La estrella de Harry Potter, Matthew Lewis, quien dio vida a Neville Longbottom en la saga, ha compartido una emotiva historia sobre Alan Rickman. Lewis, el cual confesó que estaba frustrado por su papel en la licencia, fue madurando en la pantalla como el adorable estudiante torpe de Gryffindor, gozando de un mayor protagonismo conforme la saga avanzaba en sus tramas. Su oportunidad de brillar llegó con Harry Potter y la Orden del Fénix, contando incluso con un momento épico en Harry Potter y las Reliquias de la Muerte Parte II. Si bien no le gusta que le recuerden exclusivamente por su papel, sí es cierto que guarda buenos recuerdos de la saga de fantasía basada en las novelas de J.K. Rowling (vía ScreenRant).
Alan Rickman: Grande fuera y dentro de la pantalla
Siguiendo con la tónica de las declaraciones similares hechas por Daniel Radcliffe y Rupert Grint -de las que nos hicimos eco en Vandal Random-, Lewis comentó hace unas semanas que es decepcionante ser visto simplemente como un personaje más de una saga enorme, sobre todo cuando no lo ha vuelto a encarnar en más de una década. En aquellos convulsos días, Lewis confesó que pidió consejo y orientación en su carrera en una figura experimentada como Rickman. Durante una entrevista en el podcast Inside of You, Lewis profundizó en una de estas conversaciones sinceras con Rickman, que siempre se mostró abierto a guiar a los diferentes actores y actrices que pululaban por el set. El actor de Neville confirma que durante muchos meses fue demasiado tímido como para hablar con él, pero se armó de valor para hacerlo.
"Fui a su caravana. Y solo le dije: 'Oye, sé que es tu último día, y solo quería decir que ha sido increíble haber trabajado contigo durante tanto tiempo. Sé que apenas hemos cruzado un par de palabras todos estos años, pero quería decir que fue porque estaba aterrorizado, has estado increíble'...", le espetó el joven actor. "Gracias por permitirme trabajar contigo durante 10 años, jamás nos has gritado y siempre nos has tratado bien, como si fuésemos exactamente iguales que tu", continuaba exponiendo el joven Longbottom. Según comenta, Rickman se sintió orgulloso al verlo tan lanzado, lo invitó a tomarse un té y charlaron un buen rato. "'Adelante, pasa', me dijo. Y puso la tetera a hervir, tomamos una taza de té y charlamos sobre lo que iba a hacer en mi carrera y lo que me recomendó que hiciera", concluye. Lewis admite que ese momento le marcó profundamente, y que jamás ha tenido una conexión tan profunda con ningún otro compañero de trabajo.
Después de la complicada relación maestro-alumno que mostraron en pantalla, este tipo de anécdotas demuestra que Rickman siempre estaba a la altura de su leyenda. A pesar de su retorcida y compleja interpretación de Snape en la saga de fantasía, el ganador del Globo de Oro era conocido por su comportamiento amable y cercano detrás de las cámaras, ayudando a todos y mostrándose abierto y divertido cuando tocaba. Daniel Radcliffe, ya había proclamado la generosidad de Rickman, un hecho que fue contrastado por Tom Felton (Draco), quien tuvo la suerte de compartir muchas charlas con Rickman que también le cambiaron la vida.
