El actor irlandés Paul Mescal, uno de los chicos de moda en Hollywood, se sintió abrumado el primer día de rodaje de Gladiator II. La producción, secuela de la icónica película de Ridley Scott, que la semana pasada mostró un épico tráiler, llegará a los cines 24 años después de su predecesora. Es una cinta titánica y colosal en escala, tanto es así, que Mescal se sintió abrumado. Sin embargo, como ya había demostrado el director británico en el pasado gracias a su fuerte carácter, no le permitió ni un segundo de descanso. Ridley Scott no estaba dispuesto a permitir que esa situación se prolongase y que su estrella principal se durmiese en los laureles.
Paul Mescal estaba muy nervioso al rodar 'Gladiator 2' pero Ridley Scott encontró la forma perfecta de motivarlo
Gladiator II, del legendario director Ridley Scott -que ya planifica su próxima película a los 86 años-, continúa la epopeya de poder, intriga y venganza ambientada en la Antigua Roma. Su trama nos invita a seguir a Lucio (Paul Mescal), que después de presenciar la muerte del admirado héroe Máximo (Russell Crowe) a manos de su tío -interpretado por Joaquin Phoenix-, se ve forzado a entrar en el Coliseo como un gladiador tras ser testigo de la conquista de su hogar por parte de los tiránicos emperadores que dirigen Roma.
Era mucha responsabilidad, y como explica Mescal en una reciente entrevista, se agobió y empezó a sentirse nervioso. Su primer día fue terrible, recuerda. Pero Scott intervino de manera decisiva para calmar sus nervios y darle la confianza necesaria.
"Empecé el rodaje un par de semanas antes que Denzel. El primer día, Ridley entró en mi tienda, me dio una palmada en la espalda y me dijo: 'Tus nervios no me sirven. Tus nervios no me sirven'. Tenía toda la razón. No tiene sentido esperar 25 años para que los nervios de un actor se interpongan en su camino. Me siento muy orgulloso de mi trabajo y de cómo lo abordo todo, pero fue agradable recibir ese empujón de Ridley Scott", recuerda el actor, que se sobrepuso a sus miedos y se puso manos a la obra. Y no es para menos.
El rodaje de Gladiator II ha sido una empresa titánica para Paramount, con con un presupuesto que sobrepasa los 300 millones de dólares, destinado a recrear la grandeza del Imperio Romano y a superar las expectativas dejadas por la primera entrega. Scott, conocido por su meticulosa atención al detalle y su capacidad para manejar producciones a gran escala -tiene mucha experiencia en este ámbito cinematográfico-, ha trabajado incansablemente para garantizar que esta secuela esté a la altura de su predecesora. E incluso se ha permitido el lujo de incluir naumaquias en el Coliseo. Aunque la nostalgia juega un papel crucial en el atractivo de Gladiator II, Ridley Scott ha asegurado que la película no se apoyará únicamente en ella y que contará con grandes momentos como el filme protagonizado por Russell Crowe. Esperemos que así sea.
Gladiator II llegará a los cines españoles el próximo 15 de noviembre.
