Feliz día de tu muerte 3 parece estar más cerca de lo que creemos. El productor Jason Blum ha confirmado (vía ScreenRant) que está trabajando duro para que la tercera parte sea una realidad, diseñando una idea y un argumento para una saga que ha triunfado en taquilla. Dirigida por Christopher Landon, y escrita por Scott Lobdell, Happy Death Day se estrenó en 2017. Mezclando el concepto slasher con la mítica Groundhog Day, invitándonos a ser partícipes en una divertida historia sobre bucles en el tiempo protagonizada por una universitaria encarnada por Jessica Rothe. La primera fue un auténtico fenómeno, la segunda no tanto, pero Blumhouse quiere intentarlo una vez más.
Blum está convencido del potencial de la saga
Universal Pictures y Blumhouse Productions no esperaban que una película menor llegase a tener tanto tirón. Como les pasó con El hombre invisible, la película consiguió arrasar en las taquillas recaudando más de 125 millones de dólares con un presupuesto de apenas 5 millones. Un triunfo en toda la regla, que además, conquistó a la crítica que la recibió con los brazos abiertos gracias a un guion lleno de clichés bien resueltos, guiños al género y a numerosas situaciones impredecibles.
Sin embargo, la segunda parte no fue tan bien. Happy Death Day 2U tuvo más presupuesto, y pese a que logró tener cierto rédito en los cines con 60 millones de dólares recaudados, Universal ya se lo pensó dos veces a la hora de decir sí a una tercera parte. Jason Blum no cejó en su empeñó, y en colaboración con la protagonista de la saga, Jessica Rothe, se lanzaron a pedir una trilogía.
De hecho, en una reciente entrevista con Entertainment Tonight, se le preguntó a Blum sobre esta hipotética Happy Death Day 3, y el fundador y el consejero delegado Blumhouse Productions se mostró bastante optimista. "Dejadme decir que estoy trabajando horas extras en ello. Creedme", concluía. Pese a todo, no pudo dar detalles, ni confirmar hacia qué dirección podría enfocarse Landon. Los rumores hablan de la posibilidad de ampliar dicha saga en base a la ciencia ficción y la física cuántica, un elemento que ya se exploraba en la segunda parte, añadiendo a nuevos personajes en la fórmula y favoreciendo la entrada de nuevas paradojas, secundarios de lujo muy cómicos y situaciones gore típicas de los slashers más clásicos. Otra opción, si Universal Pictures no está por la labor, es convertir el guion en una serie de televisión. Estamos seguros de que varios portales pujarían por los derechos de una producción así, sobre todo ahora que sagas como Scream han demostrado que es un camino válido.