Tras varios retrasos de mayor o menor importancia Uncharted 4: El Desenlace del Ladrón se ha hecho mucho de rogar para los usuarios de PlayStation 4, ávidos de grandes títulos exclusivos, pero por fin hemos podido probarlo y comprobar que la espera ha merecido la pena, y que vamos a estar ante un juego que va a marcar un antes y un después dentro del catálogo de la consola de Sony.
Uncharted 4 se pondrá a la venta el 10 de mayo, y en un evento celebrado la semana pasada en las oficinas de Sony en Madrid pudimos jugar a la versión final y charlar con Ricky Cambier, Lead Game Designer, y Arne Meyer, Community Strategist, dos componentes de Naughty Dog que nos dieron nuevos detalles de un juego que introduce muchas más novedades y cambios dentro de la saga de lo que todos nos esperábamos.
Incluso nos atreveríamos a decir que es el Uncharted que más innova desde la primera entrega de la serie, algo sorprendente teniendo en cuenta que en Naughty Dog no paran de decir que este será su último juego de la saga, y que con el se despedirán de Nathan Drake, cerrando su historia. Podían haber ofrecido un más de lo mismo de manual, con mejores gráficos, pero han querido aprovechar la potencia de PlayStation 4 para ofrecer escenarios más amplios, una inteligencia artificial mejorada, tanto de los enemigos como de los aliados, y un nuevo sistema de sigilo, que nos permite ahora afrontar muchas de las situaciones con acción directa o intentando pasar desapercibidos, pudiendo incluso mezclar ambos estilos de juego.
En la parte de la aventura que pudimos jugar comprobamos algunas de estas novedades, ya que se desarrollaba en Madagascar, en un escenario muy amplio que podíamos explorar con libertad. Comenzábamos controlando un todoterreno conducido por Nathan Drake y al que le acompañaban un viejo conocido, Víctor Sullivan, Sully para los amigos, y Sam Drake, el hermano de Nathan que tendrá un papel clave en el argumento de esta entrega, ya que será quien empuje de nuevo a Nate a la aventura, en busca de un tesoro que llevan toda la vida anhelando, desde que eran niños.
Una vez que conseguimos cerrar la boca tras admirar su espectacular apartado gráfico, del que después hablaremos en detalle, empezamos a explorar el amplio escenario conduciendo el jeep con total libertad, con un control exquisito y unas físicas y movimientos del coche francamente sorprendentes, un vehículo que protagonizará diferentes momentos del juego, y no solo de acción. En cualquier momento podíamos bajarnos y explorar el escenario a pie, pero para poder llegar hasta nuestro objetivo teníamos que hacerlo montados en el todoterreno, que había que utilizar para atravesar un puente de madera y escalar una pequeña montaña con barro resbaladizo, que teníamos que evitar apoyando las ruedas sobre las piedras.
El coche no solo será un medio de transporte para recorrer los escenarios, sino que tendrá cierto protagonismo en algunas escenas, y no solo en persecuciones. El subir la montaña era una especie de pequeño "plataformeo" o puzle, ya que sobre el barro perdíamos la adherencia, y teníamos que buscar el camino apropiado. Más adelante llegamos a una cuesta que era imposible subir porque estaba encharcada de barro, y para hacerlo teníamos que bajarnos y coger el cabestrante del vehículo y atarlo a un árbol. Esta herramienta se usará en diferentes momentos, en pequeños puzles, como vimos más adelante para derribar una estructura y poder seguir avanzando. Para que os hagáis una idea, algo así como el uso del Batmóvil en algunos puzles de Batman: Arkham Knight.
Después de superar esta situación llegábamos de nuevo a un escenario bastante amplio, que exploramos encontrando algunos tesoros. Curiosear por los entornos no solo servirá para encontrar coleccionables, sino también para que surjan conversaciones o escenas entre los personajes que de otra manera no veríamos, algo así como lo que ocurría en The Last of Us, el anterior juego de Naughty Dog, del que ha heredado bastantes cosas, tanto en lo narrativo como en lo jugable.
