El actor Aaron Taylor-Johnson, quien interpretó a Quicksilver en Los Vengadores: La era de Ultrón, sigue siendo uno de los grandes ausentes del multiverso Marvel, algo que ni él mismo parece comprender. Durante una reciente entrevista con IMDB, el actor reflexionó sobre su breve pero icónico papel como Pietro Maximoff, recordando con cariño su trabajo junto a Elizabeth Olsen y dejando claro que todavía hay una espina clavada: ¿por qué Wanda, con sus poderes para alterar la realidad, nunca lo revivió?
Taylor-Johnson no oculta su admiración por Olsen, a quien calificó como “una actriz fenomenal” y “una estrella absoluta”. Recordó la peculiar dinámica de trabajar juntos como marido y mujer en Godzilla y como hermanos en el MCU, pero no pudo resistir bromear sobre su exclusión en el regreso de Quicksilver. “No sé por qué Lizzie nunca me resucitó”, comentó, haciendo alusión a la capacidad de la Bruja Escarlata de devolver personajes a la vida, algo que ha hecho en los cómics pero nunca con Pietro.
Evan Petesr en vez de Aaron Taylor-Johnson
El tema del regreso se volvió aún más sangrante con el regreso del personaje en WandaVision, donde Evan Peters, conocido por su versión de Quicksilver en las películas de X-Men, tomó el relevo. Sin embargo, el giro resultó ser un simple truco, ya que Peters no era el verdadero Pietro, sino un impostor parte de la trama de Agatha Harkness. Esta decisión dejó a los fans confundidos y a Taylor-Johnson fuera del juego, lo que generó preguntas sobre por qué Marvel no aprovechó la oportunidad de redimir su versión del personaje.
A pesar de su ausencia en el MCU, Taylor-Johnson no ha cerrado la puerta del todo. Actualmente, el actor protagoniza Kraven the Hunter para el universo de Spider-Man de Sony, dejando entrever que su relación con los superhéroes no ha terminado. Aunque no ha confirmado si volverá al MCU, los fans siguen soñando con un posible regreso que haga justicia a su Quicksilver. Con el multiverso en pleno apogeo y Marvel dispuesto a recuperar personajes a conveniencia, el regreso de Taylor-Johnson no parece una idea descabellada.