El gobierno japonés ha declarado un nuevo estado de emergencia para Tokio debido al resurgimiento de varios brotes simultáneos de coronavirus. Según informa Variety, el primer ministro Suga Yoshihide hizo el anuncio en una conferencia de prensa vespertina, explicando que el decreto se aplicará en la capital japonesa y las tres prefecturas vecinas de Saitama, Chiba y Kanagawa por un período de un mes, comenzando a partir del 8 de enero. Los principales cines y multisalas de la región se verán afectados por las decisiones de limitación de movimientos y horarios.
La segunda declaración del estado de emergencia que comenzó en abril
De una manera similar a lo ocurrido en España o Italia, se trata de la segunda declaración de estado de emergencia en el país. La primera a principios de abril se aplicó a todo Japón y duró hasta finales de mayo, siendo especialmente restrictiva con cierres generales y limitaciones más severas.
Pero en esta ocasión, siguiendo una estrategia más selectiva, las empresas afectadas, que van desde grandes almacenes hasta restaurantes, bares y cines deben reducir sus horarios de apertura y cerrar las puertas a las 8 de la noche. En algunos casos también pueden existir limitaciones de aforo o de afluencia.
Curiosamente, y al contrario que en otros países y regiones, el cumplimiento es voluntario debido a las restricciones sobre este tipo medidas más estrictas en la constitución japonesa, pero se espera que la mayoría de las empresas se unan y adhieran al mandato del gobierno. Grandes cadenas de exhibición cinematográfica como Toho Cinema y otros circuitos importantes ya han anunciado que, a partir del viernes, venderán solo entradas para el mismo día. Todavía tienen que anunciar oficialmente sus programas y horarios más cortos, así como otras limitaciones, pero parece ser que no tardarán. Como os explicábamos, la taquilla se estaba recuperando en el país de forma lenta y paulatina, con grandes estrenos de anime que habrían logrado grandes números.
Pero en las últimas semanas, el número de infecciones por coronavirus en Tokio y las prefecturas circundantes se ha disparado, alcanzando un récord diario de 2447 contagios solo en la capital, números preocupantes que han llevado a tomar medidas contundentes. El modelo cinematográfico ha vivido un año horrible en 2020, y grandes productoras como Paramount, han alentado a un cambio en el modelo de negocio y en los propios cines, cuya principal fuente de ingresos no es otra que las grandes afluencias de público en las salas, un elemento incompatible en una pandemia que ha dejado millones de infectados y fallecidos en todo el mundo desde finales de 2019 cuando se detectaron los primeros casos en Wuhan, ciudad de China.