Dave Bautista es, probablemente, uno de los actores más grandes en lo que atañe a tamaño y masa muscular. El ex luchador de la WWE empezó su camino en Hollywood gracias, en parte, a esa voluminosidad corporal que le permitía encajara maravillosamente bien en proyectos y largometrajes de acción. De hecho, gracias a eso obtuvo sus papeles como Drax en 'Guardianes de la Galaxia' y como Rabban en la 'Dune' de Denis Villeneuve. Sin embargo, el actor parece haber renunciado a esa seña de identidad y ahora ha reaparecido mucho más delgado, con más de 30 kilos menos. Sin embargo, podéis respirar tranquilos: el artista se encuentra bien y está bajando peso adrede para estar más en forma y mejorar su salud.
Dave Bautista ha perdido más de 30 kilos desde 'Llaman a la puerta': El ex luchador de la WWE sigue una dieta vegetariana y se enfoca en mejorar su salud a toda costa
El actor ha confirmado él mismo, tras cientos de rumores y preocupaciones por parte de los fans, que se encuentra perfectamente y que está bajando de peso debido a que llegó a pesar, para 'Llaman a la puerta', 142 kilos, y eso no es lo máximo a lo que ha llegado. Su máximo de peso alcanzó los 167 kilos cuando realizaba sus primeros pasos dentro de la lucha libre. Bautista no podía aguantar más ese peso, que además le daba problemas para encontrar trabajos en Hollywood: "El músculo pesa más que la grasa y he perdido mucho músculo, pero ahora me siento mejor, más cómodo. Estaba teniendo problemas con algunas escenas que ya no podía realizar por el exceso de kilos, pero ahora que me los he quitado de encima estoy mejor", comentaba la estrella. Ahora mismo, el actor está en 108 kilos, lo más delgado que ha estado desde los 19 años. "Eso sí, prefiero perder músculo de la barriga que de los pectorales".
Las dietas de Hollywood y la industria del entretenimiento, donde también se encuentra la WWE, son extremadamente duras y no es fácil mantenerse en plena forma (sino que se lo pregunten a Henry Cavill o Hugh Jackman). Bautista está enfocado ahora en lucir lo más saludable posible, renunciando a los tamaños corporales prácticamente imposibles para así tener acceso a más papeles que permitan desarrollar a personajes más dramáticos, alejados de la acción y la espectacularidad de Hollywood.