Por más que Superman (2025) se presente como una superproducción destinada a entretener al gran público, hay preguntas que resultan inevitables cuando se sienta uno frente a su director. Y más aún si quien dirige es James Gunn, un cineasta que no suele esquivar temas delicados. En plena gira promocional, y con el clima político estadounidense cada vez más polarizado, no ha tardado en surgir una cuestión incómoda: ¿refleja su Superman el estado actual del país? ¿Tiene algo que decir, por ejemplo, sobre la inmigración?
James Gunn desata la polémica al definir a Superman como “un inmigrante venido de fuera”: ¿el héroe se ha vuelto superwoke?
La respuesta de Gunn ha sido tan clara como punzante. En una entrevista concedida al Sunday Times, recogida después por Variety y que ha generado una tormenta mediática en EE.UU, el también guionista y copresidente de DC Studios no ha eludido el tema. “Para mí, Superman es la historia de Estados Unidos”, ha declarado. “Es un inmigrante que llega de otro lugar y encuentra su lugar aquí. Pero sobre todo, es una historia sobre la bondad humana, y eso es algo que hemos ido perdiendo por el camino”, apuntaba el cineasta.
Gunn sabe perfectamente que ese tipo de afirmaciones pueden levantar ampollas. No sólo entre los sectores más conservadores, sino también entre los fans más combativos, esos que siguen sin perdonar la ausencia de Henry Cavill o la caída en desgracia del universo ideado por Zack Snyder. Aun así, ha optado por no morderse la lengua. “Siempre habrá idiotas por ahí que no entiendan el mensaje, o que se ofendan simplemente porque habla de ser bondadoso. Pues que les den”, ha soltado sin rodeos.
Y, como era de esperar, el tiro ha resonado. En FOX News, concretamente en el programa The Five, han reaccionado con un despliegue de indignación marca de la casa. “¿Superman es ahora Superwoke?”, se preguntaba Jessica Tarlov, presentadora del espacio, dando pie a una tanda de reproches por parte de sus colaboradores. “No vamos al cine para recibir sermones ideológicos”, decía Kellyanne Conway, habitual del canal. “Me pregunto si esta película logrará conectar con la audiencia”.
La polémica no se detiene ahí. Según Gunn, su versión del Hombre de Acero también pone sobre la mesa dilemas morales. “¿Está bien no matar bajo ninguna circunstancia, como cree Superman, o hay que buscar un punto medio, como piensa Lois Lane?”, reflexiona. La película, dice, gira en torno a esa tensión ética y cómo puede afectar incluso a una pareja tan icónica como Clark y Lois.
Faltan horas para que el público comience a emitir su veredicto. En Francia, Superman aterriza este miércoles 9 de julio, mientras que el estreno en Estados Unidos, España y buena parte del mundo está previsto para el viernes 11. Será entonces cuando sepamos si esta nueva visión del último hijo de Krypton conquista los corazones o termina volando directo al ojo del huracán cultural.
