El teletrabajo se ha consolidado como una de las grandes transformaciones laborales de los últimos años, permitiendo a millones de personas trabajar desde casa y disfrutar de una mayor flexibilidad. Sin embargo, no todas las empresas han logrado que sus empleados acepten con entusiasmo volver a la oficina tras este cambio. En este contexto, una empresa familiar italiana, especializada en pinturas para la construcción, ha encontrado una solución poco convencional para atraer a sus trabajadores: ofrecer desayunos gratuitos en la oficina.
La clave está en el desayuno
La idea surgió de los resultados de un cuestionario interno sobre el clima laboral. “En 2023, muchos empleados jóvenes mencionaron que llegaban a trabajar sin haber desayunado”, explica Mariluce Geremia, vicepresidenta y directora de recursos humanos de la compañía, según recoge La Vanguardia. Al analizar estos datos junto con los niveles de productividad, descubrieron que el rendimiento en las primeras horas de la mañana era significativamente más bajo. Fue entonces cuando decidieron implementar el “desayuno corporativo” como un experimento para mejorar la productividad y el bienestar de sus trabajadores.
Los resultados no tardaron en llegar. Según Geremia, más de 100 empleados se sumaron diariamente a esta iniciativa. “Durante la prueba de verano, vimos mejoras claras en indicadores como el tiempo empleado para preparar productos para su envío. Además, el ambiente de trabajo se volvió más distendido y colaborativo”, afirma. Debido al éxito obtenido, la empresa no solo ha mantenido los desayunos, sino que también ha ampliado su oferta de actividades, como clases de yoga, catas de vino y sesiones de meditación después del horario laboral.
Los efectos negativos de trabajar en pijama
El teletrabajo, aunque lleno de ventajas, ha mostrado también algunos efectos negativos, como el sedentarismo y la falta de interacción social. Iniciativas como la de esta empresa buscan revertir estos efectos ofreciendo a los empleados un entorno más dinámico y saludable, fomentando la convivencia y el trabajo en equipo. Geremia destaca que organizar actividades de valor no solo mejora el rendimiento, sino que también anima a los trabajadores a regresar a la oficina con mayor frecuencia.
La clave, según la directora de recursos humanos, está en escuchar a los empleados y adaptar las políticas de la empresa a sus necesidades. “Muchas compañías están retrocediendo en el trabajo remoto, y eso me parece un error. Para nosotros, lo importante es encontrar un equilibrio y ofrecer incentivos que motiven a los trabajadores a venir a la oficina”, asegura Geremia.
Mientras el debate sobre el teletrabajo continúa, este ejemplo demuestra que existen formas creativas y efectivas de atraer a los empleados de vuelta a la oficina sin imponer restricciones. ¿Será esta la fórmula para el futuro del trabajo híbrido?
