La sequía lleva siendo objeto de preocupación de los expertos desde hace muchos años. Aunque se venga avisando del serio problema al que nos enfrentamos, pocos o nadie hace caso real y no se quiere abordar el problema con seriedad. La cantidad de agua que nos puede restar es una incógnita que merodea la mente de miles de expertos, y cada vez se está cuestionando más debido al problema que están atravesando los embalses y pantanos de nuestro país: los sedimentos están reduciendo la cantidad de agua que estos pueden almacenar. La capacidad de los pantanos se está reduciendo rapidísimamente y las alarmas están en alerta roja.
Los embalses de España pierden capacidad muy rápidamente y los expertos están preocupados
Según un reciente estudio llevado a cabo en 110 embalses de España se ha asegurado una pérdida del 15% de capacidad general. Los aterramientos son una controversia que se podría haber abordado hace años, pero el alto coste y la complicada operación que requería en cada caso ha hecho que eso se vaya dejando de lado, provocando así un colapso en los pantanos y embalses provocando pérdidas de agua debido a la ocupación de tierra. Los ríos y aguas de España transportan consigo materia orgánica y hasta parte de roca, lo que termina convirtiéndose en una especie de tapón para el agua que, en teoría, debería servir para rellenar los embalses, y eso desemboca en que el almacenamiento sea menor. ¿Hay solución para esto?
Sí, hay soluciones, José Luis Casamor y Antoni Calafat, de la Universidad de Barcelona, según informan desde Xataka, desvelaron qué se podría realizar para empezar a sanear ese problema de almacenamiento. Por ejemplo, se podrían construir diques para contener los sedimentos y colar el agua para que los pantanos no se llenen de aterramientos ni de materiales que funcionen a modo de tapón. La reforestación también es una opción viable gracias a que las plantas contienen la erosión del suelo, frenando así el desprendimiento de roca y tierra. En general es un problema que puede cortarse de raíz con una reestructuración en la formación de embalses y pantanos, pero eso necesita muchísimo trabajo y un coste muy elevado.
