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Análisis: Capítulo 30 del manga de Dragon Ball Super

Comienza el reclutamiento para el Torneo de Poder.
Análisis: Capítulo 30 del manga de Dragon Ball Super
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Mientras que en el anime de Dragon Ball Super nos vamos acercando al final del Torneo de Poder, en el manga todavía se está preparando todo para que esta gigantesca competición entre universos tenga lugar. De hecho, en el capítulo de este mes, el 30, el Universo 7 todavía no ha terminado de reclutar a todos sus combatientes, por lo que esperamos que el torneo como tal no comience hasta el final del episodio 31 o incluso hasta el 32 si deciden alargar los acontecimientos para mostrarnos más detalles del resto de Universos.

Comienza el reclutamiento

Esta vez el capítulo comienza justo tras la derrota de Goku ante Toppo, momento en el que el Gran Sacerdote comienza a explicar algunas de las reglas que tendrá el Torneo de Poder tras lo visto en los combates previos, confirmando que cada equipo tendrá diez integrantes, prohibiendo el uso de armas y afirmando que la única forma de eliminar rivales es echándolos del escenario, quedando totalmente prohibido el asesinato.

De la misma forma, confirma que la duración del torneo será de 48 minutos y que este tendrá el formato de una Battle Royale. También promete que el luchador más fuerte se llevará las siete Super Dragon Balls, por lo que podrá pedir el deseo que quiera.

Sin embargo, aquí es cuando el Gran Sacerdote da las malas noticias a todas las deidades presentes: los universos que caigan derrotados serán eliminados de la existencia, a excepción de los universos 1, 12, 5 y 8, quienes no estarán obligados a participar en la competición, ya que el nivel medio de los mortales de dichos universos supera el 7.

Según explica, Zenosama ya había decidido eliminar a los otros ocho universos, ya que considera que hay demasiados, por lo que este torneo dará la oportunidad de salvarse a uno de ellos.

De este modo, el Gran Sacerdote envía a todo el mundo a sus hogares para que comiencen a reclutar, ya que solo tienen 39 horas para prepararse antes de la batalla. Tras hablar un poco, Goku, Beerus, Whis y Kaioshin deciden ir a casa de Bulma para explicarle la situación a sus amigos y pensar en quiénes pueden formar parte del equipo del Universo 7.

Esta escena da paso a otra en el Universo 11 donde Belmod manda a Toppo a buscar a las Tropas del Orgullo para reclutarlas para la batalla, especificándole que haga lo que haga tiene que conseguir que Jiren acepte unirse al torneo, ya que con él tendrían la victoria asegurada.

Desde aquí nos devuelven al Universo 7 para que veamos a Goku y Bulma regañando a Goku por la situación en la que se han visto inmersos. Además, Vegeta se niega a participar, ya que su deber como padre y esposo le obliga a quedarse junto a Bulma para asistir al nacimiento de su próxima hija, el cual puede suceder de un momento a otro.

Para que no haya problemas con esto, Whis utiliza su magia con Bulma y hace aparecer al bebé en el aire fuera de su cuerpo sin causarle ningún tipo de daño, momento en el que Goku se sorprende pensando que así es cómo nacen los niños, confirmando de este modo que nunca ha estado presente en el nacimiento de ninguno de sus hijos (el de Goten era de esperar, ya que estaba muerto cuando sucedió, aunque el de Gohan puede pillarnos algo más por sorpresa).

Considerando que Bra ya ha nacido, Vegeta no tiene problemas en apuntarse al torneo, por lo que comienzan a pensar en los posibles participantes. Los primeros en los que piensan, además de en Goku y Vegeta, son Piccolo y Bu (Goku también propone a Monaka ya que sigue pensando que es el más fuerte del universo, aunque Beerus le dice que está ocupado y no puede luchar).

Tras descartar a Goten y Trunks, también deciden reclutar a Ten Shin Han, Krilin, Mutenroshi, A18 y A17, por lo que Goku parte a buscarlos a todos (empezando por Krilin) antes de que volvamos a asistir a un cambio de escena, llevándonos de vuelta al Universo 11.

Allí nos muestran a las Tropas del Orgullo enfrentándose a un gigantesco monstruo con forma de cangrejo que está destruyendo una ciudad entera, antes de que aparezca Jiren y lo derrote y aprisione con un solo golpe devastador.

Aunque todos los integrantes de las Tropas del Orgullo aceptan en formar parte del equipo del Universo 11, Jiren no se muestra muy convencido, ya que considera que su deber es proteger a la justicia y a los débiles, y no quiere que su Universo se salve teniendo que sacrificar a otros para ello.

Sin embargo, Belmod sale a escena y le comenta que si gana el torneo podrá obtener las Super Dragon Balls para pedir "ese deseo" que siempre ha querido cumplir, aunque en ningún momento especifican cuál es, lo que le lleva a Jiren a aceptar, aunque bajo la condición de que si alguien necesita su ayuda durante el torneo, lo abandonará para acudir en su auxilio, finalizando de este modo un episodio algo lento y muy de transición, aunque necesario para entender bien la trama y todo lo que está por suceder próximamente.

Carlos Leiva
Redactor

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