Una de las preguntas clave en la nueva trilogía de secuelas de Star Wars a cargo de Disney siempre fue el origen de Rey, la Jedi interpretada por Daisy Ridley. Una de las temáticas de la saga galáctica de George Lucas siempre ha sido el tema de la identidad, quiénes somos, quién queremos ser y hacia dónde queremos llegar con nuestros actos. Si bien en Los últimos Jedi se borraban de un plumazo las teorías conspiranoicas sobre los padres de la protagonista, en El ascenso de Skywalker veíamos cómo estaba relacionada, de forma directa, con el Emperador Palpatine. Esto trajo no pocas polémicas, y aunque J.J. Abrams y Chris Terrio, guionistas y responsables del film, justificaron su idea, parece ser que no fue la única. Ahora es Ridley la que confirma que durante un tiempo, se contempló que Obi-Wan Kenobi iba a tener relación o parentesco con ella.
Una entrevista que da nuevos detalles de los cambios en los orígenes de Rey
Ha sido la propia actriz la que, en una interesante entrevista con Josh Gad para el programa de Jimmy Kimmel, la que ha comentado lo que se ocultaba en el trasfondo de la chatarrera de Jakku. "Al principio estuvimos jugando con la idea de que tuviese algo que ver con Obi-Wan, algún tipo de conexión", explica. "Teníamos diferentes versiones de la idea. Y en un momento, incluso nos encaminamos a la dirección de que no tuviese relación o parentesco con absolutamente nadie. Y luego llegó el Episodio 9, y JJ se me acercó y fue todo un poco como 'Ah, por cierto, Palpatine es tu abuelito'. Y la verdad, me pareció increíble. Y luego, a las dos semanas, volvió de nuevo. 'Mira, no lo sé, no estoy seguro. Vamos a intentar cambiarlo'. Así que fue un concepto que fue evolucionando y cambiando constantemente", añade la actriz.
Curiosamente, hablamos del elemento más divisivo y complejo para los fans, aquello que más debate ha generado durante los años que se han ido estrenando estas películas de mano de Lucasfilm y Disney. Desde el primer momento, algunos arrojaron la posibilidad de Obi-Wan, y parece que se estuvo barajando hasta hace bien poco, ya que la película centrada en el Jedi, que no llegó a buen puerto y que se transformó en una serie de acción real para Disney+, iba a tener una conexión directa con el pasado de la protagonista de la trilogía de secuelas. La irrupción de Palpatine en el planteamiento no fue casual, ya que los creativos detrás de Star Wars buscaron otorgar más coherencia a las tres trilogías, buscando elementos comunes e intentando finalizar la dinastía de los Skywalker al traer un viejo enemigo del pasado, ahondando en la idea de la identidad y la sangre como maldición o bendición.
"Creo que uno de los temas de la película es que cualquiera puede ser cualquier persona que desee ser sin importar de dónde sea, y no sé si tiene el mismo significado para todos, pero creo que hay bastantes personas que aprecian esa idea de proceder de un lugar o de algo de lo que no te sientes orgulloso", explicaba Abrams hace unos meses. "Y sí, estoy de acuerdo que ese famoso 'no eres nadie' de Rian Johnson es devastador, pero creo que es peor y más doloroso saber que vienes de un lugar malvado, del peor origen posible", concluía en relación al plot twist del noveno episodio de Star Wars.
