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Fecha de lanzamiento:
PS4, PC, XBOne:
FICHA TÉCNICA
Desarrollo: MercurySteam
Producción: MercurySteam
Distribución: PlayStation Network
Precio: 39,99 €
Jugadores: 1
Formato: Descarga
Textos: Español
Voces: Inglés
Online: Sí
ANÁLISIS

Impresiones Raiders of the Broken Planet

El modo cuatro contra uno del shooter de MercurySteam es un excelente y divertido ejemplo de juego asimétrico.
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Actualizado: 21:31 17/8/2020
Versiones PS4, PC, Xbox One. También disponible en Ordenador y Xbox One.

En el reciente evento en el que Microsoft presentó los juegos españoles que participan en el programa id@Xbox pudimos probar por primera vez uno de los modos de Raiders of the Broken Planet, el nuevo juego en el que está trabajando MercurySteam (Castlevania: Lords of Shadow).

La demo consistía en partidas de cuatro jugadores contra uno en un estilo de juego asimétrico en el que los cuatro jugadores cooperan para conseguir un objetivo mientras que el otro, llamado antagonista, debe evitar que cumplan su misión mientras intenta acabar con ellos. Un detalle que añade emoción a cada partida es que los cuatro no sabrán que hay un infiltrado hasta el mismo momento de empezar la partida.

Antes de empezar cada uno de los cinco jugadores elige un personaje y el equipamiento que va a llevar: dos cartas que le conceden distintas habilidades, el arma y una skin. Pero mientras que los cuatro jugadores que van juntos ven las características de su personaje, el antagonista ve lo que están eligiendo los demás jugadores, de forma que puede configurar su personaje para contrarrestar al equipo, que no conocerá la existencia de su enemigo humano hasta que empiece la pantalla de carga.

La inteligencia artificial se convierte en aliada para uno de los jugadores que intervienen en la partida.

Cuatro jugadores que cooperan para combatir contra la IA y un antagonista humano

En la partida de la demo, los cuatro jugadores debían eliminar a un gigantesco robot con tentáculos al tiempo que luchaban contra robots humanoides controlados por la inteligencia artificial. Ellos deben moverse como si se tratase de una misión en cooperativo de un shooter normal aunque con el añadido de tener que encargarse de un enemigo más, y el hecho de que ese enemigo es otro jugador.

La misión comenzaba sobre un puente y después pasaba a una zona con distintas alturas, todo ello lleno de coberturas, en las que te refugias de forma automática, aunque los demás jugadores pueden ver a través de las paredes con una habilidad.

Donde se percibe bien la peculiaridad del modo es jugando como antagonista. El personaje que elegimos, Konstantin, era un tanque, lento y fuerte, armado con una gatling. Como antagonista puedes elegir distintos puntos de reaparición para intentar sorprender por detrás a los miembros del equipo que van avanzando desde el puente hacia su objetivo.

El equipo tiene 12 vidas que comparte gracias al aleph, una sustancia clave en el juego. Cuando se acaban el piloto del vehículo que les ha llevado allí tiene que ir a por más aleph y esto concede al antagonista unos segundos en los que puede acabar con el pelotón sin que reaparezcan los jugadores y, por tanto, ganar la partida. La primera vez que esto sucede es medio minuto, y en las siguientes se va ampliando esta franja de tiempo.

Si los cuatro jugadores logran cumplir su misión antes de morir a manos del antagonista comienza una segunda fase enla que deben combatir contra a un jefe. El antagonista sigue desempeñando su misión de "molestar" a los demás jugadores e intentar matarlos, para lo que puede sorprenderlos por la espalda o unirse al jefe e incluso refugiarse cerca de él para que los demás jugadores no se le acerquen y unir así fuerzas con la inteligencia artificial.

Tres tipos de ataque cuerpo a cuerpo que funcionan con el método piedra, papel o tijera

La forma de combatir tiene en Raiders of the Broken Planet algunos matices respecto a un shooter normal y, por lo que hemos jugado y visto, la mejor forma de acabar con el enemigo es debilitarlo primero con disparos y después atacarle cuerpo a cuerpo con alguno de los tres tipos de ataque: normal, fuerte y agarre, y funcionan entre sí con el método de piedra, papel o tijera. Si el otro jugador está debilitado un golpe normal puede matarle y, si no lo está, el agarre es también mortal a no ser que lo contrarreste.

Hay habilidades especiales como un escudo o la generación de una esfera que repele a cualquier enemigo que esté cerca de tu personaje. Tienen un tiempo de enfriamiento.

Al acabar la partida los cuatro jugadores reciben una recompensa que les servirá para equipar a su personaje y el antagonista recibe de su maestro demoníaco estigmas que serán más o menos en función de cómo haya jugado. Estos estigmas son puntos que les servirán para subir en un ranking mundial.

Aunque pueda parecer que el jugador antagonista está en desventaja, la intervención de la inteligencia artificial puede desequilibrar la balanza a su favor, ya que los otros jugadores se enfrentan a una buena cantidad de androides y a enemigos potentes, y siempre deben vigilar por dónde puede atacar el antagonista para irse cubriendo las espaldas. Es aquí donde MercurySteam debe tener especial cuidado.

Se ha comparado este modo de juego (es inevitable) con Evolve pero poco más tienen en común que el hecho de que es juego asimétrico y un jugador se convierte en enemigo de los demás. Aquí ese jugador es quien lleva la iniciativa y los otros jugadores están más atareados con su misión que intentando matarle, en lo que es un concepto diferente y original.

Es un modo de juego divertido, aunque tiene algunos aspectos mejorables como el exceso de ayuda de la IA o la falta de agilidad en algunos puntos de la partida, pero tiene ingredientes para proporcionar buenas partidas.

Raiders of the Broken Planet va a ser un juego de acción por episodios que MercurySteam va a distribuir de forma digital en Xbox One, PS4 y PC, aunque aún no tiene fecha prevista de salida para el primer capítulo.

Estas impresiones se han escrito después de jugar a la versión de Xbox One en el evento id@Xbox organizado en Madrid por Microsoft.

Redactora