Para no confundir a nadie, Uncharted 4 sigue siendo un juego lineal, tenemos que ir del punto A al punto B, pero ya no es un juego "pasillero", ahora podemos llegar a nuestro destino de diferentes maneras, encontrando algunas recompensas si somos curiosos. En Naughty Dog son conscientes de que uno de los puntos fuertes de la saga, una de sus características más alabadas, es el ritmo que han tenido siempre sus juegos, y ahora parte de este ritmo recae en la responsabilidad del jugador, que podrá entretenerse en muchos momentos. Como nos dijo Ricky Cambier en una entrevista, Uncharted 4 combinará las típicas situaciones lineales y espectaculares de la serie, con otros momentos más abiertos, dando libertad para jugar como queramos. ¿Funcionará igual de bien esta nueva fórmula? No lo descubriremos hasta dentro de unas semanas, pero no hay demasiados motivos para dudar del buen hacer de Naughty Dog.
Después de los momentos de exploración con el jeep llegamos a un campamento enemigo, y comenzó la acción. Al movernos por un escenario enorme, en una situación más propia de un Far Cry que lo que estábamos acostumbrados en un Uncharted, teníamos multitud de ángulos desde los que afrontar al enemigo, teniendo también la libertad de jugar con sigilo o acción directa. No es la primera vez que la saga coqueta con la infiltración, pero anteriormente lo hizo de muy encorsetada y limitada, y ahora es una verdadera posibilidad jugable.
Podemos caminar agachados por la hierba alta para que no nos vean, y si apuntamos a los enemigos podemos marcarlos, para que aparezca un icono sobre su cabeza y tenerlos siempre localizados, una mecánica también muy Far Cry. Los enemigos pueden tener diferentes estados de alerta, indicados por el color blanco, amarillo o naranja, y un marcador sobre su cabeza se va llenando cuando creen que nos han visto, teniendo unos segundos para ocultarnos. Si nos descubren el estado de alerta no es irreversible, y podemos escondernos mientras nos buscan hasta darles esquinazo.
En el centro de este campamento improvisado, unas ruinas, había una enorme torre con un francotirador arriba del todo, a por el que fuimos directamente antes de intentar acabar con el resto de enemigos. Aquí comprobamos el mejorado sistema de escalada, mucho más fluido y natural, gracias a las nuevas animaciones, que no dudamos un segundo en afirmar que son las mejores que hemos visto nunca en un videojuego. Este es un aspecto que le gusta mucho cuidar a Naughty Dog en sus juegos, y aquí se han superado, elevando todavía más el listón en uno de los aspectos más importantes en cualquier videojuego, sobre todo si es de acción y aventura.
Ahora no solo podemos escalar con las manos, y también podemos valernos de la cuerda con gancho, que abre una serie de nuevas posibilidades en la jugabilidad, tanto para la exploración y el plataformeo como para el combate. Si jugasteis a la beta multijugador ya habéis podido comprobarlo, y pasados unos minutos hasta que nos acostumbrados, empezamos a hacer auténticas virguerías. Gracias a esta herramienta la jugabilidad es mucho más vertical, y en los tiroteos nos invitan a no parar de movernos por el escenario, algo que es un placer hacer gracias a la buena respuesta de los controles y a las sobresalientes animaciones.
Cosas que nunca acaban de estar resueltas en muchos juegos, como descender de lugares elevados, ahora se realiza con muchísima fluidez y naturalidad, y la inteligencia artificial de los enemigos ahora parece más elaborada, no paran de moverse por el escenario buscándote las cosquillas, aunque no jugamos lo suficiente como para sacar conclusiones. Como a Naughty Dog parece que le gustan los retos, los dos personajes que nos acompañan, Sully y Sam, actúan por su cuenta, aunque imitan nuestro estilo, si estamos jugando con sigilo o de manera directa.
