El 2 de diciembre del año pasado no fue un buen día para Ubisoft. Es cierto que Far Cry 4 estaba siendo un éxito de crítica y ventas, pero el lanzamiento de Assassin's Creed Unity estaba siendo un desastre. Burlas sobre los errores gráficos de la versión PC del juego, constantes problemas para jugar en el modo cooperativo que suponía su mayor novedad, una aplicación para tabletas que era un desastre y una imagen corporativa y de marca que iba dañándose día a día. Y entonces, la puntilla: se filtraba la existencia de Assassin's Creed Victory, dando al traste cualquier tipo de sorpresa que pudiese tener preparada la compañía.
Pero además de los comentarios haciendo sangre ("Unity está hecho un desastre y ya estáis anunciando el siguiente"), hubo muchos otros positivos. A fin de cuentas, desde hace ya años la ambientación en el Londres victoriano es una de las más deseadas por los usuarios, codo con codo con el Japón feudal y otras más modernas como las Guerras Mundiales o la Norteamérica actual.
Con el título definitivo de Assassin's Creed Syndicate, Ubisoft nos llevará esta vez a 1868 para trasladarnos a una Londres capital del mundo, cabeza del Imperio Británico, referente de la Revolución Industrial y escenario de unas primeras luchas obreras de las que seremos un actor principal.
Cuando Londres era la capital del mundo
A primera vista puede parecer que el juego se posiciona políticamente, ya que nosotros como asesinos encabezaremos las luchas obreras y los templarios en principio son los capitalistas. Ante esta preguna, uno de los responsables del juego nos aclaró que, como en el resto de la saga, en Assassin's Creed las cosas no son blancas ni negras, sino que todo acaba siendo gris, por lo que este Syndicate no será un "Assassin's de izquierdas" ni nada por el estilo. Nuestro personaje, eso sí, comenzará organizando las primeras luchas obreras en una época icónica de chimeneas humeantes y ladrillos rojos. Por el momento se han confirmado como personajes históricos Charles Darwin y Charles Dickens, pero es de esperar que aparezca también Marx, residente en Londres por las mismas fechas y autor del Manifiesto comunista. Tendría gracia que Ubisoft lo pusiese como jefe de los asesinos o algo parecido, del mismo modo que hizo con Maquiavelo en la segunda parte.
Hicimos en realidad muchas preguntas pero no nos respondieron a demasiadas. Sí nos confirmaron que el juego se ceñirá a Londres ciudad y no tendrá zonas de campiña ni -salvo sorpresa- visitas fuera de la ciudad. Al igual que en Unity, estaremos jugando solamente en la urbe, aunque nos confirmaron que el mapeado será un 25% más extenso que en el anterior juego, pero se recorrerá más rápido gracias a los carruajes que podremos controlar. Estará dividida en siete distritos históricos de Londres, dos de los cuales son Westminster y la propia City of London. Parece que el mapeado del juego abarcará más o menos la "zona 1" de Londres, para los que conozca la capital de Inglaterra.
Dos personajes, un solo jugador
Quizás escarmentados de la experiencia de Unity, aunque lo niegan categóricamente, Assassin's Creed Syndicate será para un solo jugador. Ni vuelve el modo cooperativo visto en Unity ni se integra alguna variedad multijugador competitiva de juegos anteriores. Syndicate nos ofrecerá únicamente una historia para un solo jugador, pero con la novedad de que controlaremos a dos personajes, al estilo GTA V: un chico y una chica. Cuando estemos en el mundo abierto podremos cambiar en cualquier momento el control entre cualquiera de los dos, y parece que el 70% de las misiones serán del hombre y el otro 30% restante de la mujer.
Dos demostraciones diferentes que nos enseñaron cómo cambian las cosas
En el E3 pudimos probar una demostración y ver otra nueva. La que probamos es la primera que se hizo del juego, en la que participamos en una guerra de bandas para hacernos con el control de un distrito, una buena manera de experimentar el nuevo sistema de combate, alguna mecánica nueva como lanzar dardos alucinógenos a las hogueras y la novedad estrella, el garfio. Éste nos permite subir a lugares sin tener que escalar, y también saltar de edificio en edificio usando el cable del garfio como tirolina. Puede parecer que esto rompe el juego, pero también lo refresca un poco. Aunque el parkour era impresionante la primera vez que se enseñó, corre el riesgo de cansar a los jugadores. Pero aparentemente la motivación de este garfio es que en Londres los edificios son más altos, de cinco o seis pisos, y las calles más anchas, haciendo que saltar de tejado en tejado sea inviable sin una ayudita.
Aun así, y esto lo comprobamos en la demostración nueva, el garfio cambia algunas cosas más. Cuando estemos en un escenario abierto como en la estación de Victoria podremos usarlo para trepar por su estructura y tener una ventaja sobre el escenario. Su uso es muy intuitivo aunque, al menos en la demo, no se podía apuntar sino que era el juego el que nos decía cuando pulsar L1 para trepar. No sabemos si en la versión final será así o tendremos más libertad.
Otra gran novedad es la presencia de carruajes, permitiendo divertidas persecuciones en las que podremos intentar echar de la carretera a otros, dispararles con la pistola e incluso subirnos al techo y saltar hacia otro de una manera muy peliculera. El sistema de combate por último ha cambiado un poco, requiriendo algo más de sincronización, pero extrañamente no pudimos probarlo con armas blancas. Por lo visto en las demostraciones se inspira mucho en películas como Sherlock Holmes; de hecho, hasta la música recuerda al film de Robert Downey Junior.
La segunda demostración es la "oficial" de este E3 y nos muestra una persecución por un tren que parte de la estación de Victoria en otra zona de Londres. Parece que el nuevo mundo de Assassin's Creed se mueve más rápido gracias a los nuevos medios de transporte y que esto permitirá nuevos tipos de misiones. La impresión que nos ha dejado Syndicate es buena. Ubisoft es muy consciente de que el juego le tiene que salir perfecto, impoluto a nivel técnico, para que la imagen de la serie no se vea perjudicada y poder volver a arriesgar el año que viene. Por otra parte, esto quizás decepcione a algunos jugadores que esperen alguna novedad importante a nivel jugable.
De todas formas, todavía queda mucho por ver, especialmente en el combate, ya que las armas de fuego son mucho más avanzadas en la época, y las cuerpo a cuerpo todavía están por enseñar. A nivel técnico se mueve muy bien, sin bugs, y hay efectos muy vistosos como el reflejo en los charcos. La ambientación promete ser un punto fuerte de un Assassin's Creed que visita una época memorable llena de personajes que encajan como anillo al dedo en una guerra oculta entre asesinos y templarios.