Tenet se alza como la película que invitará este verano a los espectadores a acudir a las salas de cine. El nuevo trabajo de Christopher Nolan, director de películas tan aclamadas como Origen o la trilogía del Caballero Oscuro, promete dar un giro de tuerca al género del espionaje. El filme estaba previsto para debutar el 17 de julio, y ha mantenido la fecha hasta hace escasos días, cuando Warner Bros. anunciaba que se proyectaría en la gran pantalla el 31 de julio, finalmente. A pesar del contexto actual del mundo y que a la compañía le gustaría retrasar más el estreno... hay un motivo por el cual Tenet sigue figurando en el mes de julio: la felicidad de Nolan.
Tenet, la película que sigue apostando por julio
Según The New York Times, a Warner Bros. le gustaría retrasar aún más el estreno de Tenet para garantizar que el público esté dispuesto a desplazarse hasta una sala de cine, y recuperar la inversión de 200 millones de dólares dedicada al filme. Este tipo de proyectos, con presupuestos tan elevados, están pensados y diseñados para maximizar las ganancias, y no para que funcione como un globo sonda para la situación actual de la taquilla.
Sin embargo, tal y como sostiene el medio, Warner Bros. se encuentra atrapado entre sus deseos de retrasar la película y mantener contento a Nolan, uno de sus cineastas más populares: "En las recientes semanas, Warner Bros. ha estado preocupado por su inversión en Tenet, y es por eso que se inclinaba a favor de un aplazamiento, mientras que Nolan, un ferviente defensor de preservar la experiencia de ir al cine, apostaba más bien por seguir adelante con los planes", sostiene. "Las conversaciones han supuesto un momento tenso para Warner: el señor Nolan es un generador de dinero comprobado, y el estudio quiere mantenerlo feliz".
Nolan quiere que su película se alce como la producción que encabezó el regreso a los cines, siendo Kenneth Branagh quien señaló que Tenet podría ayudar a las taquillas a volver a la normalidad. Sin embargo, queda por comprobar cuál será la actitud de los espectadores frente al hecho de salir de sus casas para ir a las salas de cine, pese a las medidas de seguridad. Esta incertidumbre es la que ha provocado que las compañías estén continuamente cambiando y adaptando su calendario de estrenos a la situación, según se desarrolla la pandemia del coronavirus.
