La estrella de la saga de Harry Potter, Rupert Grint, ha confirmado que, a pesar de que la seguridad de Warner en los set de rodaje de las películas y de los controles a los que se sometían los miembros del reparto, logró robar en secreto un recuerdo de los decorados. Mientras Howgarts Legacy llega a las consolas y la fiebre por el Mundo Mágico se acrecienta, Grint, al que le encantaría volver a la saga, confirma que mereció la pena jugársela por obtener un detalle de recuerdo.
Grint se llevó un pedacito de los set de rodaje de Harry Potter pese a la alta seguridad de Warner y los controles a los actores
Según el actor, logró desatornillar el número de la puerta de la casa de Potter y logró escabullirse, escapándose sin que lo pillasen a pesar de que las altas medidas de seguridad de Warner Bros., que controlaba todos los accesos a los estudios y las localizaciones.
Al parecer, el estudio intentó evitar que demasiadas piezas de la producción salieran de la casa, sobre todo en las últimas películas, ya que todos los miembros del equipo querían guardarse algo como recuerdo tras tantos años rodándolas. Warner no quería perder las props originales, ya que tenía la esperanza de conservarlas de cara al futuro y de exhibirlas en museos y parques de atracciones. Pese a que el atrezzo se conversó en gran medida, Grint logró llevarse un trocito para él.
"Eran realmente estrictos con todo eso", ha confesado Grint a People en una entrevista de la que se hace eco ComicBook. "Los últimos días de filmación, había seguridad en las puertas del set y las localizaciones, literalmente, revisando los coches. Pero me salí con la mía, cogí el número de la puerta de la casa de Harry. Tuve que desatornillarla. Fue bastante turbio", concluye.
Grint es conocido por interpretar a Ron Weasley en las películas, ha estado trabajando a las órdenes de M. Night Shyamalan tanto en su serie de Apple TV+, Servant, y es uno de los protagonistas de Llaman a la puerta.
