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Sagas famosas, juegos desconocidos

Las licencias son muchas veces demasiado jugosas como para no exprimirlas. ¿Cuáles son los juegos más raros de tus sagas favoritas?

Sagas famosas, juegos desconocidos Parte 3

Segunda parte del reportaje

IP. Intellectual property. Propiedad intelectual. Saga. Marca. Estas palabras han ganado especial protagonismo en los últimos años, y no es casualidad. Cuando creas algo quieres asegurarte de que es tuyo, y muchas veces vemos esos conflictos entre estudios y editoras por ser los dueños de ese nuevo universo que cobra vida en un juego. Poseer una propiedad intelectual es clave, ya que, de tener éxito, te permite explotarla de mil y una maneras.

Pensad en Sonic. ¿Os imagináis que el erizo hubiese sido propiedad del equipo que lo creó y no de Sega? La historia hoy en día habría sido muy diferente. Las compañías aprovechan para lanzar todo tipo de productos basados en sus sagas de éxito, no sólo juegos, aunque hoy nos centraremos en ellos. Hoy os vamos a contar algunos de los títulos más desconocidos de las sagas más conocidas, y si os gusta este especial, volveremos con más.

Mega Man Soccer

Con Mighty Nº9 todavía en nuestras mentes, es inevitable recordar que Mega Man disfrutó de una popularidad envidiable. Capcom pensó que no sería mala idea poner su saga al servicio del fútbol y lanzó para Super Nintendo en 1993 Mega Man Soccer, juego cuyas mecánicas necesitan poca explicación.

A pesar de un control un tanto tosco, se trataba de un título divertido en el que se combinaba el fútbol con los personajes y poderes especiales de Mega Man. Es curioso que, además, era un juego con su argumento, aunque sus compradores se quedaron sin ver el desenlace. El juego se lanzó claramente sin terminar, con un error que impedía ver el final o incluso activar los desbloqueos de completar el juego, siendo en este caso el Dr. Wily, que aparecía parcialmente en el menú pero era imposible de seleccionar.

Metal Slug: Allen's Battle Chronicles

Uno de los arcades más queridos de acción también tiene sus hijos perdidos. En este caso se trata de Metal Slug: Allen's Battle Chronicles, dos juegos móviles lanzados en Japón de manea independiente, y en un solo pack conocido como Metal Slug Mobile 3 en Norteamérica.

Tal y como su título indica, se trata de un juego de la conocida saga de SNK que mantiene intactos sus pilares: plataformas, disparos y más disparos. Eso sí, esta vez no controlamos a nuestros queridos héroes, sino a uno de los rivales. Allen O’Neil, el jefe que se suele enfrentar a nosotros con su ametralladora M240 Bravo, es el protagonista esta vez, ofreciéndonos un acercamiento ligeramente diferente a la batalla sin alejarse de lo que cabe esperar de Metal Slug.

Onimusha Blade Warriors

Si antes hablábamos de Mega Man, ahora vamos a recuperar otra saga de Capcom que también echamos de menos. Onimusha vivió una época dorada en los 128 bits que no sabemos muy bien por qué acabó, pero fue lo suficientemente dorada como para probar suerte con un spin-off: Onimusha Blade Warriors.

Manteniendo el combate con espadas y habilidades mágicas de la saga, pasábamos a una lucha multijugador cuerpo a cuerpo desde una perspectiva lateral. Casi como si de un Super Smash Bros. se tratase (de hecho, hasta el menú de selección de personajes era bastante similar), nos lanzábamos a la batalla con hasta cuatro jugadores, y un nada despreciable set de personajes, incluyendo algunos invitados de la mencionada saga Mega Man. Lejos de ser el mejor juego de lucha de la historia, es cierto que conseguía divertir y ofrecer una ambientación que no es la más explotada en la vertiente bidimensional de este género.

God of War: Betrayal

El boom móvil que tenemos ahora es la mera consolidación del fenómeno que empezó hace ya hace bastantes años con los primeros dispositivos capaces de ejecutar aplicaciones Java. Tras dos exitosas entregas en PlayStation 2, en 2007 Kratos se pasaba a los teléfonos con God of War: Betrayal, trasladando el combate, las plataformas y los puzles por los que se había hecho famosa la saga a estos dispositivos.

