El empresario José Elías Navarro, fundador de Audax Renovables y una de las figuras más mediáticas del sector energético español, ha vuelto a encender la conversación pública con un mensaje que ha desatado un auténtico terremoto en redes sociales tras hablar de los cambios fiscales en España. En dicho, Elías denuncia lo que considera una “presunción de culpabilidad fiscal” hacia el empresario en España, un tema que vuelve a poner sobre la mesa el delicado equilibrio entre recaudación, transparencia y confianza institucional.
José Elías (49), el empresario español con negocios en 8 países: “Solo en España me tratan como a un delincuente”
"Tengo empresas en ocho países, y solo en España tengo que demostrar mi inocencia", escribía el empresario en su cuenta de X -la antigua Twitter- en un mensaje que no tardó en viralizarse. "Mi compañía eléctrica opera en buena parte de Europa, pero el único país donde debo justificar que no soy un explotador es este. Aquí se parte de la idea de que el empresario es culpable por defecto", añadió.
Elías, conocido por su discurso directo y por no rehuir la controversia, quiso matizar sus palabras poco después: su crítica no iba dirigida contra el sistema fiscal en sí, sino contra su falta de transparencia. "Estoy totalmente a favor de pagar impuestos. Creo en sostener el sistema, en contribuir. Pero también creo que alguien debería explicar con claridad en qué se gasta el dinero de todos", escribió, dejando entrever un malestar creciente con la gestión pública.
El empresario fue más allá, cargando con dureza contra el trato que, según él, recibe quien genera empleo en España: "Estoy cansado de dos cosas: de darles mi pasta para que se la fundan y de que me traten como a un criminal. Desde el primer momento te miran como si estuvieras cometiendo un delito. Hacienda está politizada, y el mensaje que transmiten es claro: si creas riqueza o tienes patrimonio, prepárate para demostrar que no eres culpable".
En otro de los fragmentos más comentados de su publicación, Elías arremetió contra los incentivos internos de la Agencia Tributaria, denunciando lo que considera una práctica "absurda" y poco ética- Más allá de la crítica fiscal, Elías quiso apelar a un cambio cultural: "Ni los empresarios somos explotadores, ni los sindicalistas son vagos. Hay que analizar caso a caso". Un llamamiento que intenta suavizar el enfrentamiento ideológico que suele marcar el discurso económico en España, pero que no evitó la polarización.















