El estreno de Christy, el nuevo drama deportivo protagonizado por Sydney Sweeney, ha aterrizado en la cartelera con un tropiezo difícil de ignorar. Ha fracasado frente a la todopoderosa Predator: Badlands La película, centrada en la figura de Christy Martin -una pionera del boxeo femenino y miembro del Salón de la Fama- apenas logró 1,3 millones de dólares en su lanzamiento limitado, una cifra muy pobre.
Este estreno la sitúa entre los peores debuts de la historia para un título proyectado en más de 2000 salas. Según Box Office Mojo, solo un puñado de películas estrenadas en condiciones extraordinarias, como los primeros meses de la pandemia, han registrado aperturas similares.
Fiasco histórico: el biopic Christy se desploma y deja a Sydney Sweeney contra las cuerdas
El dato contrasta con el notable esfuerzo físico y emocional que Sweeney ha puesto en el proyecto. La actriz, que recientemente fue el rostro de una polémica campaña de American Eagle -aquella del eslogan “Sydney Sweeney Has Great Jeans” que provocó debates culturares inesperados hasta llegar a la Casa Blanca- ha insistido en entrevistas en que su inmersión en el papel fue total. Entrenó durante meses, ganó más de quince kilos de masa muscular y rodó escenas de combate donde, según cuenta, los golpes eran reales: narices sangrando, contusiones y hasta una pequeña conmoción cerebral formaron parte del proceso.
Christy marca además un movimiento estratégico para Black Bear Pictures, compañía que en los últimos años ha ampliado su actividad hacia la distribución. Aunque el estudio es conocido por títulos de prestigio como The Imitation Game o Mudbound, este lanzamiento en Estados Unidos funcionaba como una suerte de prueba de fuego para su nueva etapa. Es una lástima, pero el escaso tirón comercial plantea interrogantes sobre su capacidad para competir en un mercado donde el mid-budget drama lucha por encontrar su sitio.
En redes, Sweeney ha compartido imágenes del rodaje y mensajes de agradecimiento y
pese al traspié en taquilla, la actriz subraya que esta película ha sido una de las experiencias más transformadoras de su carrera. El tiempo dirá si Christy encuentra una segunda vida más allá de su deslucido estreno y se convierte en un must en la temporada de premios.
