Un nuevo descubrimiento en Nueva Zelanda tiene a los historiadores realmente emocionados, y es que se han descubierto 450 restos de una waka (embarcaciones maorí) esparcidos por una de las playas del país. El hallazgo se realizó, realmente, por pura casualidad, y es que Nikau y Vincent Dix, padre e hijo pescadores, encontraron en un arroyo cerca de su casa un trozo de madera extraño y especial que les hizo indagar en la isla conocida como Rekohu. A raíz de eso, se inició el proceso de investigación.
Un hallazgo histórico en Nueva Zelanda revoluciona a los historiadores: encuentran los restos de una waka casi completa
Una vez encontraron ese peculiar trozo de madera, ambos volvieron al lugar donde la encontraron para seguir investigando debido a sus extrañas características: "Nos lo llevamos todo a casa y comenzamos a ensamblarlo, tratando de descubrir de qué se trataba... Y pensamos: 'Oye, esto está empezando a tomar la forma de un barco'".
Frente a la importancia y magnitud del descubrimiento, decidieron llamar a las autoridades para que profesionales se hicieran cargo del resto, y entonces los historiadores y expertos fueron claros: una waka histórica que debe montarse mediante un puzle de más de 400 piezas. Sara Gainsford, conservadora a cargo de parte del equipo de investigación, asegura que hay mucho trabajo por delante.
"Estamos documentando todo y manteniéndolo en un estado estable para que podamos darle a la comunidad la oportunidad de discutir lo que quieren hacer. Es mucho para asimilar y una gran tarea cuidar de un waka de este tamaño", comenta, según recogen desde AS. Por su parte, Justin Maxwell, el arqueólogo que lidera la investigación, está altamente contenido y emocionado con el descubrimiento, es que es realmente único.
"No importa lo antiguo que sea, no podemos exagerar lo increíble que es", declara. "Pasará a la historia como uno de los hallazgos más importantes de todos los tiempos en Polinesia", dice para The Guardian. Veremos lo que tardan los expertos en hacerse con esa waka al completo y si pueden montarla por completo. Es sumamente extraño que todo haya acabado en el mismo sitio después de tantos años, por lo que es un hallazgo que probablemente no vaya a repetirse jamás.