones de The Neverhood tuvo lugar en 2015, que fue cuando regresaron con el crowdfunding de Armikrog, prometiendo una nueva banda sonora de Terry S. Taylor. Finalmente el proyecto se cumplió, y aunque no sea un juego tan bien recordado, merece la pena escuchar las últimas composiciones de Taylor, que están disponibles en el CD de The Music of Armikrog.
Neverhood All Clay Band:
Terry Scott Taylor – Guitarra, Voz, Coros, Percusión, Theremin
Bob Carr & Mike Nelson – Cornos, Clarinetes
Gene Eugene – Bajo, Teclado, WahWah, Percusión
Ed McTaggart & Wayne Everett – Baterías
Greg Kellog – Banjo
Janet McTaggart, Rich Young Ruler – Coros
Mike Roe – Guitarra en «Psychedelic Boogie Child».