En 2010 junto con el revolucionario periférico de Microsoft, que prometía cambiar decididamente la manera de jugar a los videojuegos, al menos sin un mando, se anunció por todo lo alto un título basado en popular saga Star Wars. Qué mejor manera de llamar la atención del público y atraerlo a este nuevo dispositivo que con una de las marcas más populares del mundo, que empezó como una saga de películas pero que ha saltado a todo tipo de formatos, desde libros, cómics, muñecos y un larguísimo etcétera, a por supuesto los videojuegos, con numerosos títulos.
Un buen movimiento estratégico por parte de Microsoft y un producto que se esperaba llegara en las Navidades de 2011, junto a una edición especial de Xbox 360 en forma de R2D2 y un mando especial dorado, imitando la "piel" de C-3PO. Para disgusto de los amantes de la saga galáctica, en el verano del pasado año se supo que se retrasaba, que no llegaría a tiempo a la campaña navideña, y que su lanzamiento se posponía sin fecha definida.
Finalmente llegará dentro de muy poco, el 3 de abril, y hace unas semanas en el Spring Showcase celebrado por Microsoft en la ciudad norteamericana de San Francisco, hemos podido echarle un último vistazo, y ver de primera mano –y en 3D- algunos de sus modos de juego más peculiares.
El modo de juego principal, la aventura, es Destino Jedi, que por suerte se podrá disfrutar con dos jugadores a la vez, y además con imagen 3D. Comenzaremos siendo un aprendiz padawan, y tendremos que entrenar y aprender junto al carismático maestro Yoda, para progresar en la aventura hasta convertirnos en un caballero Jedi. Emulando lo visto en las películas, podemos utilizar el sable de luz para acabar con los enemigos, o usar otras técnicas más sutiles, como el poder de la fuerza para tirarlos al suelo, o incluso cogerles y lanzarles por los aires o contra algún objeto. El control es muy intuitivo y sencillo, y por ejemplo a los rivales más cercanos les podemos pegar una patada.
Si nos queremos situar a la espalda de algún enemigo, bastará son saltar y le sorprenderemos por detrás. Como ya sabréis los que habéis seguido el desarrollo del juego, el personaje se mueve sobre raíles, nosotros no controlamos su movimiento, solo sus golpes y poderes, lo que a algunos les disgustará, pero que permite que la jugabilidad se centre 100% en la acción, que parece tener bastantes posibilidades. Podemos devolver los disparos enemigos con el sable laser, cargar el poder de la fuerza para romper ciertos elementos del escenario que nos impiden avanzar, o coger pesados objetos y apartarlos de nuestro camino.
Esta demo que vimos parecía transcurrir en el planeta de Naboo, peleando contra algunos de los robots que vimos en los Episodios I y II, películas que parecen serán el marco temporal en el que se desarrolla Destino Jedi, aunque también hemos visto elementos y personajes de otras entregas de la saga por todo el juego, y todavía la historia que nos contará es un misterio. Una aventura que puede ser entretenida, sobre todo si jugamos en compañía de un amigo o familiar, pero que viene arropada por otros muchos modos, que pudimos ver en esta presentación.
Por ejemplo las Carreras de Vainas -podracing-, que pudimos ver en Star Wars: Episodio I - La amenaza fantasma, donde un joven Anakin Skywalker competía en una frenética carrera. Una "disciplina deportiva" que ya llegó en su día en forma de videojuego, con un Star Wars Episode I: Racer para diversas plataformas –incluidas máquinas recreativas-, que incluso contó con una continuación exclusiva de PlayStation 2, Star Wars Racer Revenge. Kinect Star Wars incluye la misma competición pero favoreciéndose de las posibilidades técnicas actuales, lo que se nota en un aspecto gráfico impresionante, una velocidad altísima, y una recreación cómo nunca habíamos visto de esta particular prueba.
También Kinect aporta su granito de arena para que sintamos una gran inmersión jugando, utilizando las dos manos. Estirando los brazos aceleras, y si das un empujón activarás el importante turbo. Vimos una carrera en Tatooine, en el mismo escenario del Episodio I, y la recreación de este era excelente, con un genial efecto que nos deslumbra al salir de la cueva, buenos efectos de polvo y partículas, y doce corredores en pantalla. Habrá dos métodos de control, asistido y pro, y parece que contará con su propio modo carrera, por lo que más que un minijuego o un mero añadido, es una parte del juego con su propio e importante peso.
Después tuvimos tiempo de ver el divertido modo Rancor, en el que manejaremos una de estas bestias de diez metros teniendo que aterrorizar a los indefensos ciudadanos de Mos Eisley, llevando el caos y la destrucción a una de las localizaciones más icónicas de Star Wars. Puedes correr, dar saltos, destrozar todo tipo de viviendas, coger a los ciudadanos y lanzarlos por los aires, una gamberrada bastante grande. Como si de una actualización a las 3D del clásico Rampage se tratará, teniendo que hacer el mayor número de puntos. Hay que destacar que las físicas de destrucción de los edificios no están nada mal, y su mayor punto flaco parece que será el no poder ser jugado por dos jugadores a la vez, aunque todavía está por confirmar.
Y por último vimos el más polémico y singular modo de juego que contiene, el modo Baile, inspirado en la famosa escena que comparten Jabba el Hutt y la Princesa Leia en El Retorno del Jedi. Un minijuego que es mejor tomarse con humor y no darle mayor importancia ya que un fan acérrimo de la saga se lo podría tomar como una ofensa, siendo bastante ridículo y disparatado. Se pidieron voluntarios, pero ningún periodista en las presentación se quiso prestar a bailar un rato, y al final tuvo que ser uno de los propios desarrolladores el que se animara con un baile, para cachondeo de los allí presentes.
Podremos elegir varias canciones, y participar dos jugadores, y al comienzo de los temas Jabba el Hutt y la Princesa Leia observarán nuestros pasos desde el fondo. La jugabilidad es a lo Dance Central y llegado un momento de la canción la propia Princesa Leia salta a la pista de baile y se pone a competir con nosotros, además de una manera muy sexy y que para algunos, que es un icono de nuestra infancia, causa cierto estupor… Por si la escena ya no fuera lo suficientemente perturbadora, con varios bichos de la saga canturreando por el fondo, la canción que sonaba era el famoso tema del pasado año We No Speak Americano de Yolanda Be Cool pero cantada en el idioma de Jabba el Hutt, algo muy loco a la vez que gracioso.
Kinect Star Wars llegará dentro de unos pocos días, ya en el tercer año del dispositivo, y la verdad que tiene pinta de ser uno de los juegos más completo y divertidos para Kinect. Además de una aventura en la que nos convertiremos en un caballero Jedi, podremos competir en divertidas y frenéticas Carreras de Vainas, destruir una ciudad encarnando a un Rancor, e incluso echarnos unas risas bailando como si estuviéramos en un Dance Central. También habrá un modo de duelos uno contra uno, aunque todavía no lo hemos podido ver. Con todos sus escenarios, personajes, menús, sonidos y músicas basados con mucho acierto y cuidado en la popular saga de películas, y además un muy, muy buen aspecto gráfico, algo de lo que más nos sorprendió en esta presentación, el 3 de abril comprobaremos hasta donde llega, un juego que puede de los mejores para el control por movimientos sin mando de Xbox 360.