Sony ha anunciado sus resultados financieros para el último trimestre, de julio a septiembre, con una notable mejora con respecto a las pérdidas por valor de 26.300 millones de yenes registradas en el mismo periodo del año anterior.
De hecho, la compañía ha registrado unos beneficios por valor de 31.100 millones de yenes (277,5 millones de euros) a partir de unos ingresos por valor de 1,73 billones de yenes (unos 15.441 millones de euros).
La compañía atribuye esta importante mejora a los cambios internos, que han implicado el despido de 16.000 trabajadores, y un mejor rendimiento de su división Networked Products & Services, que es donde se incluye Sony Computer Entertainment.
De hecho, si el año pasado la división registró pérdidas por valor de 59.000 millones de yenes, ahora han pasado a unos beneficios de 6.900 millones de yenes (61,5 millones de euros), gracias a las mayores ventas de ordenadores, y el rendimiento de la consola PS3 en el mercado gracias a la reducción en los costes de fabricación.
Los resultados implican una revisión al alza para el total del año fiscal, con unas previsiones de 70.000 millones de yenes (624,7 millones de euros) en beneficios, con unas ventas de 15 millones de PS3, 8 millones de PSP y 6 millones de PS2 para el total del año.
En cuanto a juegos, esperan que no se incrementen significativamente, con 115,6 millones de juegos de PS3, 44,4 millones de PSP y 35,7 millones de PS2.