El café es una de las bebidas más consumidas en el mundo, apreciada por su capacidad para aumentar la alerta y mejorar el rendimiento cognitivo. Sin embargo, su consumo excesivo puede tener efectos adversos en la salud como insomnio, ansiedad y hasta problemas estomacales.
La Organización Mundial de la Salud recomienda no superar los 400 mg de cafeína al día, equivalente a unas cuatro tazas de café filtrado. Superar esta cantidad puede provocar síntomas como insomnio, ansiedad, palpitaciones y problemas digestivos.
Provoca insomnio
Uno de los efectos más comunes del consumo excesivo de café es el insomnio. La cafeína puede permanecer en el organismo hasta 9,5 horas, interfiriendo con los ciclos de sueño y dificultando la conciliación del mismo . Además, puede causar palpitaciones y aumentar la presión arterial, especialmente en personas sensibles a la cafeína .
El consumo elevado de café también puede desencadenar ansiedad y nerviosismo. La cafeína estimula la liberación de cortisol, la hormona del estrés, lo que puede intensificar los síntomas de ansiedad en individuos predispuestos . Además, puede provocar temblores y contracturas musculares en casos de consumo excesivo .
Puede provocar problemas de estómago
En el sistema digestivo, el café puede aumentar la producción de ácido clorhídrico en el estómago, lo que puede agravar condiciones como el reflujo gastroesofágico o el síndrome del intestino irritable. Además, puede interferir con la absorción de minerales esenciales como el hierro y el calcio, especialmente si se consume en grandes cantidades o junto con alimentos ricos en estos nutrientes.
Alternativas como el café descafeinado, el té verde o infusiones sin cafeína pueden ser opciones adecuadas, aunque es importante tener en cuenta que el café descafeinado aún contiene pequeñas cantidades de cafeína y puede causar efectos secundarios en personas muy sensibles.