Durante años, los fans de Los Simpson hemos esperado casi con devoción la confirmación de una segunda película. No es para menos: desde su debut televisivo en 1989, la familia amarilla solo se había asomado a la gran pantalla con Los Simpson: La Película (2007), un largometraje que no solo amplió la escala de las tramas habituales de la serie, sino que demostró que su universo podía sostener una aventura cinematográfica sin perder su esencia.
Aquella cinta recaudó más de 536 millones de dólares en todo el mundo, convirtiéndose en un fenómeno internacional y en uno de los mayores éxitos comerciales de una adaptación televisiva animada. Su impacto cultural fue inmediato: desde el icónico Spider-Cerdo hasta la imagen de Springfield encerrada bajo una cúpula, el filme dejó huella en la memoria de varias generaciones.
Cuando 20th Century Studios anunció el pasado septiembre que Los Simpson: La Película 2 estaba oficialmente en marcha, la noticia se recibió casi como un pequeño acontecimiento histórico. Ahora hay una mala nueva: el filme se retrasa unos meses en su llegada a los cines.
Los Simpson: La Película 2 mueve su fecha de estreno y confirma su retraso con una imagen humorística
La compañía acompañó el anuncio con una primera imagen promocional en la que Homer aparecía sujetando una gigantesca rosquilla rosa decorada con un “2”, un guiño tan sencillo como eficaz para confirmar que el proyecto era real. Eso sí, entonces no se revelaron ni los guionistas implicados, ni el equipo creativo, ni una sinopsis que orientara sobre la nueva aventura en Springfield. Lo único claro era una fecha marcada en rojo: 23 de julio de 2027.
Las últimas horas, como os decimos, han traído un jarro de agua fría. 20th Century Studios ha comunicado que la secuela retrasa su lanzamiento en cines un par de meses, mudándose al 3 de septiembre de 2027. No es un retraso drástico, pero sí lo suficiente para reavivar la impaciencia de quienes llevan años aguardando noticias del proyecto. Como pequeño consuelo, el estudio ha hecho pública una nueva ilustración firmada por Matt Groening. Quien no se consuela es porque no quiere.
