Mi historia con este juego es una historia de tardes muertas en casa de un amigo en partidas interminables donde uno jugaba y otros tres miraban, dando consejos de hacia donde dirigirse o qué hacer. Con lápiz y una libreta cuadriculada íbamos haciendo un mapa que a la postre acabaríamos por memorizar a base de jugar y jugar bajo la ciudad de Aguaprofunda.
Eye of the Beholder es un juego de rol basado en el universo de Dragones y Mazmorras, concretamente en el mundo de Los Reinos Olvidados, el mismo mundo en el que se desarrolla la saga Baldur's Gate. Fue desarrollado por Westwood Studios y publicado por Strategics Simulation, Inc en 1990 para MS-DOS. Mas tarde fueron realizadas versiones del juego para Amiga, Mega CD y Super Nes. Repasaremos la trilogía de Eye of the Beholder como un gran clásico de los juegos de rol y uno de los mayores exponentes de los juegos basados en D&D.
Eye of the Beholder
Hay muchos juegos de rol basados en el universo de D&D, pero bajo mi punto de vista este refleja como pocos el espíritu de las partidas del juego de rol de mesa. El hecho de sumergirte en una mazmorra con personajes de nivel 3 y progresar con estos personajes, encontrar tesoros y ver como se hacen poderosos, es el espíritu puro y duro de D&D. Mazmorras y saqueo de tesoros. Nunca jugué una partida a D&D donde no nos peleásemos por conseguir la parte más suculenta del tesoro de un monstruo.El argumento del juego nos sitúa en Aguaprofunda (Waterdeep) donde los señores de la ciudad se han reunido para liberar a la urbe de un antiguo mal. Ruegan por que les sea concedida la posibilidad de elegir a sus héroes. Aquí es donde entramos nosotros como elegidos para la erradicación de este mal. Con un grupo de hasta cuatro aventureros tendremos que adentrarnos bajo Aguaprofunda para encontrar y destruir este mal.
Se trata de un juego de rol en tiempo real con una perspectiva en primera persona donde se nos da libertad para crear nuestro grupo de cuatro aventureros de nivel 3 siguiendo las reglas establecidas de D&D en cuanto a profesión, características, alineamiento, etc. Una vez creado el grupo nos adentramos en los que es una clásica mazmorra de D&D, con sus niveles de profundidad, estancias, monstruos y tesoros.
La pantalla interfaz del juego nos ofrecía a la izquierda la acción y la pantalla de lo que veíamos en todo momento. Todo lo que acontecía se representaba con una vista en primera persona. A la derecha veíamos nuestros personajes y abajo una caja de texto donde se nos mostraban los mensajes de las acciones que se llevaban a cabo, la brújula y las flechas de navegación. Pulsando sobre uno de los héroes accedíamos a la interfaz donde veíamos su inventario, equipamiento, y teníamos acceso a las características y habilidades de cada uno de ellos. Decir que por supuesto el juego reflejaba perfectamente las reglas de D&D en todo lo referente a combate, hechizos, habilidades, etc.
Podíamos movernos con el teclado numérico haciendo las veces de teclas de dirección de manera que las flechas y las diagonales marcaban como nos movíamos en el juego. El movimiento no era como en los juegos de primera persona sino que podríamos que era por cuadros, de modo que si nos movíamos adelante avanzábamos a un nuevo cuadro sin transición de animación ninguna. Esto hacía que fuera fácil perderse, hasta que te habituabas al control y sobre todo lo hacía muy difícil de seguir para los que no controlaban lo cursores. Podíamos atacar a los enemigos pulsando sobre el icono del arma de cada personaje representado en la interfaz, del mismo modo accedíamos a los hechizos disponibles para los personajes magos o clérigos que pudiesen lanzarlos.
Una vez en el juego todo se resumía en avanzar descubriendo el camino, subir de nivel, encontrar mejores armas, etc hasta llegar al final y enfrentarnos al Beholder Xanathar. Cuando acabé el juego por primera vez me encontré con una ingrata sorpresa. En el final del juego, apareció una pantalla azul con letras blancas donde se describía como los héroes consiguieron acabar con Xanathar y escaparon de la mazmorra para ser proclamados salvadores de Aguaprofunda. Ni una miserable escena estática mostrando a héroes genéricos como al inicio del juego. Más tarde en la versión de Mega CD se añadieron animaciones y escenas, entre otras mejoras como voces, como las del encuentro con Xanathar y el final del juego.
