Italia y Suiza comparten 578 kilómetros de frontera desde 1861 y ahora, después de haber realizado ciertos cambios a principios de los 2000, ambos países preparan una nueva redefinición de sus territorios debido al deshielo rápido y galopante de los glaciares, que cada vez afecta más, sobre todo, al país montañoso de Europa Central. El temor al cambio climático y el calentamiento global del planeta se ha disparado en Europa y los países mencionados tienen en marcha una serie de ajustes para sus puntos de unión.
Suiza e Italia preparan importantes cambios en su frontera: el deshielo de los glaciares afecta a los territorios europeos
El tramo que va a redefinirse se sitúa debajo del pico Matternhorn, una de las montañas más altas de Europa ha sido afectada por ese deshielo incontrolable. La zona en cuestión pasa entre Valais (Suiza) y el valle de Aosta (Italia), obligando a los dirigentes de cada país a tomar cartas en el asunto para reorganizar el terreno.
Las autoridades suizas a cargo de la operación ya han firmado el acuerdo que servirá la redefinir la frontera, y en estos momentos están a la espera de la respuesta italiana: "En la alta montaña, amplios tramos de la frontera italo-suiza están determinados por la divisoria de aguas representada por la línea de cresta de glaciares, campos de nieve y nieves eternas. A medida que los glaciares se derriten, estos elementos naturales cambian y redefinen la frontera nacional", dicen desde Suiza, según recogen en AS.
Evidentemente, la creciente rapidez del deshielo de los glaciares tiene preocupados a los europeos, especialmente a los suizos tras haber tenido que modificar su frontera una vez más tras haberlo hecho en el año 2000 tras el desplazamiento de un glaciar. Suiza ha perdido ya una cuarta parte de sus glaciares y se estima que se perderán el 90% dentro de un siglo, por lo que habrá más cambios en esta frontera próximamente.
