Desde su estreno en 1992 para Super Nintendo, Mario Kart no ha faltado a su cita con cada consola de Nintendo, sin duda una de la sagas más queridas y a la que más horas han dedicado todos los fans de la compañía nipona. Divertidas carreras con karts que se sustentan en unos cimientos jugables a prueba de bombas, en una saga en las que las novedades se introducen con mucho cuidado y a cuentagotas, por miedo a estropear lo que viene funcionando tan bien desde hace ya más de 20 años.
El momento más esperado para los usuarios de Wii U está a punto de llegar, el próximo 30 de mayo podremos empezar a disfrutar de Mario Kart 8, una apuesta segura de calidad y diversión, que por suerte ya hemos podido probar a fondo, tras nuestro primer contacto con él en el pasado E3 de Los Ángeles. Si ya nos gustó jugando unos pocos minutos en la atestada feria angelina, ahora que hemos tenido más tiempo para disfrutarlo con calma, ver más circuitos y jugar campeonatos enteros, las primeras buenas sensaciones no hacen más que reafirmarse, estamos ante un absoluto juegazo.
La principal novedad de esta entrega es la antigravedad, la posibilidad de correr por las paredes y hasta boca abajo por unos circuitos llenos de caminos, atajos y obstáculos, que con doce corredores e infinidad de ítems hacen que las carreras sean una auténtica locura, en las que como siempre el factor suerte tiene un gran protagonismo además de por supuesto la habilidad y destreza de cada jugador. Si tradicionalmente los circuitos ya contaban con algunos atajos o rutas alternativas para recorrerlos, imaginaros ahora que también nos dejan correr por las paredes.
Para saber que vamos a entrar en el modo antigravitacional, unas placas azules en el suelo nos lo indican perfectamente, y pueden estar situadas al borde de una pared para subirnos a ella, o por ejemplo en un salto antes de caer al agua, para después flotar sobre ella, protagonizando tramos a veces opcionales y otras obligatorios. Estando en este modo, si chocas contra otro jugador giras en vez de producirse el típico golpe, y los pilotos reciben un impulso de velocidad, al que han denominado "choque con acelerón". Como es lógico los nuevos circuitos diseñados para Mario Kart 8 aprovechan a fondo esta característica, su diseño se ha realizado con ella en mente, pero también en las pistas recuperadas de anteriores entregas podemos entrar en ciertos momentos en modo antigravedad.
Como es habitual en las últimas entregas tendremos 32 circuitos, 16 nuevos y 16 clásicos, repartidos en 8 copas que podemos jugar en las tres cilindradas/dificultades habituales: 50 cc., 100 cc. y 150 cc. Entre los circuitos clásicos tenemos Mario Circuit (GBA), Dry Dry Desert (GCN), Tick-Tock Clock (NDS), Grumble Volcano (Wii), Music Park (3DS), Piranha Plant Slide (3DS), DK Jungle (3DS), Moo Moo Meadows (Wii), Cheep Cheep Beach (NDS), Toad’s Turnpike (N64), Donut Plains 3 (SNES), Royal Raceway (N64). Es tal el salto gráfico, y las novedades jugables (antigravitación, correr debajo del agua y por el aire), que cuesta reconocerlos, y se sienten como si fueran completamente nuevos, aunque como hemos dicho se nota que los diseñados desde cero para Mario Kart 8 aprovechan mejor las nuevas características. Por cierto, olvidaros de las enormes autopistas de la entrega de Wii, los nuevos circuitos son más estrechos y técnicos, llenos de obstáculos y trampas, realmente difíciles.
Mario Kart 8 cuenta con algunas de las novedades de las últimas entregas. De Mario Kart Wii vuelven las motos, y la posibilidad de jugar con el control por movimiento mediante los giroscopios del GamePad, algo que podemos activar o desactivar en cualquier momento pulsando en la pantalla táctil. Y de Mario Kart 7, la entrega de 3DS, toma prestado volar por el aire y conducir bajo el agua, además de la personalización de los karts, eligiendo la carrocería, las ruedas y el tipo de ala delta, lo que modifica la aceleración, el peso, el manejo, etcétera.
En lo respecta a los ítems, de momento solo os podemos hablar de dos nuevos. La flor bumerán rescatado de Super Mario 3D Land, que podemos lanzar hasta tres veces, hacia adelante o hacia atrás, aunque tenemos que esperar a que vuelva a nuestras manos para volver a tirarlo. Este puede producir situaciones muy curiosas, ya que el arco que dibuja en su recorrido te permite golpear a varios rivales con un solo lanzamiento, y es posible que impactemos a un corredor en el camino de idea, y a otro en el de vuelta, destapándose como un ítem muy divertido. Y el otro es la planta piraña, que va mordiendo o comiéndose todo lo que se pone a tiro, como monedas, otros corredores, las cáscaras de plátano o incluso los caparazones que lanzan nuestros rivales. Así que ya sabes, si ves a un corredor con una planta en su kart, mejor que no te acerques demasiado.
