La tendencia de los hurtos en supermercados españoles ha dado un giro inesperado en el último año, con el aceite de oliva escalando posiciones hasta convertirse en uno de los productos más codiciados por los ladrones, según el III Informe sobre hurtos en los supermercados españoles realizado por la empresa STC. Este cambio de patrón ha llevado a que, en ocho comunidades autónomas -Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Cataluña, Madrid, Comunidad Valenciana, Extremadura y Baleares-, el aceite de oliva sea el producto más sustraído, superando incluso a los hurtos habituales de jamón, bebidas alcohólicas o atún. La medida de seguridad de colocar alarmas individuales en las garrafas y botellas de un litro se ha convertido en una práctica común en la mayoría de los comercios afectados.
El aceite a precio de oro
El informe destaca la peculiaridad de los robos de aceite de oliva, señalando que, a diferencia de otros productos de alto robo donde las marcas premium son las principales víctimas, en el caso del aceite de oliva, tanto las marcas reconocidas como las marcas blancas son sustraídas por igual. Esto subraya la naturaleza de necesidad o oportunidad de estos hurtos, más que la preferencia por productos de lujo.
La situación del aceite de oliva refleja un cambio significativo respecto al año anterior, donde solo se mencionaba como un producto diferencial en dos comunidades autónomas y no ocupaba una posición tan prominente en el ranking de productos más robados. Mientras que en Aragón destaca el robo de las carnes autóctonas, en Castilla y León y Andalucía las cuñas de queso son un blanco claro. En Cataluña destacan los berberechos y el vaca, y en los archipiélagos los quesos con D.O y los licores autóctonos, mientras que en Navarra, Ceuta y Melilla los ahumados y los encurtidos son lo más hurtado.
Los ladrones no solo tienen preferencias por productos gourmet o de alto valor en el mercado, sino que también se ven atraídos por productos de uso diario y necesidad básica. Este fenómeno podría estar relacionado con los aumentos recientes en el precios de todos los productos. Además, el informe de STC señala que el 90% de los robos en supermercados son cometidos por bandas organizadas y personas reincidentes no profesionales.
