El Señor de los Anillos: Los anillos de poder es la gran apuesta de Prime Video en el cada vez más competitivo mundo del streaming. La producción de Amazon es una obra colosal, pensada para extenderse hasta cinco temporadas, contando además con la base literaria del trabajo de J.R.R. Tolkien y la ambientación en la Tierra Media.
La serie, que en estos momentos rueda su tercera temporada, luce como pocas, con paisajes que parecen sacados de una postal, ciudades que respiran grandiosidad y bosques que invitan a detener la imagen solo para contemplar sus cascadas y matices. A ello se suma un despliegue de criaturas fantásticas que, por acabado y detalle, no desentonarían en una gran superproducción de Hollywood. No es casualidad: la segunda temporada de la serie conducida por J.D. Payne y Patrick McKay puede haber marcado un récord histórico en televisión.
El Señor de los Anillos: Los Anillos de Poder se reivindica como la producción más monumental de las plataformas gracias a sus efectos especiales
Jason Smith, supervisor de efectos visuales de la serie, lo explicó en declaraciones a The Hollywood Reporter. En Los anillos de poder se han usado más de 6000 planos con efectos especiales para dar forma a los ocho episodios. La comparación impresiona: Avengers: Infinity War y Endgame, juntas, apenas superaron los 5180 planos digitales. Smith lo define como “un proyecto de ensueño”, algo que nunca se había intentado a esa escala en televisión.
"Un blockbuster de dos horas suele tener entre 1500 y 2000 tomas de efectos. Aquí, cada escena crea un fragmento de mundo, con muchísimos efectos invisibles que el espectador no percibe, pero que están ahí", explica. La magnitud no sorprende si recordamos las cifras que maneja Prime Video. La primera temporada se convirtió en la producción televisiva más cara de la historia con un presupuesto estimado de 465 millones de dólares, y todo apunta a que la segunda ronda números similares.
Es, literalmente, el intento más ambicioso jamás visto en el medio, diseñado para que la Tierra Media luzca con la grandeza que Tolkien imaginó en sus páginas. Con números de audiencia cada vez más altos, Prime Video, lejos de dar un paso atrás por las críticas, ha redoblado su apuesta. El portal ha garantizado el futuro de la producción, y aunque sabe que la espera será larga, busca mantener viva la expectación en una audiencia cada vez más exigente.