En cuanto a los personajes, de momento hay 27 confirmados, tres nuevos para este embargo, Metal Mario, Lakitu y Shy Guy, que se suman a los ya conocidos: Mario, Luigi, Princesa Peach, Yoshi, Bowser, Donkey Kong, Toad, Koopa Troopa, Princesa Daisy, Toadette, Wario, Waluigi, Rosalina, Baby Mario, Baby Luigi, Baby Peach, Baby Daisy, Larry Koopa, Morton Koopa Jr., Wendy O. Koopa, Iggy Koopa, Roy Koopa, Lemmy Koopa, Ludwig von Koopa, siete Koopalings que son una simpática incorporación a esta entrega, y que nos han gustado mucho.
En los modos de juego además del Grand Prix con sus ocho campeonatos y las distintas dificultades, también tenemos Contrarreloj, Batalla y Carrera VS, una gran ausente de Mario Kart 7 que vuelve para la octava entrega y que nos permite elegir con libertad el tipo de partida que queremos jugar, eligiendo el número de carreras, los circuitos, la cantidad de corredores o la dificultad de la CPU. Por supuesto tenemos el clásico Multijugador local para cuatro jugadores y dos opciones en línea. Online un jugador y Online dos jugadores, modos de los que todavía desconocemos los detalles.
Aquellos que venís pidiendo desde hace tiempo un modo historia o carrera similar a lo visto en juegos como Diddy Kong Racing, Crash Team Racing o el más reciente Sonic & All-Stars Racing Transformed iros olvidando, Mario Kart 8 vuelve con los modos clásicos de siempre, lo que es un poco decepcionante, y que viendo otros juegos no parece que sea tan difícil de hacer. Por último mencionar Mario Kart TV, que nos permitirá grabar los mejores momentos de las carreras y compartirlos en vídeo a través Miiverse, algo de lo que todavía no os podemos dar más detalles.
En cuanto al GamePad y sus usos, estos son anecdóticos. En la pantalla táctil vemos la clasificación de la carrera, tenemos una pequeña ventana en la que si pulsamos pasamos al modo off-TV al instante, un mapa del circuito, si tocamos en el centro en un icono enorme hacemos sonar el claxon, y pulsando sobre el icono de un volante pasamos al modo de juego con los giroscopios, moviendo el mando. Para saber qué más cosas se podrían haber hecho con él, no hay más que echar la vista atrás y mirar lo que ofreció Sonic & All-Stars Racing Transformed en la misma consola, uno de sus títulos de lanzamiento.
En este podíamos usar el GamePad de espejo retrovisor, permitía multijugador local hasta para cinco jugadores –la única versión del juego en el que se podía hacer esto-, y dos jugadores podían jugar en su respectiva pantalla, uno en la tele y otro en el mando. Pues bien, nada de esto se puede hacer en Mario Kart 8. En cuanto a posibilidades de control, este acepta mando de Wii (Plus), mando de Wii con volante, mando de Wii con el Nunchuk, mando de Wii con el mando clásico (Pro), o el Wii U Pro Controller, vamos todas las combinaciones posibles, así que como veis será complicado no tener mandos suficientes en casa para jugar con unos amigos.
Respecto a los gráficos decir que son fantásticos, se ve precioso a unos impecables 60 fotogramas por segundos, incluso con dos jugadores a pantalla partida –con tres o cuatro jugadores, se moverá a 30fps -, uno de esos juegos de Nintendo a los que la alta definición les ha sentado genial. Para que os hagáis una idea, sus gráficos recuerdan mucho a los de Super Mario 3D World, pero aquí mucho más meritorios, con circuitos enormes y hasta doce personajes en pantalla, con todo tipo de ataques y efectos gráficos la mar de resultones, con una iluminación muy cuidada y siempre con un colorido desbordante. Es sorprendente y prácticamente inaudito jugar a un título inacabado y que la tasa de imágenes sea tan rotundamente estable como en Mario Kart 8.
Un imprescindible para Wii U
Si todavía algún fan de Nintendo se había resistido a los encantos de Wii U pese a juegos tan buenos como Super Mario 3D World o Donkey Kong Country: Tropical Freeze, con Mario Kart 8 va a ser muy difícil resistirse a la tentación, un título que promete infinitas horas de diversión, que es tan divertido como siempre, pero que nunca se había vito tan bonito y espectacular. Si bien sus modos para un jugador nos han decepcionado un poco, son los de siempre, tenemos muchas ganas de ver qué nos tienen preparados para el modo online, que de estar lo suficientemente trabajo puede ser una de las mayores bazas no solo del propio juego, sino de todo el catálogo de la consola. Estará disponible el 30 de mayo, pero hasta entonces todavía tenemos muchas cosas que contaros sobre este título tan esperado.