Netflix sigue en problemas. El gigante del streaming ha anunciado una nueva ronda de despidos. La empresa de entretenimiento confirmó una enorme pérdida de suscriptores a comienzos de año, un hecho que se materializó en una pérdida de valor en bolsa y en la reestructuración interna que puso fin a las grandes producciones de autor en el ámbito cinematográfico. Pronto llegaron los despidos y las polémicas políticas que llevarán a la compañía a prohibir compartir cuentas. Según relatan desde Variety, Netflix busca seguir reduciendo costes para evitar la debacle empresarial que muchos vaticinan.
Netflix seguirá despidiendo empleados para reducir costes
Se espera que el personal afectado por esta nueva ronda de despidos sea informado al final de la semana, aunque no está claro qué departamentos serán los nuevos objetivos de la directiva. Sin embargo, las fuentes consultadas por el citado medio norteamericano sugieren que los recortes podrían ser similares en tamaño a la ronda de reducciones emprendida en mayo. En aquellos días, Netflix llegó a despedir a más de 150 empleados, así como finalizó sus relaciones con decenas de colaboradores y contratistas a tiempo parcial. Se dice que la empresa de streaming despidió a cerca del 2% de su plantilla hace tan solo unos días y la cifra podría ser mayor en las próximas horas.
Los recortes de Netflix, anunciados a comienzos de año, buscan mantener la salud financiera del ente del entrenamiento a través de la reducción de costes en personal. En estos momentos, la compañía tiene más de 11.000 empleados a nivel global. Y el terremoto financiero despertado por haber perdido a más de 200.000 suscriptores -se cree que hasta 2 millones en los próximos meses-, parece no tener fin. Las acciones de Netflix se han desplomado, perdiendo casi un 70% de su valor en bolsa, un hecho que generó pánico en Wall Street y que ha llevado a las acciones de la empresa a cotizar a 175 dólares por acción cuando llegaron a rozar. y sobrepasar los 600 a comienzos de 2022.
Netflix fue una empresa pionera en el negocio del streaming, captando una cantidad ingente de clientes y revolucionando la forma en que se consumen y distribuyen películas y programas de televisión. En los últimos años el mercado se ha visto plagado de alternativas, con Disney y su Disney+, Amazon y su Prime Video o Warner y su HBO Max. Mientras la competencia presiona, Netflix se ha visto envuelta en una crisis interna sin precedentes agravada por la situación económica, que dibuja un horizonte incierto por culpa de la recesión que se atisba en EE.UU y Europa.