Los fans de los juegos de terror estamos viviendo una época dorada en los últimos años con propuestas novedosas, juegos que siguen la estela de los influyentes Amnesia, el renacer de Resident Evil y la vuelta de sagas muy queridas con remakes como Dead Space y Silent Hill 2. En esta última categoría se podría enmarcar Alone in the Dark, anunciado en agosto y con su lanzamiento a la vuelta de la esquina: el 25 de octubre para PC, PlayStation 5 y Xbox Series X/S.
Sin embargo, en una presentación digital nos quedó claro que no se trata de una puesta al día exacta de la obra transgresora de Frédérik Raynal, sino de una reinvención que ha contado con su supervisión. Hay diferencias en la jugabilidad que lo acerca al camino marcado por Resident Evil 2 Remake, unos valores de producción altos, actores de primer nivel y una historia de terror psicológico que viene firmada por el director creativo Mikael Hedberg, guionista de los alabados Amnesia: The Dark Descent y SOMA.
Dos protagonistas, dos historias inquietantes y surrealistas diferentes
El nuevo Alone in the Dark empieza de manera muy parecida al original de 1992. Emily Hartwood recibe una inquietante carta de su tío Jeremy, quien ha desaparecido. Por ello contrata al detective Edward Carnby y se adentran en la mansión Derceto para averiguar lo que ha ocurrido. Pero aunque hay guiños a los juegos anteriores, la historia es nueva, los personajes tienen otras motivaciones y se utilizan otros tonos.
De manera similar a Resident Evil 2 Remake, la campaña será distinta si se juega con el detective o con la mujer que le contrata. Cada uno tiene niveles exclusivos y se exploran partes diferentes de la mansión, y hay escenas cinematográficas y conversaciones con los NPC distintas. Habrá momentos en los que nos encontraremos con el otro, que investiga por su cuenta, tanto en secuencias de gameplay como de vídeo, pero nunca se pasará el control de uno a otro durante la partida.
Además, los personajes tienen personalidades muy diferenciadas. Mientras que Edward (interpretado por David Harbour: Stranger Things, Hellboy) va aprendiendo poco a poco el misterio de la mansión Derceto, Emily (Jodie Comer: Killing Eve, El último duelo) tiene una conexión emocional por la supuesta maldición que afecta a su familia, y por supuesto, por encontrar a su tío. El detective, como no podía ser de otra manera con la ambientación de los años 40, sigue el tropo del cine negro. Es cauto y algo rudo, pero tampoco le falta el humor; y Hartwood es curiosa, valiente y está apasionada por la intriga del caso.
A pesar de que el arranque es similar, el argumento tiene diferencias, en parte porque tiene que durar mucho más: el original se podía completar en apenas cinco horas. Por ejemplo, aquí Jeremy Hartwood no se suicida, sino que va a terapia, lo que tiene consecuencias evidentes para la trama. También se profundiza en cosas que antes solo se dejaban entrever, como el pasado de Derceto y las tradiciones y la relación con el vudú de la población de esta zona de Luisiana.
El equipo de Pieces Interactive define el juego como una "carta de amor al original" y aseguran haberse fijado en su tono, pero ahora es un título de terror psicológico más oscuro y más tenebroso, hay secuencias oníricas que apuntalan el horror cósmico, y también referentes admitidos muy atractivos: Silent Hill, la extrañeza de Twin Peaks y la película El corazón del ángel. Unas bases fantásticas para crear un juego que pasará de los sobresaltos y la abundancia de los enemigos para centrarse en el miedo no explícito, en la inquietud por lo que está por venir.
Una apuesta equitativa por los puzles, la exploración y la acción
Esta apuesta por el terror a fuego lento también se lleva a los mandos. Sí, el inventario y los controles se han modernizado, y se ha adoptado una cámara en tercera persona sobre el hombro, pero eso no quiere decir que esto vaya a ser un festival de tiros. Los desarrolladores aseguran que la aventura da el mismo peso a la acción, a la exploración y a los puzles, y que en todo caso, se centra más en estos dos últimos pilares.
También son conscientes de que no todos están por la labor de atascarse mucho rato en un rompecabezas como podía pasar en el original, así que los jugadores podrán elegir la dificultad por separado para los distintos elementos del juego, como cuántas pistas quieren para los puzles y cuánto quieren que los guíen en la exploración. Los puzles requieren estar atentos a los escenarios y pensar de manera no lineal, pero se puede ajustar cuánta información aparece en el mapa, cuántas pistas tienes para cada acertijo y cómo de fácil es encontrar los elementos interactivos de los escenarios.
Escenarios, por cierto, que nos llevarán más allá de la mansión Derceto, que promete ser laberíntica. Hemos visto secuencias por túneles, por espacios un poco surrealistas, y también por las calles de una ciudad, probablemente Nueva Orleans. Son lugares que parecen pasilleros, pero no por ello tienen que ser lineales: depende de los recovecos y las interconexiones que veamos en el juego final.
Lo que sí nos genera dudas es el combate, que parece ser igual con Edward y con Emily. Hay armas de fuego, aunque las balas no sobrarán. Por eso se ha introducido un sistema de combate cuerpo a cuerpo que parece algo más fofo de lo que nos gustaría. Aunque también hay cosas interesantes, como coger botellas y otras cosas del escenario para lanzarlas a los enemigos, o poder disparar a un charco de gasolina para que las llamas se extiendan.
Claroscuros visuales
Es en esos detalles donde se nota que tiene espíritu de superproducción, pero que no cuenta con los recursos de los grandes estudios de la industria. Claro, esto también se aprecia en los gráficos, que están a medio camino entre el AA y el AAA. Los personajes, especialmente los interpretados por David Harbour y Jodie Comer con captura completa de la actuación, lucen genial, pero tienen cierto toque cartoon que no acaba de convencernos y las animaciones en la partida son un tanto robóticas. Lo mismo nos ocurre con el diseño de los enemigos, a los que le vemos poca personalidad.
Los escenarios están muy bien recreados, pero destacan sobre todo los interiores durante el día gracias a una iluminación fotorrealista espectacular a pesar de que no utiliza el trazado de rayos; de hecho, hay momentos en los que se utilizan contrastes fuertes y colores cálidos que nos han recordado a la estética de Control. En lo musical, parece único: lo que hemos escuchado de su banda sonora orquestada, inspirada por el cine negro y el doom jazz, promete un tono oscuro y alterado con sus momentos de calma y las secuencias de percusión contundente e instrumentos de cuerda intensos.
Volveremos a la mansión Derceto el 25 de octubre
Alone in the Dark tiene muy buena pinta. Quizá no logre ser una gran superproducción como otros juegos de terror que hemos disfrutado en los primeros meses de 2023, pero tiene toda nuestra atención por su ambientación, sus dos campañas, su terror psicológico con referentes interesantísimos, y por ese equilibrio prometido entre acción, exploración y puzles cuya dificultad se adaptarán a los gustos de cada jugador. Quizá el combate no luzca tan bien, y de la exploración hemos visto demasiado poco como para juzgarla, pero en conjunto parece que, por fin, estamos ante un renacer de la saga en condiciones.
Hemos realizado estas impresiones tras asistir a una presentación digital invitados por Dead Good Media.