Se ha hecho de rogar más de los que nos hubiese gustado, pero el mes que viene por fin se acabará la espera y podremos disfrutar de Fire Emblem: Three Houses, la próxima entrega de una de las sagas más veteranas y aclamadas de Nintendo, a pesar de que estuvo a punto de desaparecer por su falta de éxito comercial hace no tantos años. Por suerte para todos los que amamos la estrategia rolera por turnos, Intelligent Systems consiguió, en su momento más oscuro, dar con la tecla para conectar con el público gracias al lanzamiento de Fire Emblem: Awakening en 2013.
Desde entonces, la serie está viviendo una segunda juventud con multitud de juegos y spin-offs a los que poca pega podemos poner.
Sin embargo, no vamos a negar que echábamos de menos una nueva entrega principal para una consola de sobremesa, y eso es justo lo que aquí vamos a encontrar.
Por desgracia, y a pesar de lo poco que queda para que llegue a las tiendas, no ha habido ninguna demo jugable en el E3, algo que tiene cierto sentido si tenemos en cuenta que una feria de videojuegos no es precisamente el mejor entorno para probar un SRPG, así que no os podemos traer impresiones de primera mano con él.
La buena noticia es que gracias al Treehouse de Nintendo hemos podido echarle un buen vistazo a más de media hora de su jugabilidad, lo que nos ha permitido despejar muchas de las dudas que nos había generado, dejándonos con muchísimas más ganas que antes incluso de que llegue el 26 de julio para poder sumergirnos en su mundo.
La vida en la academia
Tal y como os adelantamos en nuestro anterior avance, esta vez la historia nos llevará a convertirnos en uno de los profesores de la Academia de Oficiales (podemos escoger si queremos ser un hombre o una mujer) de Fódlan, donde las tres grandes naciones del continente (Adrestia, Faerghus y Leicester) mandan a los hijos de las familias más importantes para que sean adiestrados en cuestiones militares y políticas para así prepararlos para dirigir sus respectivos países cuando llegue el momento.
Un detalle muy interesante que hemos descubierto durante este E3 es que todo el tramo argumental que juguemos como profesores de la academia ocurrirá cinco años antes de que estalle un gran conflicto que enfrente a las tres facciones entre sí, lo que se traducirá en una guerra abierta entre todos nuestros alumnos.
Desde luego, esto es algo que nos ha dejado muy intrigados por todas las consecuencias que puede traer consigo a nivel jugable y de desarrollo, así que es de suponer que se están guardando bastantes cosas para sorprendernos el mes que viene, algo que siempre es de agradecer en una época en la que las propias compañías se empeñan en mostrarnos demasiadas cosas de sus juegos.
Así pues, tendremos un título que dividirá su jugabilidad en dos partes bien diferenciadas. La primera y la que más se ha promocionado es nuestra vida en la academia, un entorno tridimensional por el que nos podremos mover con total libertad. Aquí cabe destacar que nos ha llamado mucho la atención el enorme tamaño que tiene la escuela, con multitud de salas y alas en las que poder hacer unas actividades u otras. Para que os hagáis una idea de su escala, basta decir que se ha incluido una opción de viaje rápido para evitarnos largas caminatas.
El tiempo que pasemos aquí podremos invertirlo en multitud de cosas, como hablar con nuestros alumnos para cultivar nuestras relaciones con ellos e incluso para reforzar los lazos afectivos e íntimos que tienen entre ellos, decidir con quienes nos queremos sentar a comer, realizar tutorías, dar clases para instruirlos en diferentes especialidades y estilos de combate, controlar su progresión en el campo de batalla, etcétera.
Nos ha gustado muchísimo ver cómo todo lo que hagamos tiene sus consecuencias y afecta a la motivación y rendimiento de cada personaje, lo que puede llegar a tener diferentes tipos de efectos, como que alguien no nos quiera ver ni de lejos por haberle molestado con una mala respuesta o que durante los entrenamientos se esfuercen más y obtengan mejores resultados de lo normal.
Al final se trata de un sistema que nos obliga a tomar multitud de pequeñas decisiones que van conformando nuestro día a día y que nos ha recordado muchísimo a lo visto en la saga Persona. De hecho, existe un calendario y cada día tendremos un número limitado de acciones que podemos realizar, por lo que conviene planificar muy bien lo que queremos hacer, teniendo en cuenta cosas como las semanas de vacaciones o las fechas en las que toque batallar y salir a cumplir misiones.
Gracias a todo esto también tendremos un control enorme sobre la evolución de nuestras unidades, pudiendo personalizarlas y especializarlas en unas cosas u otras para que progresen de la forma que deseemos, llevando la saga un paso más allá en este sentido.