Como curiosidad decir que a lo largo del juego podíamos resucitar al algún personaje del que encontrábamos los restos en las mazmorras.
Eye of the Beholder II: The Legend of Darkmoon
La segunda parte sitúa a los héroes en una taberna de Aguaprofunda, disfrutando de un merecido descanso después del periplo de la primera parte. En ese momento es cuando Blackstaff, un archimago de Aguaprofunda, les cuenta envió un explorador para investigar el templo de Darkmoon, donde se dice que se están cometiendo actos malvados, quedando sin noticias de dicho explorador. El archimago nos transporta al templo donde debemos encontrar al explorador desaparecido, resultando al poco de llegar que las cosas no son como parecen.Esta segunda entrega modifica el juego en algunos aspectos como la inclusión de exteriores en las localizaciones que explorar y el aumento de la interactividad con el entorno, además de incrementar el número de elementos de rol. A nivel jugable el juego se mantiene muy parecido, habiendo en este sentido pocos cambios significativos, ni siquiera en la interfaz. Se nos permite alcanzar más nivel con los personajes, con lo que el acceso a nuevos niveles de hechizos y a armas más poderosas estaba garantizado.
Esta segunda parte está considerada por muchos como el mejor de los tres aparecidos y como uno de los mejores juegos de rol de la época.
Un elemento muy interesante era la posibilidad de transferir los personajes de un juego a otro dándonos la posibilidad real de seguir con los mismos héroes con los que habíamos acabado la primera parte. Sin embargo había ciertos objetos que no podíamos transferir de un juego a otro u otros que cambiaban de nombre.
Eye of the Beholder III: Assault on Myth Drannor
Después superar la Torre Carmesí, derrotar al malvado Dran Draggore y salvar la ciudad en la segunda entrega, lo héroes se encuentran en una taberna local contando los sucesos acontecidos. Mientras tanto un misterioso hombre entra en la taberna y se une a la conversación y los convence para ir a la ciudad Myth Drannor a recuperar un objeto de manos de un Lich llamado Acwellan. Con esta premisa nos embarcamos en una nueva aventura donde podemos volver a recuperar los personajes de la anterior entrega.Esta tercera parte no fue desarrollada por Westwood Studios. Se uso un nuevo motor para el juego y se mejoraron los gráficos y la presencia de personajes no jugadores. A pesar de que en aspectos técnicos superaba a la segunda parte, para muchos jugadores se perdió la esencia de la saga en esta tercera parte, mostrando un hilo argumental por debajo de lo esperado. Esta tercera entrega cierra una trilogía que mantiene a la segunda parte como mejor exponente de la saga y como uno de los mejores juegos de rol de la historia.
Curiosidades
En muchos aspectos Eye of the Beholder recuerda y es bastante parecido al mítico y premiadísimo Dungeon Master creado por FTL Games en 1987.Tanto la primera como segunda parte fueron puntuados con la máxima nota en diversas publicaciones de la época, convirtiéndose rápidamente en un referente dentro del género.
Los aficionados han creado módulos para Nerverwinter Nights inspirados en las mazmorras originales de Eye of the Beholder.
Capcom fue la encargada de publicar la edición del juego para Super Nintendo y Yuzo Koshiro fue el encargado de la música en la versión de Mega CD.
El éxito de esta saga propició la aparición de otros títulos inspirados en el universo de D&D como Ravenloft.
Las ruinas de Bajomontaña, es el módulo para Advanced D&D más valorado y conocido de cuantos han aparecido y es considerado como una de las mejores aventuras de los juegos de rol. La primera parte de Eye of the Beholder se desarrolla en el mismo escenario que este módulo.
Westwood Studios se desvinculo de la saga después de la segunda parte y creo otro gran juego de rol llamado Lands of Lore, que bien podía pertenecer a esta saga por interfaz y jugabilidad.
Esta saga de juegos constituye un referente y es todo un clásico de los juegos de rol aunando como pocos los juegos de rol para PC y los juegos de rol clásicos como Dungeons & Dragons. Es un juego que ha envejecido muy bien y constituye todo un referente para una época dorada de los juegos de rol. Nos gusta pensar que sin el éxito de esta saga no hubieran sido posibles juegos como Baldur's Gate.