A pesar de poder parecer el típico juego para aprovechar el tirón de God of War, se trata de un título de calidad, aprovechando las limitadas posibilidades de sus plataformas, pero con mucho esfuerzo detrás. Para que os hagáis un idea, fue supervisado por Sony Santa Monica, Kratos cuenta con más de 100 animaciones y todo el arte corrió a cargo de WayForward Technologies, conocidos por su talento con las dos dimensiones –para que os hagáis una idea, son los creadores de Shantae, A Boy and his Blob, Mighty Switch Force o Ducktales Remastered–. Probablemente no será el juego que mejor haya envejecido, pero es un digno miembro de la familia.

The Elder Scrolls Adventures: Redguard

Aunque a la saga nunca le ha faltado calidad o méritos, parece que desde The Elder Scrolls V: Skyrim, la comúnmente abreviada TES ha alcanzado un estado casi de leyenda. En su larga historia, eso sí, cuenta con algunos juegos más desconocidos que experimentaron con los diferentes mundos. Preparaos ahora para viajar hasta Tamriel, 400 años antes de la primera entrega de la saga.

En The Elder Scrolls Adventures: Redguard teníamos una aventura que es prácticamente lo opuesto de las entregas principales: un juego generalmente guiado, en tercera persona, con un personaje predefinido y centrado únicamente en la acción. Lanzado en 1998 para PC, la idea era crear una subsaga inspirada por Tomb Raider, Prince of Persia y Ultima donde la acción y la aventura fueran los pilares principales, pero, como veis, no terminó de cuajar.

Typing Jet (Set Radio)

Jet Set Radio, a pesar de su enorme potencial y popularidad, no ha sido la saga más prolífica. La caída de Sega y la falta de interés del público de Xbox en títulos más nipones probablemente acabaron con su futuro, pero esto no evitó que Sega lanzase un título menor para móviles en Japón, llamado Typing Jet.

En la línea de algo más conocido Typing of the Dead, controlábamos a los personajes de la saga mientras que teníamos que esquivar obstáculos escribiendo palabras para evitar que nos cogiese la policía. Lanzado en 2001, este título nunca salió de Japón, pero probablemente sea curioso para los aficionados de la saga conocer su existencia.

Castlevania Judgment

Parece ser que, a poco belicosa que sea una saga, la idea de poner a sus protagonistas a zurrarse se vuelve tentadora. Si antes era Capcom con Onimusha, ahora os hablamos de Konami haciendo lo propio con Castlevania. En este caso se trataba de un juego de lucha en tres dimensiones uno contra uno, donde diferentes personajes de la saga se medían en combates armados.

Incluso con Koji Igarashi como productor, Castlevania Judgment no fue precisamente un éxito, y se convirtió en un discreto título de Wii que pronto se perdió entre el abultado catálogo de la consola. Los motivos, una cámara poco acertada, un diseño que no terminaba de convencer y unos controles de movimiento que hacían difícil luchar con acierto; además de, probablemente, la frustración por no tener una nueva entrega principal de la saga.

Tekken Card Challenge

Con una nueva plataforma siempre surgen posibilidades de llegar a nuevos mercados, y cuando tienes una saga como Tekken en tus manos, desde luego que te interesa probar suerte. Pero, ¿qué pasa cuando el hardware de la consola no es el ideal para adaptar tu serie? Pues que quizás es el momento de intentar cambiar de género.

Y así llega Tekken Card Challenge para WonderSwan, lanzado en 1999, y que combinaba la base de otros juegos de cartas como el de Pokémon o Yu-Gi-Oh. A pesar de lo que pueda parecer, era un juego bastante completo, no sólo en lo que respectaba a contenido, sino también en su sistema de combate. Éste intentaba recrear con la mayor fidelidad posible las posibilidades de las entregas principales de la lucha, e incluso nos permitía realizar air juggling con las combinaciones correctas de cartas.

The King of Fighters: Kyo

Otra saga de lucha que cambió de género es The King of Fighters con The King of Fighters: Kyo, lanzado en 1998 para PlayStation. Esta entrega nos ofrece una aventura rolera, replete de diálogos y hasta combates por turnos, en los que elegíamos una serie de movimientos a enlazar para ejecutarlos luego uno detrás de otro, homenajeando a las batallas en tiempo real originales.