Gracias a The Last of Us seguramente hayan aprendido mucho a cómo introducir personajes aliados en la jugabilidad y que no molesten, y en lo que jugamos nos sorprendió la manera tan coherente en la que se comportaron en todo momento, echándonos una valiosa mano. Las ejecuciones cuerpo a cuerpo de los enemigos, que varían dependiendo del lugar del escenario que nos encontremos, nos parecieron innumerables y siempre espectaculares, y hubo una situación que nos demostró lo pulido que está el juego, al que es casi imposible verle una figura. Sully estaba machando a puñetazos a un enemigo, en lo que parecía claramente un script, e interrumpidos la escena con nuestros propios golpes, y todo se desarrolló con naturalidad, sin un fallo o brusquedad en las animaciones.
Es un juego que no deja de sorprendente ni un segundo en su pasión por los detalles, de lo cuidado que está todo, al que es casi imposible verle las costuras. Si se va a volver en un referente gráfico no va a ser por la calidad de las texturas, por la resolución, por la tasa de imágenes por segundo o por cualquier otro detalle técnico, en lo que también cumple por supuesto, sino más bien por el nivel de excelencia y perfeccionismo con el que está hecho todo, que te deja con la boca abierta a veces.
Las realistas animaciones del coche, cómo se mancha con las salpicaduras de polvo y el barro, la antena del jeep o una lata de combustible en la parte trasera que cuenta con sus propias físicas, cómo se comportan los personajes cuando vamos conduciendo, cambiando sus animaciones y la posición de las manos dependiendo de la velocidad, los baches o la inclinación, cómo reacciona la vegetación y cualquier elemento del entorno a nuestro paso, las diferentes animaciones de Nathan dependiendo del lado del vehículo por el que nos subamos… Asusta el nivel de perfeccionismo que se ha impuesto Naughty Dog con este juego, y nos deja embobados el nivel de detalle de los personajes en las cinemáticas, ahora perfectamente integradas en la acción, sin ninguna transición.
Algunos de estos detalles los vais a poder apreciar en los vídeos que hoy se están publicando, pero la comprensión de Youtube o los reproductores de las páginas web no le hacen justicia a cómo se ve en directo en un televisor, ya que es un juego que visualmente deslumbra. Es posible que en una comparación de pantallas estáticas frente a títulos visualmente también muy impactantes como Ryse: Son of Rome o The Order: 1886, Uncharted 4 pueda salir incluso perdiendo, pero cuando descubres la escala que tiene el juego de Naughty Dog, el enorme tamaño de los escenarios, la cantidad de enemigos y su elaborada inteligencia artificial, la compleja interacción con los objetos del entorno, y las fabulosas animaciones de los personajes, simplemente no tiene rival en estos momentos.
Para acabar comentar que jugamos a la versión final en castellano, y el doblaje parece tener un nivel altísimo, con las voces habituales de la saga, a las que ya nos hemos acostumbrado y a las que tenemos muchísimo cariño. Al ir en el juego siempre acompañados por otros personajes, habrá un montón de líneas de diálogo, y se agradece un doblaje tan cuidado.
El más difícil todavía
A nadie le va a sorprender a estas alturas que Uncharted 4 vaya a ser un juegazo, Naughty Dog se ha ganado a pulso el ser un estudio en el que se puede confiar ciegamente, pero da igual lo altas que lleves las expectativas, que el juego te aturde con su contundente calidad en todos y cada uno de los apartados, y aspira a convertirse en un absoluto referente en el mundo de los videojuegos, en lo técnico, en lo jugable e incluso en el terreno narrativo. A PlayStation 4 le hacía falta un bombazo como este, y ya estamos contando los días para que llegue la espectacular fiesta de despedida de nuestro querido Nathan Drake, que dará comienzo el 10 de mayo.
Hemos probado el juego en una presentación organizada por Sony en sus oficinas de Madrid