Si hay algo que promete este juego con todas estas cosas es una rejugabilidad gigantesca, especialmente si tenemos en cuenta que deberemos unirnos a una de las tres grandes casas de la academia. Cada una representa a una de las tres naciones de Fódlan y, por lo tanto, nos ocuparemos de unos alumnos u otros, así que dependiendo de nuestra elección tendremos la oportunidad de profundizar en exclusiva en los trasfondos de ciertos personajes. Por supuesto, las unidades que controlaremos también cambiarán.
El campo de batalla
Por supuesto, esto no sería un Fire Emblem sin lo que ha caracterizado a la saga: sus espectaculares y fantásticas batallas. Estas siguen la fórmula habitual, así que tendremos que mover, por turnos, a nuestros héroes por un mapa dividido en casillas para atacar a nuestros rivales y acabar con ellos.
Evidentemente, cada unidad tiene multitud de características únicas, con sus propias fortalezas y debilidades que deberemos conocer para así tomar las mejores decisiones posibles. Por ejemplo, hay armas que son más fuertes que otras (aunque ahora hay de tantos tipos que ya no podemos hablar de un "triángulo" como tal) y los enemigos pueden contraatacar en nuestro mismo turno si al realizar nuestra ofensiva contra ellos estamos dentro de su rango de alcance.
Además, el terreno de combate tendrá una gran importancia y nos dará ciertas bonificaciones o penalizaciones, y las armas vuelven a desgastarse con el uso, algo que no veíamos en la serie desde Fire Emblem: Awakening.
Como veis, se juega como un Fire Emblem de toda la vida, y si ponemos a nuestras unidades en casillas cercanas se potenciarán entre ellas y aumentarán sus niveles de amistad y confianza, haciendo que la elección de nuestro grupo sea importantísima para intentar sacarles todo el partido posible a las diferentes sinergias que tengan los personajes.
Pero lo que más nos ha gustado ha sido comprobar el magnífico diseño de sus mapas y misiones, repletos de elementos interactivos, trampas, objetivos (hay que hacer muchas más cosas que simplemente limpiar el mapa de enemigos o acabar con el general de turno) y situaciones únicas que prometen aportar muchísima variedad y poner a prueba nuestras dotes como estrategas.
Por ejemplo, en la primera misión que enseñaron tendremos que derrotar al general del ejército rival a la vez que mantenemos con vida a nuestros aliados, quienes se encuentran en una situación muy peliaguda, por lo que deberemos procurarles una vía de escape bajando un puente mientras nos ocupamos de sus perseguidores.
En cambio, la segunda pantalla que se mostró era radicalmente distinta, emplazándonos en el interior de una especie de templo con un diseño muy "mazmorrero" y laberíntico, y con multitud de estrechos pasillos, trampas, puertas e interruptores que convertían el avance por él en una especie de puzle gigantesco.
Quizá donde menor ha sido el salto que se ha pegado ha sido en el aspecto técnico, con unos escenarios un poco desangelados y unas animaciones que podrían dar para algo más, aunque el cel shading que se ha aplicado a los personajes nos encanta y hace que sus modelados luzcan realmente bien. Eso sí, el diseño que tienen nos sigue sin terminar de convencer (tienen muchísima menos personalidad y carisma que en entregas anteriores) y hay demasiados altibajos.
En lo referente al sonido, destacar que el título nos llegará con textos en español y con la posibilidad de escoger entre el doblaje japonés y el inglés, una opción que siempre es de agradecer, especialmente en esta entrega, ya que parece contar con un volumen mucho mayor de diálogos doblados.
¿Qué casa elegirás?
Cuanto más sabemos de Fire Emblem: Three Houses, más ganas le tenemos y mejor pinta tiene. Tanto la historia como la vida en la academia y las batallas prometen tenernos completamente enganchados de principio a fin si finalmente, una vez estemos a los mando, cumple todo lo que parece prometer.
De hecho, su premisa argumental nos ha sorprendido por el tono tan oscuro, cruel y dramático que tiene, algo que no intuíamos demasiado cuando nos dijeron que íbamos a convertirnos en los profesores de una academia. A fin de cuentas, nos van a hacer encariñarnos de nuestros alumnos y a tutelarlos durante un año escolar entero para luego ver cómo se matan entre ellos en una cruenta guerra.
Como decimos, todavía nos quedan muchísimas cosas por saber sobre esta nueva entrega, pero todo apunta a que Intelligent Systems lo ha vuelto a hacer y a que el Emblema de Fuego volverá a brillar una vez más para convertirse en uno de los grandes del catálogo de Switch. El 26 de julio saldremos finalmente de dudas, así que quizá queráis ir marcando esa fecha en vuestro calendario.