One Piece ha realizado recientemente un giro de guion espectacular que ha logrado unir a toda la comunidad de seguidores del manga de Eiichiro Oda, con Monkey D. Luffy siendo poseedor en realidad de la Hito Hito no Mi: Modelo Nika en lugar de la Gomu Gomu no Mi, generando así que el pasado del personaje pueda pasar de nuevo por las mesas de estudio de los seguidores más acérrimos, para ir en busca de pistas que condujesen hasta ese destino. En el capítulo 1045, One Piece no ha dado un respiro, porque lo que se ha mostrado ahora es el increíble poder de la que se conoce como Gear 5, otra transformación.
En este episodio que os comentamos, con el arco de Wano ya en sus últimos compases, se ha centrado la acción en el combate entre Luffy y Kaido, lo que ha hecho que salten todas las alarmas al ver que el protagonista de la historia tiene todavía un potencial oculto que parece no conocer límites. Está claro que los mangas actuales, como Dragon Ball Super, requieren de nuevas transformaciones para que sus personajes den nuevos saltos narrativos, pero lo de Luffy ha sido espectacular.
Kaido no sabe cómo detener esa máquina de demolición, porque Luffy ahora mismo puede hacer absolutamente lo que quiera con su cuerpo. Literalmente. Lo que el pirata imagina puede ejecutarse y eso hace que su rival, en este caso, quede confundido y no sepa por qué flanco atacar. Eso quiere decir, por ende, que Luffy podría no tener rival en mucho tiempo, porque si puede hacer lo que sea eso repercute en que puede adaptarse y moldearse a todo rival que se le aproxime.
¿Habría que parar el carro?
Mantener esa forma, no obstante, es un poco pesado para Luffy y tampoco es que pueda estar así eternamente, por lo que si establecemos un paralelismo con la mencionada Dragon Ball, estaríamos frente a lo que era un Gogeta Super Saiyan 4 (SS4) en el arco de 'GT'. Mientras está activo es imparable, por lo que hay que jugar con el tiempo para que ese poder toque a su fin.
Veremos si con el tiempo esto se arregla y se atribuyen nuevos factores que puedan delimitar un poco este poder, aunque nos encanta ver a Luffy siempre desatado y sin límites.