Basado en el manga homónimo, The King of Fighters: Kyo nos contaba una historia ambientada entre las entregas de la saga bautizadas como ’96 y ’97, con mucha más carga narrativa que los episodios de lucha. Aunque no es, ni mucho menos, la entrega más conocida (por eso está aquí), es curioso que Sega tuviese una idea similar con Virtua Fighter con el juego que acabaría convirtiéndose en Shenmue, y que Koei Tecmo quisiera hacer lo mismo con Dead or Alive, aunque el proyecto acabara siendo cancelado.

Before Crisis: Final Fantasy VII

¿Tienes ganas de jugar a Final Fantasy VII: Remake? Quizás puedas paliar las ganas con un título de la saga (o incluso la subsaga que ya es Final Fantasy VII) que probablemente no hayas jugado. Hablamos de Before Crisis: Final Fantasy VII, un título para dispositivos móviles lanzado en Japón en 2004.

Se trata del primer gran Final Fantasy lanzado para móviles, y expande la historia de Final Fantasy VII con hechos que acontecen seis años antes de la aventura principal. Jugablemente, era un juego de rol en dos dimensiones con combates en tiempo real, que incluso contaba con un sistema un tanto precario de juego online, permitiendo cooperar con otros jugadores o incluso intercambiar materia a través de correos electrónicos. Como curiosidad, en 2010 se estudió hacer una versión para Nintendo 3DS, pero los diferentes proyectos en los que Hajime Tabata (director del juego) estaba involucrado hicieron que no se llevara a cabo.

Dr. Robotnik’s Mean Beam Machine

Cuando tienes una saga que está en la cima de su popularidad, qué mejor que aprovechar sus personajes para adaptarlos a las mecánicas jugables de otra saga ya asentada. Eso es lo que hizo Sega con Dr. Robotnik’s Mean Beam Machine o Dr. Robotnik and his Mean Beam Machine, en función del territorio, que simplemente cambiaba su apariencia para ofrecernos una nueva entrega encubierta de la saga Puyo Puyo.

Lanzado para Mega Drive, Game Gear y Master System entre 1993 y 1994, Dr. Robotnik’s Mean Beam Machine le da todo el protagonismo al ahora llamado Eggman, a quien tendremos que derrotar a través de un clásico juego de puzles. Por primera vez, somos nosotros quienes derrotamos a Robotnik, ya que en ningún momento se hace mención de Sonic.

Devil May Cry 3 Mobile

Antes hablábamos del boom móvil y la necesidad de intentar adaptar muchas de las grandes sagas a dispositivos móviles. Éste es uno de esos ejemplos de cómo intentar pasar un juego de consola a móvil puede tener un resultado… dantesco.

La versión móvil de Devil May Cry 3 era, de hecho, dos juegos diferentes, con una versión en 3D y otra en 2D. Ambas compartían protagonista y varios enemigos, armas, movimientos y entornos del juego de consola, pero, aparte de eso, la similitudes eran algo más discutibles, y las limitaciones del juego –tanto en 2D como en 3D– obvias.

Captura de la versión en dos dimensiones.
Captura de la versión en tres dimensiones.

Twisted Metal: Small Brawl

Como hemos venido repitiendo durante este especial, las compañías siempre quieren alcanzar un mayor público potencial para sus sagas, ya sea adaptándolas a nuevos géneros, nuevas plataformas o nuevas audiencias. Éste es el caso de Twisted Metal: Small Brawl que, para que os hagáis una idea, se desarrolló con el nombre provisional de Twisted Metal Kids.

Así, Sony tomó la fórmula de la saga y la envolvió en un tono más cómico, permitiendo que las batallas se realizaran con coches de radiocontrol y con un aspecto visual más colorido, lo que suponía una experiencia mucho más adecuada para un público más joven e incluso infantil. La recepción del juego no fue la más positiva, pero hay que tener en cuenta que estaba dirigido a unos usuarios diametralmente. Con Twisted Metal: Small Brawl nos despedimos por ahora, esperando que os haya gustado para poder volver con más juegos desconocidos de sagas famosas.